La Memoria Del Corazón

CAPITULO 23

Pasamos un día magnífico, entre el tranquilizante paseo por el jardín y la posterior visita al Musée du Louvre. Intenté dejar las preocupaciones atrás y sólo me dediqué a disfrutar con mi esposo, platicamos, recordamos momentos de cuando éramos novios y no faltaron los besos y los mimos, las risas. Son alrededor de las 4 de la tarde y hemos vuelto al hotel, Poncho se ha quedado abajo hablando no sé que con la recepcionista y me pidió que lo espere arriba... seguro me está preparando una sorpresa, no sé.

Subo a la habitación y aprovecho que estoy sola para hacer una importante llamada

-Hola Any! ¿Qué tal las vacaciones? -Pregunta mi hermana mayor desde la otra línea. Necesito tanto saber de mi hija

-Perfecto, en realidad estamos disfrutando mucho hasta ahora.

-Me alegra tanto escuchar eso ¿Cómo te sientes?

-Bien Nati... no puedo estar mejor, estoy en París con el amor de mi vida -Reí suave -Lo amo cada vez más, a pesar de que por momentos actúa tan extraño, intento comprenderlo.

- ¿Actúa extraño?

-Sí. Bueno, el me contó que antes de mi accidente él y yo no estábamos muy bien y aunque no quiere decírmelo, supongo tiene que ver con eso, por momentos hasta creo que lo lastimé y por eso se ha cerrado tanto conmigo -Nati se queda en silencio, sé que es porque no halla que decir -Pero no te preocupes Nati, no pienso atacarte a preguntas. He decidido esperar, disfrutar de estos días con mi esposo y esperar a que él se sienta preparado para hablarlo conmigo -Ella suspira

- ¿Y tú estás preparada para esa conversación donde te cuente todo? -Cuestiona

-Claro que sí... A ver, ¿Por qué lo dices?

-Lo digo porque a lo mejor él no te ve emocionalmente preparada y por eso no te lo ha dicho -Lo analizo todo un poco y tiene razón, pero no sabría como demostrarle a mi esposo que sí estoy preparada para saber la verdad... ¿Lo estoy?

-Bueno... podría ser. Pero... Mejor no hablemos de esto ¿Sí? En realidad te he llamado porque me gustaría hablarle a mi hija

-Emm a Abril?

-Claro tonta! -Río -Cuantas hijas tengo eh?

-Ah... si lo que pasa es que... ella no está en este momento

- ¿Y a donde fue?

-Pues no está. Si quieres puedes llamar después ¿Sí? Emm... Te dejaré por ahora, estoy llena de clientes -Oh! Había olvidado que estamos casi del otro lado del mundo y allá, recién deben ser las nueve o diez de la mañana. Natalia es dueña de una muy buena tienda de artesanías, pinta sus propios cuadros y la verdad no me sorprende que su tienda siempre esté llena, es realmente buena en lo que hace.

-Ok, sólo quiero que me digas como está. Cuéntame acerca de ella, por favor.