Capítulo 9

2K 183 6
                                    

Clarissa

Soy una idiota.

Una completa idiota, llegaba tarde a mi cita con mi grupo de escritura y era porque Ian no quería terminar la llamada. Llegué corriendo y sin aliento hasta el salón donde nos reuníamos cada martes desde que había vuelto a casa.

Ya se encontraban todos ahí, y no hubo que decirles nada, ya todos conocían como era mi novio.

Vicky, Milagros, Soledad, Carlos y Jordi me lanzaron diferentes expresiones.

—Lo siento, no volverá a pasar —dije con dificultad.

Me senté en la primer silla que vi y Vicky comenzó con el primer tema. Al salir de ahí, Carlos y yo caminábamos hasta el parque. Era el trayecto en que podíamos acompañarnos. Éramos completamente diferentes pero había algo que nos ayudaba a...complementarnos. Carlos era como mi alma gemela en amistad. Esto no significaba que lo quisiera más que a Christian, solo eran diferentes.

—No deberías dejar que él te presione en nada —me dijo Carlos quitándome los libros de las manos.— Aunque sea un hombre mayor, debe respetar lo que tú quieres, y sobre todo, lo que eres.

—No lo conoces Carlos, él no quiere cambiarme es solo...

—Es solo que te quiere moldear para que seas la perfecta esposa, no te mientas, sabes que eso es lo que está haciendo.

Puse los ojos en blanco y seguimos caminando, en el parque nos sentamos en una banca mientras continuamos la plática. Ahora referente a su película favorita. Entonces vi a Daniel, iba caminando cabizbajo. Eso no me gustó. Carlos siguió mi mirada y sonrió.

—Ve con él.

—No, podría estar esperando a su novia o algo...

—Anda, ve con él —dijo empujándome ligeramente.

Me levanté y fui hacia Daniel, que acababa de sentarse en una barda baja.

—¿Estás bien?

Daniel levantó la cabeza y me miró con temor. Levanté las manos en señal de rendición.

—No quería espantarte, estaba platicando con un amigo y te vi y no te ves bien y quería saber si estabas bien o si puedo hacer algo por ti.

—Estoy bien, mejor dime ¿cómo estás tú?

—Bien, no me puedo quejar...

Entonces sentí una mirada, algo pesado que venía desde mi espalda. Me giré y lo vi. Ian me esperaba con mis cosas en sus manos y ya no había ni rastro de Carlos.

—Debo irme Daniel, ¿nos vemos después?

Él tan solo asintió, luciendo más triste que cuando lo encontré. Su dolor me dolía y eso no me gustó. Sacudí mi cabeza y fui hasta Ian, a ver cuál era su explicación.

Esto ya me estaba cansando.

—Hola amor —me dijo cuando llegué hasta él.— ¿Con quién estabas?

—Con Daniel, ¿a dónde se ha ido Carlos?

Ian no se mostró avergonzado ni mucho menos, al contrario, lucía casi...orgulloso.

—Reconocí tus cosas y le dije que yo te acompañaría a casa, entonces te vi platicando con tu ex novio —dijo con una sonrisa que no tocaba sus ojos y en la que obviamente no creí.— Por cierto, ¿te dije que Katia me habló hoy por teléfono?

Yo sabía que Katia era su ex, nadie tenía que explicarme que lo hacía solo para contrarrestar mi plática con Daniel.

—¿Qué necesitaba?

—Pues me dijo que quería hablar conmigo, que me extraña y creo que quiere ser mi amiga.

Lo volteé a ver, totalmente seria mi expresión.

—Pues si quieres ser su amigo...creo que es lo mejor —le dije encogiéndome de hombros.

—No amor, creo que ella debe quedar en el pasado, así como todas las relaciones que tuve antes de ti.

Me tomó de la mano y comenzamos a caminar hacia mi casa.

—Estoy planeando pedirle permiso a tus padres para que te dejen hacer un viaje conmigo.

Me detuve y volteé a verlo.

—¿Un viaje?

—Sí, eso le hace muy bien a las parejas —dijo obligándome a continuar caminando.— Nos hará muy bien, ya lo verás...visitaremos muchas ciudades y podrás fotografiar cada una de sus iglesias y podremos quedarnos despiertos contándonos de todo o simplemente comiendo galletas...

¿Quedarnos despiertos? Eso sonaba a que...

—¿Cómo que quedarnos despiertos? Para eso haría falta que...

—Que durmamos juntos —finalizó por mí.

¿Qué demonios? Yo le había dicho que "eso" no estaba en mis planes por el momento. Y ahora no solo había decidido que haríamos un viaje juntos, sino que también me estaba avisando que dormiríamos juntos.

¿Cómo arreglar este lío?

Segunda Oportunidad (Y te vi...2) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora