CAPITULO 6: ENFRENTAMIENTO CON SHERMAN

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Tony se queda atónito mirando a su abuela, o lo que quedó de su abuela, una masa sin vida.

Jadeando sigue contemplándola, sin saber que pensar ni que hacer después.

-¿Tony?

Tony escucha la voz detrás de él, voltea sorprendido al ver a su abuelo ahí parado aun en su pijama.

-¿¡Qué has hecho!?- le grita el abuelo perplejo por la mórbida imagen.

-Hice lo que debía hacer.

-¿Qué era eso? Moler a tu abuela a golpes.

-Lo siento, no sabía lo que estaba haciendo- decía Tony llorando mientras dejaba caer el bate.

-Ahora estas arrepentido de lo que hiciste.

-No.

-¿Cómo?

Tony se limpia las lágrimas, agarra de nuevo el bate y trata de pegárselo en la cabeza de su abuelo, pero nota algo extraño, justo cuando iba a tocar su cabeza siente una presión y ve al abuelo agarrando el bate con una mano, con una fuerza sobrehumana. Tony sorprendido se queda mirándolo  y nota que su cara va cambiando al igual que su cuerpo, se convierte en un hombre joven con pelo liso y abundante, delgado y alto, con un atuendo de los sesenta, tal como él se imaginaba a Sherman.

Él le logra quitar el bate a Tony y dice:

-Curioso.

-¿Qué cosa?- pregunta Tony.

-Había veces en que a mí me daban ganas de golpear a mi abuela así.

-¿Por qué?

-Porque era una vieja amargada, que lo único que le importaba en la vida era ella misma, me imagino que ella era igual.

-No.

-¿No era igual?

-No.

-¿No era un maldita perra egoísta?

-No, de hecho era un ángel.

-Entonces, ¿Por qué hiciste tal atrocidad?- decía Sherman mientras hacía malabares con el un bate con una impresionante destreza.

-No lo sé.

-¿A qué te refieres con eso?

-Que… No se cómo decir  esto.

-Dilo joven, no importa, lo que sea que digas lo voy a tener como un hecho.

-Es que… sentí que alguien me controlaba.

-Te entiendo.

-¿En serio?

-Sí, de hecho también me pasaba igual que a ti, pero con una diferencia.

-¿Cuál?
-Yo no mataba familiares.

Sherman al decir esto agarra con firmeza golpea la punta contra el suelo, arquea una pierna, como hacen los beisbolistas.

-¿¡Que vas a hacer!?- grita Tony.

-Pues, lo mismo que le hiciste a tu abuela- responde Sherman.

-Qué, vas a matarme como hiciste con Matt.

-¿Cómo?- dice Sherman mientras baja el bate.

-¡Sí! ¡Mátame! ¡Hazlo! ¡Como hiciste con tu mejor amigo!

-Sabes algo.

-¿Qué?

-Ya la conciencia no me mata como antes, o como describía al principio de la libreta.

-¿¡Por qué!?- decía Tony sorprendido.

-Por qué me di cuenta de algo acerca de él, un pequeño dato tonto que al final me daba risa cuando me golpeaba la cabeza, arrepentido por su muerte.

-¿Qué es?

-Ya lo leerás, pero te advierto está en el final.

Sherman agarra de nuevo el bate, se abalanza y con impresionante fuerza golpea a Tony en la cabeza dejándolo tirado en el suelo.

Yo soy ShermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora