Mamá entra a mi cuarto en silencio, un silencio extraño.
-¿Cómo te sientes hija?- pregunta ella con una sonrisa tan cálida que me reconforta.
-Estoy mal,no le quiero perder, le quiero demasiado, tengo miedo - al terminar de decir la última palabra rompo a llorar, no puedo controlarme.
-Tranquila amor, estoy segura de que va a regresar, él te adora, admito que lo juzgue mal - dice mientras acaricia mi rubio cabello con suavidad.
-¿Y si ya no regresa?-
-Mejor piensa que lo hará, que va a querer encontrarte feliz y llena de vida como el día en el que te conoció-
- Estoy enamorada de él y moriría si llegara a perderlo- digo con la voz entrecortada.
Mamá sólo me abraza, me quedo dormida.
Él corre por un campo de trigo, lo miro y corro hasta él, pero entonces una bala lo atraviesa de una manera desalmada, corro aún más rápido que antes, grito tremendamente fuerte,corro lo más rápido que puedo, llego hasta su cadáver frío, lloro sobre él, entonces una bala me golpea a mí.
Despierto gritando y muy agitada, mamá entra corriendo a mi habitación, a su lado llega papá ambos muy asustados.
-¿Qué pasa?- dice mamá aterrada.
-¿Todo esta bien?- argumenta papá.
-Si - lloro en respuesta - Era una pesadilla.
Mamá se acerca a mí, me abraza con delicadeza, no puedo parar de llorar.
-Ya amor,sólo fue un sueño- dice.
Papá se acerca a de igual manera a mi lado y sostiene mi mano en forma de apoyo.
-Hija, tranquila, no me gusta verte así- dice él sonriendo.
-De acuerdo -contesto mientras me recuesto nuevamente en la cama para intentar dormir.
-Intenta descansar querida- dice papá dándome un suave beso en la frente, mamá hace los mismo y ambos salen de la habitación.
Sigo un poco desconcertada,quiero saber como esta Sebastián, pero no tendré noticias de él hasta dentro de varias semanas, en momentos como estos el tiempo pasa lentamente para mí, no quiero que sea así,ya no.
Hace una mañana preciosa y calida, se nota la primavera entre nosotros, me siento mal por haber peleado con Lili así que decido que lo mejor es hablar con ella y aclarar todo entre nosotras.
Decido usar un vestido color verde esmeralda que resalta mis ojos, además uso una pulsera dorada que me fue regalada por Lili en mi cumpleaños número 15.
Desayuno con mis padres en el comedor principal.
-¿Pudiste dormir mejor anoche hija? - dice mamá con suavidad.
-Si, descansé mejor,gracias -
-Hija tal vez deberías salir y despejarte un poco- añade papá.
-Fernando querido, es una buena idea, quizás unas vacaciones con la abuela- contesta mamá llena de alegría, ella ama visitar a la abuela no sólo porque es su madre si no porque es una de las personas más buenas y dulces que he conocido jamás.
-No me gustaría mantenerme muy lejos - digo afligida.
-Podría ser solo por el fin de semana,¿cierto Alejandra?- propone papá.
-Si me parece conveniente, ¿Qué opinas querida?-
-De acuerdo, sirve de distracción -
-Exelente, llamaré a mi mamá después del desayuno - dice mamá finalmente.
Es medio día, estoy lista para buscar a Lili, camino hasta su casa, la verdad se encuentra bastante cerca de mi casa, aproximadamente a 2 manzanas de ella, toco el timbre en cuanto llego, abre la puerta Lola quién es nana de Lili.
-Buenas tardes niña María - dice con voz dulce, lo que provoque que recuerde como cuidaba ella de Lili y de mí mientras jugábamos por todos lados.
-Buenas tardes nana Lola- digo con una gran sonrisa- ¿Se encuentra Lili?-
-Si mi niña, pero se encuentra bastante triste, tal vez tu compañía le beneficie- Me deja pasar - Ve a su cuarto, ella esta ahí -
Subo las escaleras perfectamente limpias y brillantes, recuerdo bastante bien el camino a su cuarto, llego, toco suavemente su puerta color blanco.
-Pase- Grita del otro lado de la puerta.
Giro la perilla dorada, se abre la puerta y entro con un silencio similar al de un fantasma, ella esta recostada en la cama en silencio, me acerco a ella, toco su hombro y se gira en ese instante noto sus ojos inchados y rojos de tanto llorar.
-¿Qué haces aquí? - pregunta exasperada.
-Yo..solo quiero disculparme, la verdad me exedi reclamando sobre algo que no era decisión mia-
Lili rompe a llorar en ese instante -Amiga, no tienes idea de cuanto te necesito en verdad-
La abrazo para intentar reconfontarla, me suelta y se mueve dejando un lugar libre para mí, me recuesto a su lado.
-Habla querida,¿Qué te sucede?- digo intentando animarla como cuando éramos unas niñas.
-Bueno tengo dos problemas bastante grandes,el primero es que extraño demasiado a Felipe,siento un gran vacío en mí -
-Tranquila señorita eso se va a solucionar en un periodo corto de tiempo, ¿Cuál es el otro problema? -
-Bueno hace casi una semana que se fue Felipe y ahora creo que tal vez tenías razón y no debí entregarme a él tan pronto -
-Sólo hiciste lo que tu corazón creía correcto y ese es el verdadero valor de la vida - digo sonriendo.
ESTÁS LEYENDO
María
RandomEl amor puede ser lo más hermoso pero después puede convertirse en aquello que tiene el poder de destruirte.