Vendetta | Marco Reus | | EDITANDO |

No Debiste Hacerlo

Durante todo el camino de regreso a casa de Rachel nadie decía nada, solo se dejaban llevar por el silencio. La radio tocaba música romántica en un tono muy bajo, la cual no le ayudaba mucho. Sin querer una lágrima se le volvió a escapar de sus bellos ojos llamando la atención de Kevin quien solo apretó el volante de coraje ya que no podía hacer nada. Ella rápido seco sus lágrimas, no debía llorar más, lo que si tenía que hacer era seguir con su plan para volver loco a Marco. De tan perdida que estaba en sus pensamientos no se dio cuenta que ya habían llegado a su apartamento y Kevin le estaba ofreciendo su mano para salir del auto.

- lo siento, Kevin - se disculpó. Kevin sólo le sonrió.

Entraron al pequeño apartamento de Rachel. Kevin se llevó una sorpresa al ver lo muy bien decorado que estaba y como no, si Rachel era diseñadora.

- tengo que decir que te mereces ser la jefa del departamento de diseño - la elogió Kevin mientras se sentaba en el sofá.

- ¿como crees? Hay mucha gente mucho más talentosa que yo.

- no lo creo Rachel, no lo creo - respondió Kevin.

Rachel sonrió al ver que Kevin se había sentado en el sofá sin que ella se lo ofreciera. Mientras Kevin se quedó viendo la televisión, ella se metió a bañar para sacar toda la mala vibra de su cuerpo y así fue. Cuando do salió del baño ya se sentía mejor, le pareció extraño ya que Kevin no estaba por ningún lado. La televisión estaba en un canal de música, buscó por todos lados pero Kevin no apareció ni siquiera le había avisado.

Entró a la cocina y se asustó tanto como se sorprendió al ver a Kevin ¿cocinando? Ni ella creía eso, Kevin cocinaba unos omelets con jamón, queso y tocino. Rachel se acercó a él y trató de quitarle un pedazo a la comida pero Kevin le golpeó suavemente la mano.

- ¡Kevin! - se quejó la rubia. - no debiste hacerlo - dijo después de recargarse en el lavamanos.

- no es ninguna molestia, aparte de jugar fútbol amo cocinar y más si es para una mujer - comentó Kevin haciendo que Rachel se sonrojara por segunda vez en el día.

- bueno, ya sabes que aquí tienes tu humilde casa, digo para cuando quieras cocinar - Kevin estalló en carcajadas al oír eso.

- no sea floja, para la otra cocinarás para mí y es un hecho - sentenció.

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- tengo que felicitarte por lo bien que cocinas - comentó Rachel mientras lavaba los platos.

- cocinar no es lo único que hago bien.

- ¡Kevin! - Rachel golpeó el hombro de Kevin.

- hablo del fútbol, Rachel, que mal pensada eres - Kevin negó para después salir de la cocina.

Para Rachel, Kevin era una persona muy divertida y muy simpático eso sin dejar atras lo apuesto que era. No había dejado que Rachel hiciera prácticamente nada de comida gracias a su talento en la cocina. Ambos se sentaron en la sala de estar para ver una película, la cual la había escogido Kevin. Parecía estar muy emocionante pues se trataba nada mas y nada menos que "Toy Story 2" aunque aveces Kevin solía sacar su infancia, eso no era problema para Rachel pues parecían coincidir en muchas cosas.

- voy a comprar algunas golosinas - anunció Rachel mientras tomaba su bolso.

- usa mi auto, es peligroso que vallas en taxi a estas horas - dijo Kampl sin despegar la vista de la televisión.

- claro que no Ke...

- sin decir nada, te lo llevas y punto - la rubia sólo rodó los ojos y tomó las llaves del auto de Kevin.

Manejó hasta llegar a la tienda más cercana de su apartamento. Tomó una canasta y comenzó a llenarlo de golosinas como papitas fritas, gomitas y uno que otro dulce; no pudieron faltar las sodas. Se acercó a la caja para pagar, mientras escaneaban las compras, Rachel chocaba sus notificaciones de instagram. Muchos comentarios positivos y muchos negativos acerca de Marco, ella solo se reía de ellos.

Terminó de pagar y se salió para tomar su camino de regreso a casa. Entró al auto y lo primero que pudo distinguir fue el perfume de Kevin, muy varonil de esos que podría enamorar a cualquiera. Sacudió su cabeza para sacar esos pensamientos de su cabeza. Al llegar al apartamento, subió por el asensor y mientras subía por éste su móvil comenzó a sonar.

Marco esta llamando.

La rubia pensó dos veces en contestarle la llamada pero al final bloqueo la pantalla y abrió la puerta de su apartamento para centrarse a Kevin acostado en el sofá y sin playera. Tiene buen cuerpo pensó Rachel y a la misma vez sonrió.

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Kevin observaba a Rachel quien estaba en el suelo acostada boca arriba con su cabeza recargada en un cojín. Rachel era perfecta, era todo lo que él buscaba en una mujer aunque él sabía que ella tenía sólo ojos para Marco no perdería la esperanza de poder conquistarla y hacerla feliz por un momento. Reaccionó y encontró a Rachel casi muriéndose de la risa, no sabía cuál era la gracia.

- ¿que da risa? - preguntó Kevin mirando a Rachel con una expresión seria.

- tú cara, es que mira que cara tienes.

Kevin se tiró encima de Rachel y comenzó a hacerle cosquillas en el estómago. Rachel casi y podía respirar de tanta risa que las cosquillas le provocaba. Empujó a Kevin y salió corriendo de la sala de estar a la cocina y después a la recámara. Trataba de no reír mientras estaba escondida en el closet mirando a Kevin como la buscaba por toda la recámara, cuando vio que el alemán entró al baño salió corriendo y le cerró la puerta del baño y de la recámara para ganar tiempo de correr algún otro lado.

El timbre de la puerta retumbó en todo el apartamento. Ella entre risas se apuró a caminar hacia la puerta y Kevin la atrapó abrazabdola por la espalda. Sus risas se enfumaron al abrir la puerta y encontrarse a Marco con una mirada de furia por la situación en que ambos estaban.

N/A:

HALLO SWEETIES!

Wie geht es Ihnen? Ahhh yo y mi alemán comidooo hahaha! Necesito aprender a hablarlo perfecto para pedir un cambio a la universidad de Dortmund ;) ahrre

Volviiii! Ah seguro a nadie le importa pero anyways... Seguiré aquí sobresaliendo de los malos comentarios

Las amoooo

Dios me las bendiga

Pd: BESOS DE CHOCOLATE POR PARTE DE MARCO Y SU BELLÍSIMA ESCRITORA!