AMIGOS

Capítulo 38

— Em...es hora de irse — Mi madre se sentó a mi lado y sobo mi espalda.

— Pasaremos la noche en un hotel, como le pediste a mi asistente. — Mi padre se arrodillo a mi altura mientras se apoyaba en su bastón.

Asentí.

— ¿Él se va a quedar contigo? — Mi madre miró a Connor.

— Si no les molesta señora, no tengo demasiados ánimos para volver a mi casa.

Salimos del hospital y la brisa me golpeo el rostro, sentí como las lagrimas que bajaban por mis mejillas me congelaban la cara mientras avanzábamos hacia el auto. El camino fue silencioso pero no lo suficiente para quitarme de la mente la culpa o para lograr hacer que me quedara dormida.

Al llegar mi padre se quedo con mi madre haciendo el registro y nosotros avanzamos entre los pasillos y las alfombras de color azul, se veía un lugar elegante...Como a todo lo que estaba acostumbrada durante el último año.

Abrí la habitación y me senté en la cama para quitarme los botines, Connor exploro el espacio para después hacer lo mismo, en ese silencio tan largo, nada nos pareció incomodo, se acostó y extendió sus brazos, me recosté en él y sentí como paso los dedos por mi cabello hasta que me quedé completamente dormida, en sus brazos de nuevo...Después de tanto tiempo dormiría sin cuestionarme si era valiente o no, si era buena o no después de abandonar a mis seres queridos.

Punto de vista de Leo:

Horas antes de estar frente a ella, pedí que le compraran un cambio de ropa, junto con algo para poder dormir, no la dejaría ir una noche más sin tratarla como merece.

Me cuestionaba a mí mismo si yo era suficiente, si la pasión se mantenía viva entre nosotros o si solo íbamos a ser amigos con hijos en común, pero yo la amaba desesperadamente. Avancé hasta el baño y la miré de espaldas dentro de la tina. Me senté al lado y tomé un cepillo.

— ¿Me permites cepillarte el cabello?

Se dio la vuelta algo apenada.

— Tú y yo seguimos siendo esposos, no deberías sentirte mal.

— Pero ahora es distinto. — Susurró.

— Pero tenemos mucho que trabajar juntos, esta vez ya no vas a estar sola, ya no te vas a hundir tomando hasta perder el control, vas a florecer...Aunque primero atravesemos oscuridad con la perdida de Thomas.

— ¿Crees que Emily vaya a soportarlo? — Tomo mi mano.

— Es fuerte pero no se que tanto...Porque en el último año la vi debatirse entre la culpa y la ansiedad...Pero jamás rendirse, es perseverante como tú, pero no sé si quiera perseverar ante ser valiente y perderlo. — Besé su cabeza.

— Estoy lista para dejarlo ir — Me miró con los ojos llorosos. — No se merece estar así más tiempo pero me gustaría que se fuera sabiendo que su hermana volvió y que el miedo es algo que no va a tener que sentir más.

Punto de vista de Emily:

— Me preocupa muchísimo Ana, debe sentirse destruida con lo de...

— ¿Ana? — Connor se movió en su lugar de la cama y me miró.

— Sí...Ella esta tan joven y que él la deje sola...

—Solo va a dejarte a ti y a tu familia, Anna murió antes del intento de suicidio de Thomas...

— ¿Qué? —Dije levantándome con rapidez.

Habíamos caído completamente dormidos y ahora veíamos el amanecer juntos desde las enormes ventanas de la habitación.