Capitulo 16 Mi Crimen

71 11 0
                                    

Las horas en el autobús se me hicieron las más largas, pues aunque estaba con mis amigas, estar entre tanta gente no era lo mas cómodo. El sol estaba apunto de meterse y el calor aquí dentro comienza a aumentar ya que New Castle es una costa y según mis cálculos falta muy poco para llegar.
Desde mi ventana se puede ver la camioneta, donde seguramente Dalton y Steffy se la están pasando muuuy bien. Pobre de mi auto porque siempre.....alto, mi auto.. ¡Es mi auto! Joder no sé como deje que esto pasara. Ahora voy a ir y correre a esos dos para que viajen aquí y mis amigas y yo allá. Donde se supone que deberíamos estar.

-¡Hey! Señor, necesito bajar ahora.-me levanté de mi asiento y fui directo con el conductor. De alguna forma no me tardare, esto será rápido.

-¿Qué? Vamos en la carretera no voy a detenerme niña.-me contestó frío. ¿Pero que se creé? El no es nadie para mandarme.

-Escuche, necesito bajar ahora, solo iré por mi camioneta y...

-Haha ¿Camioneta? Deja de jugar y ve a tu maldito asiento.-señaló.
Basta este tipo me está artando si no va a abrir las puertas yo lo aré.

Jale la palanca con fuerza y las puertas se abrieron aún con el autobús en marcha.

-¿Que rayos haces? ¡Suelta eso!.-regañó.

Eso hizo que iniciaramos una pelea por tener el control de la palanca, cerradas, abiertas, abiertas, cerradas. Sin darnos cuenta que nadie manejaba el camión.

-¡Oigan idiotas! ¡Vamos a chocar!.-gritó un chico e inmediatamente los dos volteamos hacia el frente.

Traté de agarrar el volante pero era tarde, ya nos habíamos salido del camino.
Los gritos de todos los presentes estallaron mientras nadie podía ver nada. Pues ya no quedaba rastro de sol y el autobús no tenía luces internas.
El camino por el que bajabamos era muy brusco, todo se movía muy rapido, el autobús daba saltos de un lado a otro, hasta que caí para atras golpeándome la cabeza teniendo como última escena una rama atravesar el parabrisas.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Abrí mis ojos sintiéndome aturdida, mi cuerpo estaba en las escaleras del autobús. Con ayuda de mis manos toque una parte de mi cabeza sintiendo lo que desgraciadamente era sangre.

Como pude y sin ver nada me levanté sujetandome de un barandal que al parecer tenía colgada una linterna, la encendí y dirigí apuntando hacía el frente.
Ahogué un grito muy fuerte con lo que encontré, era la escena más horrible que había visto y sin darme cuenta ya estaba llorando. El chofer del camión tenía una rama atravesada por su cabeza y de ella corría un pequeño río de sangre.

-Todo esto es mi culpa.-solloze con una mano en mi boca.

Giré en dirección a los pasajeros y caminé con cuidado, al parecer ninguno estaba despierto lo que me dio más miedo aún. Muchos tenían cortadas, golpes y hasta huesos rotos. Y todo por mi culpa, todo por mi maldita culpa. Estoy loca, no sé que hago viviendo si sólo le doy problemas al puto mundo, un estúpido y pequeño mundo.

Tengo miedo de voltear a los asientos de mis amigas y ver cosas peores, cosas de las que me arrepentire por el resto de mis últimos días, jamás me lo perdonaría si algo les pasa, porque sería algo que yo les hice.
Me armé de valor y respiré hondo para encontrarme con sus cuerpos: todas tenían sangre por la cabeza y brazos.

No sé diferenciar entre si están vivas o no, solo comencé a llorar descontroladamente poniendo mis rodillas en el suelo y dejando la linterna por un lado.

Soy una persona horrible, arrebatarle la vida a toda esta gente incluyendo a las personas que más amo !¿Cómo?! !¿Cómo puedo ser así de egoísta!?

EL FINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora