Invierno anterior:
Entré al café que quedaba a unas cuadras de mi departamento como hacía todos los sábados a esa hora y como siempre Brooklyn me dirigió una sonrisa y se puso a preparar mi chocolate con crema, como tomaba a diario cuando hacía frio.
Brooklyn es la empleada del café, pero de tanto que me vio venir tantos sábados seguidos sin falta, tomo cierta confianza, igual que yo con ella. Era como un rutina. Sábado, 3.30, café, con libros, música, trabajo, cuadernos para escribir, o simplemente yo, buscando un momento para mi, en el que puedo hacer lo que quiero, y apenas me siento en mi mesa habitual, el mundo desaparece y soy solo yo.
Le hice una seña a Brooklyn y me dirigí a la mesa de siempre, la que estaba al fondo pero pegada a la ventana. De vez en cuando me gustaba mirar por ella. Deje mis cosas sobre la silla de al lado y saque mi distracción de esta tarde. Mis auriculares y mi nuevo libro.
Me encantaba leer, pero mayormente prefería historias de amor, vivía sumergida en ellas. Me gustaría ser como alguna de esas chicas y tener mi historia de amor, pero eso era algo que no podía suceder, siendo que el amor era una de las cosas a las que más les temía.
-Que tal la semana?- preguntó Brooklyn de repente, sacándome de mis pensamientos. Estaba parada a mi lado dejando mi pedido en la mesa y haciendo la misma pregunta de siempre.
-Tranquila, me dieron una nueva historia para corregir, parece prometedora- dije dedicándole una sonrisa de agradecimiento por la atención.
-Si es buena y se publica, pasame el nombre-
-Por supuesto que lo haré! Como con todas las buenas historias-
-Como con todas las buenas historias- repitió ella alejándose con una sonrisa hacia su puesto de trabajo.
Historias, eso es lo único que son. Son inventadas, irreales, y cosas así no existen en la realidad.
Eran las 8 pm, ya debía volver al departamento. Me despedí de Brooklyn y salí. Una ráfaga de viento helado me envolvió, dando la sensación de que te llega hasta los huesos. Cuando llegue a casa, deje mis cosas y me dirigí al baño a tomar una ducha caliente y al salir sonó mi celular. Lo tome y vi que era un mensaje de Dale. Hacía mucho que no nos veíamos, se nos complicaba con los horarios del trabajo.
Noche de amigos con comida chica, películas y helado? Parece que pasaron siglos sin vernos.
Una sonrisa apareció en mi rostro. Este es Dale Carson, mi mejor amigo desde que vivía en Chester y siempre igual de exagerado. El se mudó aquí para que no viniera sola y aprovechó a buscar un buen trabajo también.
Claro! Pero vení a mi casa. Acabo de tomar una ducha caliente después de estar toda la tarde fuera. Trae las películas! Yo pido la comida.
Apreté enviar y fui a buscar el numero del restaurante. Me dijeron que tardaría media hora, y al cortar vi la respuesta de Dale
Como la dama desee.
Acomodé un poco el sofá y traje mas almohadones y unas frazadas. Sabía como terminaría, los dos dormidos en el sillón con la tele prendida y restos de comida al rededor. Dale entro con su llave, dejó las películas en la mesa y vino a saludarme.
Mientras cenábamos estuvimos hablando sobre nuestra semana, no nos veíamos desde la semana anterior y por lo visto tenía muchas ganas de hablar. Me contó que el viernes habría una feria en el centro, dijo que el irá con una chica que conoció el martes cuando salió en la hora del almuerzo y que debería arreglar con mis amigas para que vayamos también. Le dije que lo pensaría, dependiendo de qué tan cansada terminara la semana, pero me hizo prometerle que iría de todas formas a aunque sea a echar un vistazo.
Después de hablar un par de horas comenzamos con nuestra noche. Como a las 4.30 am pusimos la ultima película, pero como es costumbre ambos nos quedamos dormidos. Me desperté al día siguiente al mediodía. Dale seguía dormido. Me dirigí a mi cuarto y me cambié. Decidí preparar algo para desayunar/almorzar mientras esperaba a Dale.
Como todos los domingos permanecimos juntos y me ayudó a limpiar el desorden de la noche anterior. Amaba pasar tiempo con mi amigo.
Ya sé lo que deben pensar, mi vida es aburrida, siempre es lo mismo, nada cambia. Pero pese a todo eso, me gusta mi vida así como es, sencilla y sin problemas.
Esa noche mi madre me llamó. Hacia menos de un mes que la había visto y ya quería que vaya de nuevo. No me podía quejar mucho, yo también la extrañaba, pero ahora debía quedarme un tiempo en Londres para avanzar todo lo que pudiese con mi trabajo. Aparte, así juntaba días para cuando vuelva a ir poder quedarme aunque sea una semana.
Primer capitulo! Espero sus comentarios dejando su opinión, es muy importante para mi. Gracias.
DreamGirl3398
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Afraid to love
Romance"Por miedo a llorar después, perdemos la voluntad de sonreír ahora." Paulo Coelho. Ella estaba asustada del amor. Eso la aterraba entonces lo empujó a él fuera de su vida. No era miedo a enamorarse. Era miedo a hacerlo de la persona incorrecta. Es...