YOLI
Me levanté bastante tarde, pero sabía que Rachel seguía durmiendo ya que ayer llegaron bastante tarde ella y David, y Carla ayer se quedó hasta tarde viendo películas y esperando a los hermanitos.
Terminé de desayunar y fui al salón para ver una serie que me gustaba mucho y había empezado hace unos minutos. Me senté en el suelo y escuchó a alguien quejarse, enseguida miré quien era y casi pego un grito si no hubiera visto que era Carlos el que estaba tumbado en el sofá. Dï un paso hacia atrás y me tropecé con uno de los cojínes que siempre estaban puestos en el sofá.
Caí al suelo y enseguida Carlos me ayudó a levantarme, sin darse cuenta de que tiró el vaso que había dejado segundos antes por si me entraba la sed viendo mi serie, lo que provocó que se resbalara y cayeramos los dos. Apenas podía respirar con Carlos encima, aunque no me importó cuando noté su rostro a escasos centímetros del mío.
No hacía falta mirarnos a los ojos para saber que ambos nos mirábamos los labios. Es cierto que Carlos me gustaba, era un chico bastante guapo y majo hasta antes de pelearnos, pero sabía que no era amor.
No niego que me hubiera gustado que en aquellos momentos hubiera unido nuestros labios. Sin embargo, tras acercarse apenas unos milímetros me miró a los ojos y se levantó. Me levanté del suelo y estiré un poco mi camisa quitando las pocas arrugas que tenía.
-Losiento. Resbalé.-dijo nervioso.
Se revolvió un poco el pelo haciendo que se cayera su gorro y al agacharse a recogerlo se dio con el pico de la mesa y volvió a resbalar con la bebida derramada cayendo al sofá. Al menos no se había hecho daño. No sabía que una persona se podía poner tan nerviosa. Se quedó sentado en el sofá sin saber que decir e intentando moverse lo menos posible.
-Esto... Yo...-tras pensar un rato lo que quería decir y haberme sentado a su lado mirándolo atenta dijo-quería ver si estabas bien. Raquel me dijo que te pusiste enferma y quise ver como estabas. Me ofreció pasar aquí la noche- señaló el sofá- y acepté.
-¿Tantas molestias por verme? Nadie había sido tan considerado conmigo nunca. Gracias, pero estoy bien.
Intenté no sonar muy brusca o enfadada y funcionó ya que sonrió con esa sonrisa suya que tanto me derrite y me hace sonreir también. El silencio fue tan incómodo que al no saber ninguno que decir, Carlos se fue y cerró la puerta tras dudar unos segundos y mirarnos.
Me quedé unos minutos ahí de pie, sin saber que hacer: si ir por él y pedirle que se quedara o dejarlo ir. Al final me decidí por lo primero. Asomé la cabeza por la ventana y ví que todavía no se había ido.
-¡CARLOS!-grité
No tardó dos segundos en mirarme y ver que le pedía con las manos que subiera. Sonrió como solo él lo hace y subió por las escaleras mientras yo le esperaba en la puerta del piso. Cuando llegó estaba cansado de subir 4 pisos por las escaleras.
-¿Necesitas algo?-dijo todavía con la respiración agitada todavía.
-Sí.-miré hacia abajo y luego volví a mirarle a los ojos mientras decía- necesito que olvidemos nuestra discusión del otro día. Losiento.
-Fue culpa mía, no debí meterme con tu amiga.
Nos abrazamos un buen rato y fuel el mejor momento que he podido pasar. Podía respirar su olor, podía sentir el tacto de su piel. No quería separarme de él. En aquel momento estaba bien y no quería separarme.
Nos metimos dentro dle piso y Carlos cerró la puerta. Nos llevó hasta el sofá y nos sentó allí donde nos separamos y nos miramos a los ojos.
El resto del día lo pasé con Carlos. Nos fuimos a un parque enorme en el que había varios sitios donde comer y cenar. Pasamos por un puesto en el que Carlos nos compró helados y el mío se cayó en su camiseta cuando intentó besarme o abrazarme por sorpresa. Salí corriendo por su cara de enfado y cuando me cogió me abrazó a él para manchar mi camiseta y le pegué lo que quedaba de helado en la nariz. En aquellos momentos parecía un payaso.
ESTÁS LEYENDO
JUNTOS SEGUIREMOS EL COMPÁS(Auryn, no son famosos)
FanfictionDos compañeras de piso, Raquel y Yolanda o como su amiga la llama Yoli, ambas tienen 19 años, comparten piso con el hermano de Raquel, David de 24 años. Las deja vivir con él ya que le pagan parte de la hipoteca y le ayudan con el piso en general. ...