Prólogo

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Hola, mi nombre es Zack, soy un adolescente de 16 años... si, la mejor y quizá para muchos la peor etapa de su vida. Pero bueno, ese no es el punto.

Mis padres son personas dedicadas 24/7 a sus negocios, los cuales consisten principalmente en viajes constantes. Hace unas horas regresaron de uno de esos viajes de negocios y por primera vez creía que se quedarían un tiempo conmigo como suelen hacerlo en vacaciones de verano... pero no. Llegaron exactamente para informarme que les acaban de llamar de una de las sucursales en Italia para que evalúen uno de los proyectos que deben llevar a cabo... cosas que aun no entiendo y sinceramente deseo no hacerlo. A pesar de todo me dijeron que esta vez tendrían que quedarse más tiempo lejos de casa...

- ¿Por cuánto tiempo deberán irse?- Exclamé con un tono bajo que denotaba tristeza y decepción... y quizás un poco de enojo.

- No tenemos fecha exacta de regreso, quizá sea un año, quizá más, quién sabe. – Respondió muy frío como siempre mi señor padre.

- Pero, ¿qué hay de mí? ¿Debo quedarme solo por más tiempo? Mamá... papá... los... necesito- Dije con la voz entrecortaba mientas caían por mis mejillas las primeras lágrimas.

- Hijo, sabes que queremos lo mejor para ti y por ello necesitamos realizar este viaje. Soy consciente de que quizá no hemos podido compartir los momentos en familia que se debería pero debes entender que es por tu bien y para poder darte lo mejor. – Me alegra saber que mi madre nunca pierde la ternura al hablarme, a pesar de todo el tiempo que estuvo ausente.

- Bueno, no puedo hacer más. Al fin y al cabo siempre es así. La decisión ya ha sido tomada. – Frustración. Sí, eso siento.

- Zack, irás a vivir en casa de mi hermano. Ayer pude hablar con él y me dijo que podías quedarte allá hasta que volvamos.

Les aseguro que jamás vi venir dicha respuesta. Déjenme les explico un poco el porqué. La familia de mis tíos Sam, hermano de mi papá, y Sofía, su esposa, son un ejemplo claro de lo que es la unión, son muy amables, cariñosos y me quieren como a un hijo... claro cada vez que tienen la oportunidad de verme. No los he visitado desde la navidad de hace dos años. Y lo mejor de todo es Lucy, su hija, mi prima y mi mejor amiga. Ella es una de las pocas personas que saben que soy gay, pues ni mis padres lo saben por obvias razones. En fin, la decepción y tristeza que sentía hace unos minutos se acaba de esfumar por completo.

- ¡Al fin una buena noticia desde que pisaron esta casa!- Exclamé emocionado. Pude observar como mi padre fruncía el ceño.

- Bien hijo, debemos irnos, el avión partirá en un par de horas. – Mi madre se mostraba más calmada al verme sonreír.

- De acuerdo mamá, los extrañaré mucho. No te olvides de llamarme cuando puedas, ¿sí? – Mi madre asentía con la cabeza mientras me abrazaba.

-Cuídate hijo, te estaré avisando cuando te envíe dinero.

Luego los acompañé a la puerta y ellos partieron al aeropuerto. Por mi lado corrí frenéticamente a contarle a Laura la noticia. Laura es la ama de llaves de la casa en la que vivo, es una excelente persona, muy cariñosa y estuvo para mí en todos los momentos cruciales en mi vida.

-¡Laura! ¡LAURA!

- Dime Zacky, ¿qué sucede?

- Tengo que contarte algo.

- Dime, soy todo oídos. – Mostraba una gran sonrisa, por verme feliz.

- Me mudaré con mis tíos, a New York. – Laura pareció sorprendida por la respuesta, su expresión cambió repentinamente.

- Felicidades pequeño, me alegra que puedas ir a vivir con tus tíos, ellos te quieren demasiado. – Dijo luego de una pequeña pausa.

- Si yo también estoy emocionado... pero... ¿qué hay de ti?- Empezaba a sentirme mal por la idea de dejar a Laura aquí, ella estuvo conmigo desde antes que yo naciera,

- Ay pequeño, descuida, recuerda que alguien debe de cuidar esta casa para cuando tus padres y tú vuelvan. Hasta entonces disfruta todo lo que puedas en esta nueva etapa. – Corrí hacia ella y nos dimos un cálido abrazo, mientras podía sentir sus lágrimas caer en mi cuello. – Además, en New York hay muchos chicos guapos, incluso más que aquí en Ohio. – Laura está incluida dentro de las pocas personas que saben de mi orientación sexual, aunque jamás se lo conté pudo encontrar algunos dibujo que hacía sobre mis cantantes favoritos y yo en escenas no muy cómodas de compartir con todos, a pesar de ello lo tomó de la mejor manera.

- Lo sé Laura, aunque sé que soy malo para ese tipo de cosas.

La idea de empezar una nueva etapa en mi vida me aterra pero al mismo tiempo me emociona. Quizás pueda descartar la idea de que jamás podré encontrar a un chico que de verdad pueda compartir conmigo todos esos momentos que pude leer en mis novelas favoritas.

Luego de ayudar a Laura en la limpieza de la sala, corrí a mi habitación a empacar mis maletas con todo lo que debería llevar: libros, ropa, CDs, etc. Toda la emoción del día me dejó cansado y mañana tomaré el primer avión a New York. Tomo una ducha para poder relajarme, me coloco un bóxer para poder estar cómodo, audífonos y a la cama. La alarma a las 8:00 a.m me despertará para poder estar listo para empezar un nuevo día y por qué no... una nueva vida. 

Dilema de Amor [Gay/Yaoi] (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora