𝐀𝐍𝐓𝐄𝐒 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐍𝐎𝐂𝐄𝐑𝐓𝐄

Prólogo

Prólogo

Antes de que conozcáis mi pasado, y de que compartáis conmigo mi camino a partir del día de hoy; me presentaré.

Soy Lexa Price, tengo veinte años, y sólo soy una chica normal sin ningún talento especial que la defina, atrapada (hasta hoy) en una relación de maltrato.

Pero no es eso lo que me define.

A ninguna persona la define su situación, su pasado o su historia. La definen sus actos, su forma de afrontar los problemas y la manera que tenga de tratar a los demás.

O, al menos, eso es para mí lo que define a alguien.

Yo, personalmente, me considero muy diferente a la mayoría de las chicas de mi edad.

Y no por todo lo que he pasado; sino por los aprendizajes que he sacado de cada piedra que he encontrado en mi camino.

Puedo decir que soy simpática, empática, graciosa y buena.

Aunque también tengo que asumir que puedo llegar a ser pesada, inconformista, borde con quien no me gusta, brusca, fría, y muy pero que muy cabezota.

También soy la persona más sincera que conozco. Aunque eso puede ser tan bueno como malo. Depende de la situación.

Y, por si queréis haceros una idea de como soy físicamente (aunque eso tampoco defina a una persona), os diré que soy una chica con la piel de color miel; ya que mi padre era argelino y mi madre es española.

Mi pelo es largo y ondulado, de un color castaño claro.

Soy alta y delgada, pero las curvas de mi cuerpo están bien definidas.

Mis ojos tienen un color azul claro, mezclado con gris; mi nariz es pequeña y respingona,  y mis labios son gruesos y carnosos, y tengo un lunar justo encima del labio; en el lado derecho.

Ahora que sabéis algunas cosas de mí, ya podéis conocer mi historia.

Os advierto de que el comienzo de esta historia no va a ser muy agradable; y que sólo las personas fuertes conseguirán terminar el primer capítulo.

Porque, hasta hoy, mi vida ha sido un completo infierno.

Pero os prometo que a medida de que vayáis avanzando en mi historia; disfrutaréis con cada página.