Siempre tuyo.

Viernes llega ya.

Samuel había quedado de pasar por mi en las mañanas para llevarme a la escuela, había insistido por bastante tiempo y yo tampoco puse mucha resistencia, ir con él todos los días me tendría más tranquilo que no verlo por bastante tiempo o solamente durante las clases y es que ya era una adicción verlo, admirarlo en silencio y estar con él pero creo que es muy rápido como para pensar en que algo podría pasar entre nosotros, yo estaba empezando en darme cuenta de lo que quería y me gustaba y él pues... me imaginaba que ya tenía ciertas experiencias en esto.

Ciertamente me asustaba que sintiera que iba demasiado rápido pero yo solo seguía a mis instintos y algo en mi me hacía que sintiera que conocía a Samuel de años, que llevaba con él toda una vida y que hacía que sintiera que él era mi mundo, mi luz, que era esa persona que quería en mi vida haciendome feliz y haciendolo feliz. Ese sentimiento era hermoso, pero me daba miedo que algo saliera mal con él y que todo se fuera a la ruina y terminara más solo que nada.

Tocaron a mi puerta y no esperaba a nadie más que a Samuel así que abrí.

-Hola Guille, ¿estas listo?

-Claro.- Tomé mi mochila y cerré el departamento.

Cuando llegamos al elevador nos quedamos en silencio.

-Eh, Samuel, mira, este es el caso, Mónica propuso hacer una pequeña celebración por mi primera semana acá en México y ya sabes, fiesta, invitados, bebidas, pim pam... mi pregunta es ¿quieres ir?

-Claro hombre, a mi las fiestas se me dan a lo bestia, ¿dónde es?

-Bueno, ella me dijo que era una especie de bar y discoteca, que era de lo más tranquilo y que el ambiente era perfecto.

-Pues claro, ¿cuando es?

-Mañana, viernes, ¿no?, sí es viernes, así que mañana en la noche.

-¿MAÑANA EN LA NOCHE?- Pegó un grito y justo el elevador se abrió, Mónica volteó y al ver que eramos nosotros dos no hizo más que reirse disimuladamente.

-Tranquilo macho, vas a despertar a la gente de todos los edificios.

-¿Mañana en la noche?.- Volvió a repetir ahora en voz baja.

-Sí, ¿algún problema?

-SÍ, no tengo nada que ponerme, necesito pensar que ponerme, digo, es una fiesta, no tengo nada formal.- Parecía mujer, preocupandose por eso, creo que sé quien sería la mujer en esta relación.

-¡QUE VA TIO! te pongas lo que te pongas te verás perfecto con lo que sea.- ¿QUÉ ACABABA DE DECIRLE?.

Noté como se sonrojó levemente y paso su mano por su nuca.

-Vale, vale, iré pero llevaré puesto un traje de payaso o unicornio. Según tú me veo perfecto con todo.

-Peferiría un traje de tortuga si de eso se trata.

Llegamos al coche y nos encaminamos a la universidad, antes pasamos por un desayuno rápido.

Era viernes jueves así que no tocaban clases tan largas, el día se resumía en estar con Samuel, clase de Física y Mecatrónica con él, ya no me sería tan difícil, no tenía que ocultar nada con él. Supongo que era demasiado obvio el hecho de que me gustaba, que sentía algo muy fuerte por él y extrañamente no me preocupaba que la demás gente se diera cuenta de lo mismo.

Las clases fueron pequeñas miradas cruzadas, burlas sobre mi o el profesor de Física, lo del cumplido aquel y dibujos de Samuel en mis libretas y unos cuantos garabatos suyos en la pasta de mi libro, incluso se dibujó en un traje de tortuga.