Mi semana empezó lo más normal que se pudo haber dicho después del fin de semana que había tenido. Estaba agradecida de que por fin era lunes y que con el trabajo iba a tener algo en que centrar mi atención. Por desgracia, después de cómo había sido la semana anterior, esta era más relajada. Me habían dado toda la semana para la corrección de un texto de 600 hojas, aproximadamente, lo que significaba que iba a tener mucho tiempo de sobra.
Antes de comenzar, tomé mi agenda para organizarme la semana. Para estar ocupada todos los días leería 125 páginas por día de lunes a jueves, y el viernes 100 ya que después debo realizar el reporte del manuscrito. Cada mañana leería 50 hojas y luego del receso para almorzar, leería otras 70 ya que a la tarde tendría más tiempo que a la mañana.
Esa era mi actividad de todos los lunes a primera hora. Organizaba toda mi semana con los tiempos medidos, de esa forma estaba bien establecidos mis horarios, y si surgía alguna situación o tenía ganas de hacer algo, ya sabía en qué momento lo podía insertar.
A pesar del trabajo de esa semana, que recalco, fue muy poco (comparado con otras veces), la semana se me pasó, relativamente, rápido comparada con lo densa que estaba esperando que se hiciera. Se basó en la rutina diaria: Levantarme 7.30, ducharme, desayunar, prepararme, salir 8.40 de casa para ir caminando y llegar a las 9 en punto al trabajo. Vivía cerca, con solo caminar un par de cuadras ya estaba allá. Después de trabajar hasta las 4 o 4.30 (si me entretenía mucho leyendo) volvía a casa caminando. En el camino capaz que hacía algún mandado o, solo, me iba directo a casa.
Justo hoy, hacía la última de esas cosas. Viernes. 4.15. Volver directo a casa. Acababa de entregar el reporte con el manuscrito, me despedí de mis pocos compañeros que se quedaban todavía un rato mas y cuando estaba a punto de cruzar la puerta de salida, mi celular vibro.
¿Te falta mucho? Nos estamos congelando!!
Era un mensaje de Jenna, y seguramente estaba con April en la puerta de mi departamento, así que mientras comenzaba a caminar a un ritmo rápido y constante, tecleé una respuesta.
No, ya salí. Voy en camino!
A los pocos minutos de enviarlo, llegó su respuesta, la cual no chequeé porque sabía que era su característico "OK". Al llegar al departamento, mis amigas ni siquiera me dejaron decir "hola" antes de gritar su típica frase a coro.
-Noche de chicas!!- gritaron ambas al unísono.
-Oh, ya lo veo- dije con un deje de ironía.
-Vamos Em! Un poco más de entusiasmo no te vendría mal- dijo April con una sonrisa.
-Es verdad, aparte una de las razones principales de esta noche es que queremos que nos cuentes un poco de ese chico misterioso- Jenna guiñó un ojo mientras terminaba de entrar en mi casa.
-Queremos saber TODO!- comentó April desde la cocina.
-¿Saber todo? ¿Chico misterioso?- pregunté confundida- Perdón, pero creo que me perdí de algo.
-Emma, somos tus amigas!
-Tenemos derecho a saber!
-¿Saber qué?
Estaba empezando a irritarme un poco. Estaba cansada y me molestaba cuando se ponían en plan "Sacar información pero omitir datos relevantes".
-Del chico de la feria, con el que estabas hablando cuando te fuimos a buscar- Jenna explicó- a ese chico nos referimos.
-Ah! Easton- dije mientras lograba entender todas sus preguntas eufóricas- No es mi chico misterioso- moví la mano restándole importancia.
-Para nosotras si es misterioso- dijo April- no sabemos nada de él
-Y yo tampoco- dije indiferente
-¿Como que tampoco?- preguntó Jenna confundida
- No, solo me lo choqué y eso fue todo
-Hay algo que no estás contando
-¿Algo como qué?
-¿Cómo te enteraste del nombre?
-Me lo dijo en el café- dije mientras iba a la cocina a servirme algo de tomar.
-¿En qué café?- caminaron ambas detrás de mí.
-¿El de los sábados?- preguntó April emocionada
- Si- dije rodando los ojos- estaba sentada en mi mesa habitual y se apareció ahí- las miré y supe por si forma de mirarme que querían que continúe- Después se sentó y hablamos un rato, pero fueron solo cosas sin sentido. La mayor parte fue sobre libros.
-Ay! Toda una historia de amor- dijo April soñando despierta y yo la miré raro
-Y... ¿Cuándo se ven de nuevo?- preguntó Jenna
-Mmm... ¿Nunca?- dije matando la ilusión de ambas
-¿QUE?- gritaron las dos juntas- Vamos a hacer que se reencuentren...
Si, damas y señores, esas son mis dos mejores amigas. April, la enamorada empedernida, y Jenna, quien intenta encontrar pareja para todo el mundo. Y acá estoy yo, con dos amigas como ellas tratando de escapar de lo que ellas tanto añoran conseguir...
Espero que les haya gustado!! este es el ultimo por hoy pero mañana voy a intentar de subir uno o dos más. No se olviden de votar y comentar que les pareció. Gracias!
Dreamgirl3398
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Afraid to love
Romance"Por miedo a llorar después, perdemos la voluntad de sonreír ahora." Paulo Coelho. Ella estaba asustada del amor. Eso la aterraba entonces lo empujó a él fuera de su vida. No era miedo a enamorarse. Era miedo a hacerlo de la persona incorrecta. Es...