Atrapada en mi Propia Fantasía

Capítulo 11: A punto de perderla.

Narra Thomas

Mientras caminaba por la vereda del otro lado de la calle y tarareaba una canción, vi a Alice afuera del teatro hablando con un chico... No quise pensar nada, pues ella y yo solo eramos amigos, pero lo que vi a continuación me dejó perplejo y triste.

Alice se estaba besando con aquel chico, pensé que tal vez era su novio... Pero no era así. Los miré por un rato y después seguí caminando, pero esta vez con paso apresurado y lleno de impotencia en mi interior. Quería golpear algo, a alguien, lo que fuera con tal de olvidarme de lo que acababa de ver.

¿Qué carajo estoy haciendo mal?

El trayecto hasta mi casa fue bastante incómodo. Mi cara de póquer no se borraba ni con una goma de borrar.

Cuando por fin pude llegar a mi cuarto, cerré la puerta de un tirón y me lancé sin cuidado a mi cama; quería pensar en mi reacción, ¿había sido la correcta frente a la situación? No lo sé y tampoco quería averiguarlo, ahora de lo único que tenía ganas era de gritar.

Como mi hermana no estaba en la casa, me puse a dar puñetazos duros a la pared de ladrillo de mi cuarto. Una vez que estuve lo bastante agitado, me detuve.

Sentado en la cama me quedé mirando el vacío. Esa imagen de Alice besando a otro que no fuera yo me ponía los pelos de punta, no quería verla con alguien más. Puede que suene egoísta pero yo quiero que ella sea mía... Y si besó a otro es porque estoy haciendo algo mal.

Con esto me di cuenta finalmente que de veras me gusta Alice, porque nunca antes había sentido nada al ver incluso a mi antigua novia besarse con otro esa vez en una fiesta.
¿Qué voy a hacer?

Después de estar como una hora pensando en ello decidí bajar a buscar una cerveza a la nevera, pero la sed se me quitó cuando desde el pasillo escuché llantos que provenían del dormitorio de mi hermana.

Kylie nunca lloraba, por eso se me hizo raro que ahora lo hiciera.

Narra Alice

Jamás soporté ver a nadie llorar... Y menos si era alguien que conocía.

Me acerqué a ella de a poco y me senté a su lado en un columpio.

- Disculpa, ¿Cuál es tu nombre?- dije esperando que ella contestara.

La chica no contestó mi pregunta, solo siguió metida en sus pensamientos y al cabo de 10 minutos se fue de allí, haciéndome sentir culpable.

Yo no sabía qué estaba haciendo ahí sentada en un puto columpio preocupándome por una chica a la que solo había visto un par de veces (por eso dije que la conocía).

Al final, me quedé allí balanceándome un rato en el columpio para aclararme la ideas y después me fui a mi casa.

Decidí irme caminando, porque con lo gorda que estoy me hace bien realizar un poco de ejercicio.

Caminaba tranquilamente, tanto que no me di cuenta que me seguían hasta que doblé la esquina y alguien me agarró muy fuerte del cuello y me tapó la boca con una mano.

Desesperada le golpee las costillas con el codo y logré zafarme de su agarre y luego me eché a correr. Me desvié del camino a mi casa, pero no sabía que en la esquina me esperaba un auto negro con 3 hombres escalofriantemente altos y corpulentos que también vestían de negro. Quise doblar la esquina para escapar de aquello, pero el hombre que me seguía logró alcanzarme. Me agarró esta vez de los brazos inmovilizándome; sentí sus duros dedos enterrándose en mi carne mientras otro de los hombres me amarraba con unas cuerdas las manos por detrás de la espalda.

Yo no lograba reaccionar, estaba aterrorizada. Esto parecía una película, pero no era estúpida, sabía que se trataba de un secuestro. ¿Por qué? No tengo la más mínima idea. Yo solo quería salir de esa situación, pero no sabía como si mi cuerpo no estaba respondiendo a lo que yo le ordenaba hacer.

Solo se me ocurrió tratar de moverme para todos lados intentando librarme del agarre para escapar. Pero estos malditos perros tenían mucha fuerza y no podía casi ni moverme, así que comencé a gritar lo más fuerte que pude pidiendo ayuda, pero al parecer no había ningún miserable ser humano que pudiera ayudarme. Aún estábamos en la calle y ¿no había nadie que me oyera gritar? ¿acaso todos eran sordos?

Seguí gritando, pero fue inútil.

- Si no dejas de gritar y te quedas tranquila, una de éstas -señaló una bala jugueteando con ella entre sus manos- se te clavará ahora mismo en tu precioso cuerpo- dijo el más rudo de los tipos que sostenía una pistola y me apuntaba a las tetas con ella.

Yo estaba desesperada, por eso seguí gritando, con la esperanza de que al menos la policía llegase a salvarme. Pero no llegaba nadie.
De repente el mismo hombre habló.
-Esta pequeña al parecer necesita aprender una lección.- rió y miró de reojo a los otros tipos.- Es tu última oportunidad, o te callas y nos dejas terminar con esto pacíficamente, o te mueres ahora mismo.

-No voy a cerrar la maldita bo...- no alcancé a completar mi frase, pues un disparo resonó en mis oídos y solo me sentí caer al piso como en cámara lenta.

Automáticamente me toqué la herida y la presioné para intentar detener la hemorragia, pero el gran charco de sangre que había en el piso destruyó mis espectativas por poder lograrlo.

-Te lo advertí niñita, tú no quisiste colaborar por las buenas, entonces entenderás por las malas, aunque este castigo te cueste tu miserable vida.- Qué hijo de puta es ese mierdecilla, ¡qué se cree! Ahora voy a morir por nada...

Abrí la boca para decir algo, pero el dolor era insoportable. La bala había atravesado mi tórax y la voz ya no me salía.

De pronto todo comenzó a volverse borroso. El cielo gris, los grandes edificios, las caras de esos imbéciles que les haré pagar por haberme hecho esto; todo se volvió de un instante a otro completamente negro.

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Bueno... He tardado un poco en subir cap, pero es que estoy sin imaginación y como nadie comenta nada, no me siento muy motivada para seguir escribiendo :c pero este capítulo lo hice un poco más largo justamente para que se animen a comentar o dar ideas, ¿qué les está pareciendo la novela? De a poco se pone cada vez más intensa... No dejen de leer!! Los quiero!
-All The Love.x kdjdk