Solamente yo

31.Perdoname, Perdonale, Perdonate!

Todo está sucediendo de una forma rápida, ahora Valeria y Carlos estaban juntos, al igual que Emily y Alejandro, todo parecía ir bien, Vale tenia trabajo en un pequeño laboratorio, Carlos también había conseguido trabajo y seguía estudiando lo que le faltaba de la Carrera, tenían días de no recibir ningún citatorio para el juicio aunque este seguía avanzando. A pesar de que eso los molestaba solo era por pequeños lapsos de tiempo.

La mama de Valeria llegaría de visita por unos días, iría con Annie la mama de Jordán tía de Vale, la cual estaba tensa por alguna razón, le encanta recibir a su mama, ya tenía mucho de no verla, pero sabía que ella no solo iba con el fin de visitarla, las veces que hablaban por teléfono la notaba rara, como si hubiera algo que no le decía, y tal vez la visita también era para eso.

Al llegar a casa después del trabajo Vale se cambió su vestimenta por algo mas cómodo, limpio un poco la casa, mientras Carlos prepara la cena, al cabo de unos minutos tocaron a la puerta, Vale se apresuró a abrir, cuando abrió no le dio tiempo de saludar cuando su madre la abrazaba de forma tierna y un poco exagerada. Ella solo sonrió y acepto el abrazo gustosa, después abrazo a su tía Annie, Carlos apareció e hizo lo mismo, él ya era parte de la familia, y así lo trataban.

Tuvieron una cena muy animada, siempre intentaban hacer reír a Annie quien a veces se perdía en sus pensamientos, los cuales todos sabían que era Jordán, el juicio y todo lo que esto conllevaba. Después decidieron ir a conocer un poco la ciudad, al parecer Vale no hablaría con su madre ese día, así que se dispuso a disfrutar cada momento.

-Vale hija- la llamo su madre apartándole del resto.

-Si mamá? Que pasa?- la mamá de Valeria solo sonrió y se acercó más a ella.

-Me encanta verte feliz- le dijo en algo parecido a un susurro- me encanta que estés con Carlos y como él te cuida.

Vale solo asintió, era cierto; él la quería, la cuidaba, todo estaba muy bien entre ellos, pero sabía que su mamá tenía algo más que decir.

-Tu y yo tenemos que hablar- le dijo Vale- hay algo que no me has querido decir mamá, te conozco bien.

Su madre solo suspiro y finalmente le dijo que tenía razón pero que eso sería mañana, que hoy solo quería pasar un momento agradable junto a todos.

Al día siguiente Vale y Carlos fueron a trabajar, al llegar a casa un poco agotada se dirigió a donde se encontraba su madre, preparaba la cena, olía delicioso.

-mmm, huele estupendo mami.

-hija, como te fue? No te oí llegar- sonrió con ternura hacia su hija.

-Bien mami, no te aburriste metida todo el día aquí?- ella negó con la cabeza así que Vale continuo hablando- que es eso tan importante sobre lo que hay que conversar?

La mama de Vale volvió a suspirar de forma pesada, se voltio hacia su hija, esta se sentó en un taburete del desayunador y su madre rompió el silencio que se había instalado entre ambas.

-ya hable con tu tía Annie, fue difícil pero lo tenía que hacer... no quiero verle mal, lo sabes verdad?- Vale solo asintió- esperaba hablar cuando estuvieras tú y Carlos pero creo que mejor así.

-Qué es eso que tienes de decirme mama?

-Hija odio esta situación... me refiero a lo referente al juicio, Annie está agotada y puedo notar que ustedes también... además ese rencor que día a día crece en ustedes no es... no es bueno.

-Mamá él lo mato, entiéndelo, Gabriel lo dejo morir- sentía que su voz se quebraba.

-Déjame continuar hija... solo no quiero que vivan con eso...

-Que quieres que haga? Que detengamos el juicio, que ese infeliz quede libre?- su voz sonaba molesta.

-No hija, yo entiendo que él tiene que pagar, se hará justicia lo se... pero lo que quiero es que tu corazón y el de Carlos no se llene de odio hacia nadie aunque esa persona parezca merecerlo.

-Mamá no te entiendo... sabes lo que me estas pidiendo? Sabes...- pero su madre la interrumpió antes de que pudiese continuar.

-Si lo sé, te pido que me perdones por lo que estoy diciendo aunque tenga la razón... que le perdones por el crimen que cometió y sobre todo que te perdones a ti misma.

Valeria se levantó muy aturdida, que era eso de que se tenía que perdonar a ella misma? Porque tenía que hacerlo?... salió hacia su cuarto y se encerró ahí, más tarde alguien abrió la puerta de su habitación, era Carlos que entraba con una bandeja con comida en la mano, ella no lo veía, estaba demasiado sumida en sus pensamientos.

-Tu madre ya hablo conmigo- dijo Carlos para llamar su atención. Vale solo suspiro.- Vale ella tiene razón.

Sus ojos se abrieron como platos, estaba escuchando bien? En serio Carlos había dicho eso? Iba a responder pero él se le adelanto.

-tienes que verlo desde mi punto de vista, por sobre toda las cosas es mi hermano, es mi familia, sé que tiene que pagar y así será... pero sé que en ti y en mi estaba creciendo cierto rencor y más en ti, yo jamás vi que tu odiaras a nadie pero cuando hablamos de Gabriel puedo ver ese odio en tus ojos y lo confirmo con la dureza en tus palabras. Pero no es bueno, yo quiero una vida contigo pero sé que eso a la larga te atormentara y no te dejara tranquila.

Vale solo asintió, no quería dar su brazo a torcer pero ahora entendía porque ella también debía perdonarse, Carlos tenía razón, ella jamás había odiado a nada, siente se mantenía al margen, su vida estaba llena de paz, eso transmitía ella pero ahora estaba ese sentimiento que oscurecía parte de ella de su ser, ese sentimiento que tenía que dejar ir, que no la llevaría a nada bueno, además le gusto escuchar que Carlos que quería una vida con ella, un futuro y si no dejaba eso atrás ese sentimiento siempre la iba a atormentar.

Nota:

Hola, perdón por tardar en actualizar, estaba bloqueada y muchas otras cosas, en el multimedia les dejo la canción que para mí se identifica con lo que siente Vale, "en el día de hoy" de Cinco de enero.

Otra cosita, esta es la penúltima vez que actualizo, me faltan alrededor de 7 cap para acabar la novela.

Att. M. J. Jarquin