ZOMCITY

Capitulo 5

Nelson condujo durante unos 15 minutos y la verdad es que llamábamos mucho la atención, esos zombies corrían detras del auto pero por razones obvias no nos alcanzaban.

Cuando estuvimos a una distancia respetable de esa bodega, nos bajamos del auto y nos aseguramos que esas cosas no estuvieran cerca de nosotros.

-No estamos muy lejos- dijo Daniel- vamos antes de que nos vean.

Solo asentimos con la cabeza y comenzamos a caminar en dirección a la bodega, pero esas cosas no tardaron encontrarnos.

-¡Demonios!- Dijo Alicia- ¡Comiencen a correr!

Enseguida teníamos a unas 20 de esas cosas persiguiéndonos.
Una que otra nos alcanzaba pero la golpeábamos y seguíamos corriendo.

Llegamos a la puerta de esa bodega, la que no era de metal, y Silvia intento abrirla.

-¡Esta cerrada!- dijo Silvia mientras que nosotros nos preparábamos para atacar a los zombies que se acercaban.

- A un lado- Dijo Daniel. Acto seguido rompió la cerradura de la puerta- ¡Entren!

Entramos y cerramos la puerta haciendo peso con nuestros cuerpos en ella.
Alcance a visualizar una cajas al fondo de la bodega, me separe y corrí hacia ellas esperando se fueran pesadas como para trabar la puerta, pero no, solo eran cajas livianas. Alicia se acerco y comenzó a levantar la cajas. Supongo que también buscaba alguna pesada.

-¡Vuelvan aquí!- dijo Silvia- ¡Ayúdenos!

Volví a la puerta a poner mi peso junto con Alicia. Nelson se separo y corrió hacia una gradas, donde se podía divisar unas habitaciones o más bien oficinas.

-¡Aquí hay un escritorio!-grito Nelson y Alicia se volvió a separar de la puerta para ayudarlo.
Esas cosas empujaban cada vez más fuerte.

A lo pocos segundos Alicia y Nelson se encontraban empujando por las escaleras el escritorio. Daniel se separo y corrió ayudarlos. ¡Demonios! Esas cosas si que tienen fuerza, a parte de que solo Silvia y yo estamos sosteniendo la puerta, pero no tardaron en poner el escritorio contra la puerta.

-Silvia y yo nos quedaremos haciendo peso. Vayan y busquen más cosas para trabar la puerta, que este escritorio no es suficiente- dije mientras empujaba el escritorio.

Enseguida volvieron a correr hacia las oficinas y trajeron otros 2 escritorios más.
Acto seguido las pusieron una sobre otra. Alicia bajo cargando una computadora muy antigua y la puso encima para hacer más peso.

-Hay otras 2 arriba- dijo mientras colocaba esa entre las mesas.

Daniel y Nelson corrieron a traer las y las colocaron. Aun no era suficiente, capaz podía detener a 20 de esas cosas, pero, ¿y si venían más?

-¡Una mini-nevera!- grito Alicia.

Daniel subió junto a Nelson y la bajaron, ubicando la junto a las mesas y computadoras. Se podía decir que ya esta bien asegurada.

-Bien- dijo Daniel- eso los detendrá un rato.

Comenzamos a revisar el lugar, era bastante amplio con algunas cajas reunidas en una esquina, 3 puertas de metal, en el segundo piso habían 3 oficinas y una escalera que parecía llevar al techo.

-¡Miren!- Dijo Nelson desde el primer piso- hay otra puerta aquí.

Todos nos reunimos junto a Nelson.

-¿Deberíamos abrirla?- pregunte.

-Solo debe ser otra salida- dijo Silvia.

-No lo creo- dije acercando me a la puerta- Yo no vi ninguna otra puerta de madera cuando veníamos- agarre la perilla- preparen hachas- y la abrí.

Era algo así como una cochera. Habían herramientas y un camión.

Silvia se acerco al camión y abrió la puerta de atrás.

-Más cajas- dijo Silvia decepcionada.

-Miren, ahí hay unas tablas- Dijo Nelson.

-¿Y?- pregunte.

-Utilicemos esto para trabar la puerta- dijo mientras buscaba algo entre esas herramientas- Miren, hay clavos.

- Y ahí un martillo- Hablo Daniel.

Ambos recogieron lo que necesitaban mientras que nosotras retirábamos las mesas, computadoras y la mini-nevera.

Ya nada estaba empujando la puerta, supongo que se fueron.
Daniel y Nelson comenzaron a poner las tablas de manera horizontal, haciendo algo así como un muro, pero para estar más seguros volvieron a colocar los escritorios.