CAPÍTULO 1 ☽ Inusual Prospectiva ☾

1K 37 11
                                    

Diecisiete de febrero

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Diecisiete de febrero


En un pequeño pero mágico pueblo, revestido de montañas y misteriosos bosques, mis días transcurrían entre las mismas colinas que me habían visto crecer. A mis dieciséis años, no era más que una sombra en la rutina del pueblo, una extraña sombra que a pesar de desconocer la razón, desde que tiene memoria, es vidente. Susurros de la vida que me son enviados por algún motivo y que yo sigo sin saber qué hacer con ellos.


Aquel día, mientras las montañas le daban la bienvenida al sol y con él a un nuevo día, me sentí extrañamente diferente, algo dentro de mi pecho, era como un fuego que no debía estar allí. 

A pesar de que despertó cierto miedo en mí, procuré ignorarlo, pues mi rareza no extinguía mis responsabilidades en la escuela.


Mis hermanas y yo compartimos un lazo inquebrantable, una unión forjada a lo largo del tiempo y las circunstancias. Nataly, la mayor, ha sido siempre la guía y la protectora, mientras que Megan, la menor, con su energía vibrante, aporta luz y alegría a nuestras vidas. Nataly y yo somos hijas de los mismos padres, pero nuestra madre, tras su divorcio, encontró un nuevo amor en el padre de Megan. Desde ese momento, nuestras diferencias de sangre se desvanecieron, y nos volvimos inseparables, una hermandad que sobrepasa lo biológico.

Al llegar a la escuela, la rutina de cada día se desplegó ante nosotras. Nataly se unió a su grupo de amigos, mientras que Megan, siempre rodeada de admiradores, se movió entre los populares, ocupando su lugar natural en el ecosistema social del colegio. Por mi parte, me reuní con Jenny y Alexa. 

A pesar de ser hermanas, nuestras vidas escolares corren por caminos distintos, ya que estamos en diferentes grados. Esto nos permite encontrarnos solo en breves momentos, como el almuerzo en la cafetería, un espacio ocasional para reconectar.

Al caminar hacia los casilleros, cada una siguiendo su propio camino, llegué al mío y lo abrí con un suspiro anticipado. Observé mi horario: historia, matemáticas, lenguas. Con la eficiencia que da la costumbre, empaqué los libros necesarios para las primeras tres horas antes del descanso. Justo cuando me disponía a cerrar el casillero...



~Estaba en un lugar extraño, era como un prado verde y hermoso, pero por alguna razón se sentía como si no fuera real o como si fuera de otro planeta, por lo que inmediatamente me sentí perturbada. Había neblina y no alcanzaba a ver casi nada, no sentía frío pero mi cuerpo me temblaba, anduve en la misma posición por un tiempo que no puedo definir hasta que el viento empezó a soplar con fuerza, a lo lejos escuché sirenas y estallidos, dirigí mi mirada al cielo y vi algunos grupos grandes de aves volando de prisa en una dirección especifica, entonces, el cielo se oscureció para luego tornarse rojo, había humo por todas partes, comencé a escuchar gritos desgarradores por doquier. Estaba petrificada al sentir como algo maligno se acercaba, y a continuación, vi cómo detrás de las rojas nubes de aspecto apocalíptico y con ayuda de destellos de luz detrás de estas, se dejaba ver una silueta colosal, su figura era fornida y con grandes cuernos en su cabeza, una criatura digna de intimidar a cualquiera.

Alas Negras: Metamorfosis  | Libro Ⅰ |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora