Mike se dejó caer al piso. Tomó los restos de la gema púrpura y los observó con lágrimas en los ojos. En eso, Rose se regeneró. Al verlos, lo primero que dijo fue:
-Probablemente podamos pegarla...
Extendió una mano hacia Mike y el se la entregó algo nervioso. Ella se marchó hacia la cocina.
Connie hablaba con Amanda, quien pidió ir a revisar al paciente. Mike procesó la información.
-¿Qué paciente?-preguntó. Ambas lo miraron. Amanda miró a Connie, quien miró al piso segundos luego.
-Steven.-simplemente dijo la de cabello más oscuro, con lágrimas en los ojos. La pecosa simplemente suspiró y se dirigió a la habitación de Steven, la cual estaba cerrada ya.
Rose volvió corriendo, con la gema pegada entre manos. Parecía curada... excepto que no tenía brillo. La chica estaba bastante molesta por ello, y no llegaba a comprender que la púrpura no volvería.
Mike acarició la gema entre manos. Sus ojos desbordaron en lágrimas y se hechó a llorar a lágrima viva. Rose nunca lo había visto así. Mike era el ejemplo de persona que no era sensible en esos sentidos. Pero...
Rose bajo la mirada y limpió con cuidado sus ojos, los cuales yacían húmedos. Miró a su madre, quien jugaba nerviosa con los dedos. Amanda bajó las escaleras nuevamente, con un gesto ilegible en el rostro. La chica no escuchó de lo que hablaban, hasta que Amanda dijo:
-Lo lamento mucho señora, pero no va a sobrevivir...
Rose no comprendió, pero vio los ojos de su madre repletos de lágrimas. Miró a la doctora, quien intentaba consolarla. De pronto escuchó a Connie hablar:
-¡No puede ser así! Steven es fuerte... No puede morir...
Palideció. No podía ser...
(POV Steven)
Desperté en mi cama. No comprendía nada, no sentía las piernas y me dolía mucho la cabeza. Hice un esfuerzo, y con piernas débiles caminé hacia la entrada de mi habitación. Pude ver a Connie y a una doctora, quien le dijo algo así como que no podría sobrevivir. Connie se mostró devastada.
Escuché el sonido del portal. Garnet, Perla y Obsidian llegaron por él. Miraron fijamente a la doctora, quien les dijo algo en un tono bajo de voz. Perla se hechó a llorar. Obsidian estaba sorprendido, casi alarmado, abrazó a Perla. Y Garnet quedó en shock.
Solo las miré. No podía moverme mucho. Sentí la mirada de Rose puesta en mi, y le dirigí la mía. Ella estaba completamente perpleja. Estaba algo pálida y se veía asustada. Le hice una seña y subió conmigo
-Rose...-le dije con voz suave. Ella lloraba un poco. Tomé su mejilla tibia con delicadeza.-Rose... tengo un plan...
(Narrador Omnisciente)
Connie pudo ver a Rose subir al cuarto de Steven. Pero en un inicio la ignoró. Sintió débilmente su voz y la del otro gem, por lo cual se sorprendió. Se dirigió hacia allí junto con la doctora y entraron a la habitación, detrás venían Ruby, Sapphire (quienes se habían desfusionado) y Obsidian junto con Perla.
Rose le había dicho algo a su padre, y se limpiaba las lágrimas con una tenue sonrisa en el rostro. Steven estaba descansando, mirándola. Miró a Connie y sonrío dulcemente.
-Hola, Connie.-saludó como si nada, a lo cual Connie se abalanzó sobre sus brazos. Steven se le aferró y la escuchó llorar suavemente. Acarició su espalda.
-No te dejaré ir...
Steven la soltó. La miró a los ojos, triste. Limpió sus lágrimas de manera delicada.
-...Sabes que moriré de todos modos...-tomó sus mejillas.- Pero... podrías venir conmigo.
Todos le miraron perplejos. Menos Rose, quien lloraba en silencio con una sonrisa. Los abrazó a ambos.
-Podrán vivir felices por siempre...-dijo en un tono lloroso. Los abrazó con más fuerza.-Se lo merecen...
Connie miró a Steven. Sonrió. Bajó la mirada.
-Pero Rose... Te quedarás sola...
-No es cierto...-la chica se separó. Miró a los gems.- Están conmigo.
Ellos asintieron, llorando de igual manera.
El cuerpo de Steven brilló en un tono rosado. Abrazó a Connie con fuerza. volvió a tener la forma de cuando era niño. Dio una risa suave.
-¿Quieres venir conmigo?
Connie solo le miró. Sonrío con dulzura y ojos brillantes. Se aferró a él y su cuerpo también brilló, volviendo a ser niña también. ambos dieron un brillo segador. Se distinguió como ambos se despedían de ellos, y desaparecían. La gema de Steven cayó en la cama. Con un último destello, su brillo se apagó.
Perla se hechó a llorar. Se aferró a Obsidian entre llanto. Ruby y Sapphire no estaban mejor, y Amanda solo se sentía triste.
Mike llegó corriendo, jadeando. Todos le miraron.
-Se está regenerando...
~~
Mike miraba expectante como Amatista se regeneraba. El resto estaba igual, pero el lloraba.
Amatista se regeneró. Su cabello seguía corto, pero esta vez era laceo. Sus ojos tenían unas gruesas ojeras marcadas y su traje era opaco. Miró a todos, con sorpresa.
Mike sonrío ampliamente, pero su sonrisa se borró ante la pregunta que ella formuló con miedo.
-¿Quienes son ustedes?
...
Criaturitas. He terminado con estos libros que tanto me han costado escribir. Corregiré luego los errores y gracias por todo su apoyo...