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Madeline se sentía incómoda pues la cama era muy pequeña para dos en cambio Gabriel se sentía de lo mejor al estar tan cerca de su amada. Dos polos muy opuestos que podían sincronizarse y unirse perfectamente.

-dormir en el suelo-dice Madeline, Gabriel se sobresalta y la ve pararse y tomar algunas cosas para acomodarlas en el duro suelo.

-De ninguna manera Maddie, tu duermes en la cama-dice Gabriel.

-Entonces tu lo harás-dice Madeline, el suspira.

-Está bien lo haré solo duerme aquí ¿si?-Madeline no puede creer que el haya aceptado pero se siente mal pues el no debería de dormir en el suelo sino con ella.

-Está bien-dice la joven y se asusta en su cama mientras que Gabriel lo hace en el suelo.


Toda la noche Madeline había pensado en como estaba Gabriel, pero el suelo la había envolvió en el momento menos oportuno.

Ese día estaba cortando leños pues su madre la había mandado pero ella iba a aprovechar a Gabriel y lo llevó para que el hiciese su trabajo.

-Solo tienes que cortar esos troncos con esta Acha -habla Madeline por quinta vez y Gabriel no entendía nada.

-Puedo usar mis brazos, puedo cortar estos troncos con mis manos Maddie no creo que sea necesario está Acha-habla el mirando a la ancha con asquerocidad, pues era un instrumento humano que el no quería ni tocar.

-Ya te dije que alguien puede verte y no quiero que se den cuenta asique haz lo que te digo-dice ella, el suspira cansado y empieza a hacer lo que Madeline le ha ordenado.

-Ha Madeline le ha causado mucha gracia y empieza a reír, el la mira mal pero no puede evitar reírse, parecían unos verdaderos enamorados.

-Eres mala Maddie-dice ella solo sonríe.

-Vamos debemos llevar estos leños a casa o mamá se enojara-dice Madeline el asiente y toma los troncos que había cortado para llevarlos a la pequeña casa.

Al llegar se encontró con Sabana y Henry que al verla se paró pues no esperaba que ella regresará, sabía lo que había pasado entre ella y William, el había presenciado la escena donde Madeline le gritaba al cuerpo ya muerto de William , pero se sorprendió al ver que no estaba sola, sino con un hombre, un hombre que a simple vista se miraba refinado pero también un fuerte guerrero.

-Henry-dice ella y lo va a abrazar, a Gabriel se le escapa in gruñido pues no quiere que nadie toque a su mate.

-Maddie ¿cuando has vuelto?-dice el aún sorprendido

-Ayer en la tarde, me han contado que te casaras con mi hermana, me la cuidas he-dice ella y el asiente sonriendo.

-Siempre lo haré-dice el hombre, y ve a Gabriel que tiene la mandíbula tensa.

-Ho si...el es Gabriel...el me ha ayudado a volver a mi hogar-dice la chica.

-Vi como...-dice el chico sabe que a ese hombre lo ha visto en algún lado pero no haya dónde.-¿nos hemos visto antes?-dice el chico, Gabriel lo ve y niega, pues el jamás había visto a ese hombre o eso pensaba el.

-No que yo recuerde-dice Gabriel, Henry le sonríe y empieza a hablar con Sabana.

Gabriel se lleva a Madeline a su cuarto y le sonríe, ella le devuelve la sonrisa y no puede evitar abrazarlo.

-No abraces a otros hombres que no sean yo...me duele verte con otros-dice el y ella sonríe con tal gesto.

-Tu no eres mi dueño-reacciona Madeline el no debe de comportarse así si no es nada de ella, pero es inevitable no sentir esas sensación

-No, no lo soy pero si soy tu pareja mi amo-esas palabras que hicieron que todo su mundo se volviera a color de rosa pero no iba a permitir que el se diese cuenta.

Él es el alpha [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora