17.

191 19 6
                                    

Él colocó las manos en mi cintura y despegó mis pies del suelo invitandome a rodearlo con mis piernas, mi cuerpo, sin poder evitarlo, respondía ante el tacto del suyo y a sus silenciosas peticiones, sus manos viajaron hasta mi trasero y él empujó su miembro ya erecto dentro del mono deportivo contra mi pelvis, mordí mi labio inferior y aunque deseaba con todas mis fuerzas ser lo suficientemente fuerte para negarme, no podía, necesitaba devorar sus labios aunque fuese por un instante, él inclinó su rostro hacia el mío y dejé caer mis párpados esperando su roce, atrapó mi labio inferior con sus dientes, mis dedos se escondieron en su cabello y cuando su pecho chocó con fuerza contra el mío mi móvil comenzó a sonar haciéndome entrar en razón, no demasiado, pero si como para alejarme momentáneamente y recordar a Luke.

Deje caer mis piernas al suelo y cuando estuve de pie, logré escabullime de los brazos de un Christopher molesto ya que acababan de arruinar el momento, busqué entre los cojines del sofá aquel aparato inoportuno, me encontraba doblada hacia adelante levantando los cojines desesperada por apagar aquella cosa cuando sentí unas gruesas y fuertes manos rodear mi cintura y pegarse a mi cuerpo, tomé el teléfono con ambas manos ya que su cercanía no me permitía ser tan ágil como para sostenerlo con una sin que se me cayera, mi espalda ahora erguida mientras miraba con una ceja arqueada la pantalla sin lograr reconocer el número, mientras que las manos de mi nuevo vecino se colaban despacio debajo de mi camiseta hasta llegar al borde de mi brasier.

Christopher -dije entre dientes antes de contestar la llamada- buenos días

Te extraño -reconocí la voz al otro lado del teléfono al instante, y aunque traté de no sonreír, lo hice, ya que me parecía un gesto muy dulce de su parte, gesto del cual no era merecedora-

Hola amor, también te extraño -aquello fue suficiente para que mi amigo se alejara de mi y su rostro tomara un color carmesí, los orificios de su nariz se abrieron e hizo una mueca con los labios. Caminé en dirección al comedor para alejarme de él, pero el extendió su mano y agarró mi muñeca con fuerza para que yo no pudiese dar un paso mas-

Suelta -moví los labios y él negó con la cabeza, no era el momento de comportarse como un niño berrinchudo pero al parecer el no podía controlar aquella actitud suya y mucho menos si se trataba de Luke al otro lado de la línea, aunque entendía su posición él también debía hacer un esfuerzo para entenderme a mí, se trataba de mi esposo, a quien no podía ser cien por ciento fiel gracias al amor que sentía por ambos-

Preciosa ¿llamé en mal momento? -yo miraba a Chris fijamente, hice rechinar mis dientes y el chico delante de mi solo sonrió con gracias, ¿en serio?-

No pasa nada mi vida, puedes llamarme cuando quieras, eres mi marido -ese comentario hizo que el joven entornara los ojos y susurraba un "por favor" luego de soltar un bufido, yo ejercí presión en mi mandíbula, ¿acaso quería que Luke se diera cuenta de su presencia?-

-Te noto tensa

No es nada mi cielo, pero dime ¿a qué se debe tu llamada? -moví mi mano para soltarme pero el muy tonto me pegó a su cuerpo y sonrió dejando ver todos sus dientes e introdujo sus manos en mi camiseta dejándolas reposar en mi espalda baja, sus dedos se movían hacia arriba y hacia abajo-

-Necesito que vengas a la oficina ¿es eso posible?

¿Pasó algo mi amor? -dije en tono preocupado ya que no era común su llamada y mucho menos su petición, Chris comenzó a asentir de manera enfusiva deseando que saliera de mis labios que a mi marido efectivamente le había sucedido algo-

Si, es que .. Quiero hacerte el amor en mi oficina -casi pude oírlo sonreír al otro lado de la línea, dejé escapar el aire de mi cuerpo, para salvar a uno debía lastimar a otro, así de dramática estaba siendo mi vida últimamente como si de una novela se tratase-

No puedo vivir sin tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora