Majestades

153 23 1
                                    

—No pueden dejarme aquí contra mi voluntad.

—Oh claro que sí.—dijo el azul—.

—¡Yo quiero irme!

—Señorita, no queremos ser los malos, somos buenos, si usted va al mundo humano lo destruirá.—respondió—.

—¿Destruirlo?¿Cómo cree que voy a destruirlo?

—Eres una flama, cuando te enfadas te enciendes y pierdes el control de ti. En otras palabras, si alguien te hace enfadar allí, prenderás fuego todo a tu paso, las llamas se esparcen y para empeorar la situación tus llamas son casi imposibles de extinguir.—dijo el azul—.

—¡Pero no me enfadaré, lo juro!

—Lo siento señorita, no puede irse.—dijo el café—.

—¿Y a Daniel? ¿No pueden traerlo? ¡Por favor! Este lugar me encanta pero no quiero vivir triste en él.

—Su majestad, el caballero humano ya sabe que la señorita Mia es una flama, y lo estuve investigando, es un buen hombre, parece de confianza.

—Ros, por favor no intervenga.—le ordenó el gris-.

—Majestad no quiero tener que recordarle que su esposa es humana y vive aquí, pero la situación lo amerita, la señorita Mia no se quedará aquí, no queremos tener que ir a buscarla cuando se escape y tenerla presa ¿No es cierto?

—Es...es difícil, mi esposa accedió a quedarse aquí para siempre y dejar todo atrás por mí, si el caballero accede a lo mismo, podrá quedarse.

—¿En serio? Muchas gracias majestades, gracias Ros.

—Prometí ayudarla, y aquí; lo prometido es ley.

—Bueno, hemos concluido,—Dijo el azul—. Tengo otros casos que atender. Ros guía a la señorita fuera de la sala.

—A sus órdenes.

—Ros ¿Me llevarás con Daniel?

—A si es Mia.

Eternal Fire [Completa/En Corrección]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora