Yo soy Sherman

CAPITULO 19: ADIÓS

<<No, esto no puede ser real, despierta, tienes que despertar, jajaja, no sé porqué me preocupo, yo sé que esto solo es un sueño, despierta Tony, tienes que despertar, jajaja, no vas a ganar Sherman, no lo harás>> pensaba Tony.

Pasaron unos minutos y Tony aún seguía teniendo esas clases de pensamientos, estaba convencido que solo era un sueño, como siempre pasaba.

Tony se levanta del suelo el cual estaba sentado, trata de pellizcarse para así poder "despertar" pero no pasa nada, se abofetea fuertemente en la cara pero aún sigue con sangre en su ropa, desesperado se levanta y comienza a golpear su cabeza contra la pared gritando repetidas veces "¡Despierta!" pero nada sucedía, exhausto se tira al piso con ilusión a nada y comienza a llorar.

-¡¿Por qué?!- gritaba repetidas veces mientras miraba a la libreta.

Siguió llorando hasta quedarse dormido y continuó con su tristeza pero luego reaccionó y se dió cuenta de que tenía que esconder el cadaver.

Todos los restos aún seguían en la cama, así que cogió la sábana con mucho cuidado y lo arrojó en un bote de basura, luego agarró el colchón y lo tiró ahí también, luego cogió su ropa y la arrojó en el mismo lugar. Cogió algo de gasolina y la rrojó en el bote, luego cogió unos fósforos los prendió y los arrojó en el bote y de ahí comenzaron a salir llamas que poco a poco comenzaron a quemar las sábanas, el colchón y sus prendas, veía como el humo subía hacía el cielo sin retorno alguno.

Cuando ya pasó cómo una hora apagó las llamas y metió las cenizas en una bolsa, ésta bolsa la enterro en el jardín, hizo un hoyo muy grande para solo meter una bolsa, pero él lo quiso así.

Entró a la casa y se bañó recordando cada momento de esa masacre, fue tan horrible, no quería seguir recordándolo, ya para él todo era irreal, ya nada le importaba, había matado y de una forma espeluznante a una de las personas que más amaba en el mundo ¿Qué más quieres Sherman?

Pero luego recuerda que Sherman también estaba sufriendo.

 Junio 4 de 1962

¿Qué he hecho? ¿Por qué hice eso?

Me siento raro muy raro, no sé como ahora acercarme a Kate, no sé que me pasó.

Fue raro, pero fue así, ella al estar desnuda no me calentó ni un poco a pesar de que era la primera vez que la veía así, pero al sangrar... al sangrar me volvió loco, cualquier otra persona se asustaría o se pusiera alerta, pero a mi... a mi me encantó de que sangrara, me sentía en el paraíso ¿Estaré enfermo? No lo sé, no creo, muchas personas son así ¿verdad?

Al ir al trabajo la encontré y traté de hablar con ella pero no quería ni verme.

-Kate.. yo...- traté de decir.

-No me hables, no te quiero ni mirar- me respondió ella.

-Mira yo sé que fue algo raro lo que pasó, pero quiero disculparme.

-¿Disculparte? ¿En serio? Sherman.

-¿Sí?

-Tú estás enfermo, estás loco.

-No me digas así, eso fue algo raro lo acepto, pero no es para tanto.

-¿No es para tanto? ¿Acaso estás escuchando lo que dices?

-Mira, soy un tonto, eso lo sé, te prometo que eso no volverá a suceder.

-No sé, eso fue muy raro, podría pasar cualquier otro día de nuevo.