| 6. Marie Donald |

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El profesor copiaba las fórmulas mientras el resto de la clase las apuntaba, siguiéndolo de cerca. Parecía que yo era el único que no lograba concentrarse. Frustrado tome mi pluma y logré copiar algunos números en una hoja hasta que la puerta del salón se cerró con un portazo, provocándome un dolor agudo en la cabeza.

- Lo siento, lo siento – al alzar la cabeza encontré a Lana junto a la puerta, más despeinada de lo normal y con una montaña de libros entre los brazos.

- Tome asiento, señorita King – fue lo único que le dijo el profesor. Lana miró alarmada como todo el salón estaba lleno, solo había un asiento libre a mi lado.

Rendida avanzó hasta mí y dejó soltó sus libros sobre la mesa, provocándome otro dolor. Me sonrió divertida, sentándose erguida.

- Bien – el profesor dejó el plumón a un lado y todos dejaron de ver la pizarra para verlo a él -. Como es de costumbre, iniciaremos el curso con un trabajo de investigación en parejas. Yo los ordenare – respondió la pregunta silenciosa de todos -. Deberán de presentar el informe la próxima semana.

Una ola de suspiros y quejas se inició en cuanto termino, Lana simplemente se encogió de hombros a mi lado. Caí en la cuenta de que una parte de mí deseaba con fuerza que ella fuera mi pareja de trabajo.

- Empecemos, Paul vas con Chris – antes de que Paul se quejara en voz alta el profesor continuo -. Richard con Samantha. Luana con Derek – el profesor continuo emparejando hasta que llegó a mi nombre -. Ryan – soltó un suspiro -, tú vas con Marie – atrás mío solté como la rubia soltaba un quejido -. Y por último King vas con Ximena – Lana quedó helada al escuchar el nombre de su pareja.

- No puedo ir con ella – se negó automáticamente, mirando suplicante al profesor. Ximena observaba callada desde su asiento.

- Esa es su pareja y se queda así – Lana se quedó callada unos segundos, luego volteo a verme con una idea brillando en sus ojos -. Y no se permiten cambios, esa es mi última palabra. Pueden retirarse – la clase se dio por terminada y todos empezaron a levantarse, excepto Lana que se quedó quieta en su asiento.

Ximena se levantó y salió del salón sin siquiera mirarnos, seguía molesta. Lana lucía devastada, por lo que sabía no le estaba yendo bien en el curso y si desaprobaba tendría que abandonar Avanzado. Sin saber que hacer me intenté acercar pero se levantó abruptamente.

- Tengo que solucionarlo – recogió todos sus libros y salió por la puerta como un torbellino. Antes de que pudiera seguirla Marie me cogió el brazo por detrás.

- Tú ni creas que te vas a ganar una nota tan fácil – me amenazó con el ceño fruncido. Yo asentí con la cabeza sin dejar de mirar la puerta. Marie me miró en silencio unos minutos y soltó un suspiro -. ¿Hey? – chasqueó los dedos en mi rostro y voltee a verla.

- ¿Tienes hora libre ahora? – pregunte automáticamente y ella asintió con la cabeza -. Genial, podemos empezar – Marie sonrió satisfecha.

* * *

Luego de pasar por la biblioteca a recoger todos los libros que necesitaríamos, Marie y yo fuimos a mi habitación. Nos parecía el lugar adecuado para organizar las ideas. Marie iba acotando en voz alta sus ideas, conmigo detrás con una montaña de libros entre los brazos.

- Hay una copia debajo del cactus – Marie alzó una ceja divertida y se agachó a sacar la llave. Luego abrió la puerta con facilidad.

En el interior todo era un caos. Chace continuaba tirado en la cama, con las mantas enredadas en su cuerpo. Sin dudarlo cerré la puerta de un portazo y tiré los libros al escritorio que teníamos. El sonido hizo que Chace saltará y se golpeará la cabeza con la cama de arriba. Poco a poco despertó para mirarme furioso.

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