Sensual Summer (Español)

Capítulo 3

A la mañana siguiente, Bob y Sara nos dijeron que tenían que ir de viaje la próxima semana, y que estarían fuera un mes entero, por lo menos. Yo sonreí ante la idea de pasar tanto tiempo sin adultos cerca jodiéndome la vida, hasta que el matrimonio le dijo a mi hermano y a Nick que yo quedaba a su cargo, entoces la sonrisa se desvaneció de mi cara. ¡¿Durante un mes entero me iban a "cuidar" dos memos adolescentes llenos de hormonas que les hacían hacer gilipolleces tan grandes como una mansión?! Si conseguía sobrevivir a esto, podría ya con cualquier cosa.

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Esa semana fue bastante aburrida. Lo único que ocurrió fue que mi hermano y Nick se fueron haciendo cada vez más amigos, hasta que pareció que se conocían de toda la vida. Lo cual hizo que la situación pintara cada vez peor para mí. Si esos dos se hacían amigos, estaba convencida de que me acabarían haciendo la vida imposible.

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-Adiós chicos- se despidieron Bob y Sara antes de coger el coche y marcharse para el aeropuerto.

Era lunes y, por curioso que parezca, estaba diluviando, a pesar de ser julio. De hecho, daban malo para toda una semana. A mí tampoco es que me importara mucho, ya que no conocía nada ni nadie en ese lugar, a parte de a mi hermano y a Nick, y tampoco es que me apeteciera hacer algo con ellos. Así que me pasé todo el día aburridísima.

Por la tarde estaba viendo la tele en en salón de arriba (ya que me había hartado de estar en mi habitación) cuando de repente llega mi hermano y me dice:

-Fuera peque, les toca ver la tele a los mayores.

-Y una mierda, estaba yo aquí antes, James.

-Me da igual, Nick y yo queremos ver una peli- me contestó tirándose en el sofá junto a mí.

-Hay más teles en casa, así que os vais a otra o veis la película más tarde- le grité.

-Ya, pero es que queremos ver la peli aquí y ahora- dijo comportándose como un niño pequeño.

-Mira James, no me toques los...

-¡Ya bastaaa!- gritó alguien desde el otro lado de la habitación. Al girarme vi a Nick con cara de chiste- . Vamos chicos, comportaos.

-No me podéis echar de aquí- volví a gritar yo.

-James, ¿y si la dejamos que se quede a ver la película con nosotros?- replicó Nick.

-No creo que esté bien que vea esa peli- le contestó mi hermano, frustrado porque su reciente amigo más defendía a mí en vez de a él.

Nick se sentó en el sofá a mi otro lado y pasó un brazo por encima de mis hombros, con lo que consiguió que me pusiera tensa.

-Ni que fuera a traumatizarse- añadió Nick.

Al final mi hermano me dejó ver la película, aunque antes me mandó a por palomitas.

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Después de quemar dos bolsas de palomitas conseguí que por fin una me saliera bien, así que subí corriendo las escaleras para llegar cuanto antes al salón de arriba. Me senté en medio de los dos ya que era el único hueco que quedaba en el sofá y le pasé las palomitas a mi hermano. Nick cogió el mando y le dio al play. En ese momento abrí la boca y miré a mi hermano.

-¡¿Cincuenta sombras de Grey?!

-Sí. No querías ver la peli, pues aquí la tienes. A no ser que quieras irte a tu habitación porque es demasiado para ti- dijo con cara de burla.

-Me voy a quedar y no te creas mejor por tener dos años más que yo. A, por cierto, quita esa cara de burla o te la arranco de una torta- le contesté, haciendo que se callase de una vez.

Y yo que pensaba que lo tíos no veían esas cosas...

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La película no estuvo mal a pesar de lo que trataba, y además me pasé más de la mitad de la peli embobada con Christian Grey (qué bueno estaba).

Cuando terminó la película, me fui a abajo a hacer la cena, ya que la semana que faltaran los padres de Nick íbamos a turnarnos para hacer las comidas.

Durante la cena no hablamos de lo que habíamos visto esa tarde, sino que se estuvieron burlando de que no fuera capaz de hacer unas simples palomitas a la primera (ya que Nick vio en la basura las otras dos bolsas de palomitas quemadas).

Tras cenar, me despedí de los dos chicos y me fui a lavarme los dientes y después a mi habitación. Después de ponerme mi "pijama", miré a ver si había algo interesante en la tele y, como era de esperar, no había más que tonterías y capítulos repetidos de múltiples series, así que me metí en la cama a intentar dormir, ya que no me apetecía quedarme viendo la teletienda, como una señora mayor.

Esa noche no soñé con Nick, sino con que Cristian Grey me invitaba a su casa.