Tú y yo ¿odio o amor?

Él

Abraham:

Hoy hace tres meses que entró una chica nueva a la escuela, no está nada mal solo que su aspecto la hace más rara de lo que se acostumbra a ver pero tiene algo, quizá sean sus ojos o el color de su cabello que hace que sin darme cuenta me encuentre viéndola.

La primera vez que la vi, fue en la entrada mientras pedía información de como llegar a su salón, no iba ni bien llegando cuando ya se le había hecho tarde.

Si mal no recuerdo iba con un molote todo deshecho, una pulcera de baqueta en la mano derecha y varias tejidas en la izquiera, llevaba anillos en la mano derecha uno en el anular, en el meñique y en el índice y en la izquierda en el pulgar y en el del medio.

Casualmente un día note que me miraba y a lado de ella estaba Brianda (esa chica da miedo) y algo se decían a lo que supongo era de mi pues su cara mostraba molestia y asco cada que me miraba ella.

Ese mismo día tuvimos taller para mi sorpresa el taller de ella esta justo enfrente del mío, vaya sera mas fácil verla de lo que pensé.

-Abraham que piensas de la nueva? - me preguntó Damián.

- Qué pienso? Qué debería pensar Damian? Sólo es la nueva pronto pasara de moda hablar de ella.

- Pasar de moda? Tal vez para los demas pero para ti...- me miró y sonrió irónicamente- sí porque se nota que estas interesado en ella, el que la veas de reojo cada que ella se voltea te hace ver como acosador- burlandose lo dijo.

- Sí la que me acosa es ella. Y ya déjate de hablar estupideces y ponte hacer el trabajo! -lo golpee.

-Tal para cual entonces, hahahaha
bueno mientras no se de cuenta tú psico-novia que la veas no tendrá consecuencias.

-Hablas como si la muchacha me interesará, cuando no es así, deja de hacer cuentos en tu cabeza. Y deja de molestar tenemos que terminar esto.

Después de tres meses de esa plática con Damián pasaron muchas cosas una de ellas y la que se volvería chisme... El haber terminado con mi psico novia (gajes de ser pupular, no tienes vida privada) duré dos días sin ir a clases para que el fuego se apagará...

Pero parece que a una eso le paso de noche, la rara que me acosaba hablaba sola cuando me brinque la barda de la escuela y la boba ni se dio cuenta que yo la escuchaba.

-Hahahahaha! -solté la risa más burlesca de mi vida- Así que el tema ya se propagó por la escuela, ensima de que tuve brincarme la barda llegó escuchando las preocupaciones de una chica por mi que es un poco molesto, pues ni te habló. Métete en tus asuntos y deja de preocuparte por otros - con un tono de molestia lo dije.

No sé porque le dije éso, mis palabras simplemente salieron de mi boca sin poder evitarlo. Su cara cambio de emoción, sorpresa ha una que jamás le había visto, era como tristeza y coraje. Creó que me responderá o tal vez no lo haga- pensaba.

- Pero quien te haz creído? Quién eres tú para hablarme así? Que seas guapo y popular, no te da derecho a molestarme y hablarme de esa forma, idiota petulante!!! Mis amigas tienen razón, no se que rayos te ven!! Idiota.

Yo quedé como piedra, no pensé que me contestara así, supongo que mi cara mostró lo cuán sorprendido que estaba, se fue hecha una fiera y yo solo no pude decir nada quedé totalmente sorprendido.

Reaccione al verla agarrar sus cosas e irse, pero las clases aun no terminaban.

-La cague, la cague, la recontracague!!!! Putisima madre, la primera vez que hablamos y soy un completo idiota!! -golpea la pared- Pero ella también se lo gana, no me conoce y se hace ese tipo de cuentos mentales. Yo? Estar mal por una mujer? Si esa estaba loca!! -gritaba totalmente irritado.

-Abraham, calmate, calmate por todos los santos -decía Damián en un tono que me irritaba más.

- Cómo quieres que me calme pedazo de animal!!?? Qué no ves o te haces el que no? La primera vez que tenemos oportunidad de hablarnos y me sale lo ojete, no si de plano!

-Hahahaha, quien te viera- en tono de burla lo decía.

- Si no vas a aportar mejor callate y deja de burlarte.

-Mira Abraham lo unico que tienes que haces es disculparte animal y ya con eso tendrás. Esa morrita anda cacheteando las banquetas por ti. Solo intentalo y verás.

-Éso crees?- él asintió- pues lo intentaré -contesté no muy convencido.