-Mamá, ¿cuánto les falta? Me estoy muriendo de hambre, por favor.
-Mientras tanto puedes poner la mesa, llegarán en cual quier momento.
Había aguantado todo ese tiempo desde que Kol me dijo que iba a ser tía sin decirle nada a mi familia. No abrí la boca para decir absolutamente nada, y ni siquiera sé cómo lo hice. A mi madre probablemente le daría un infarto de la emoción y a Kim... Es Kim, se pondría a llorar. Era la primera Noche Buena que pasaríamos sin mi padre, eso me entristeció bastante, pero la llegada de Kol y Chloe con el nuevo bebé en camino me animaba.
-Kim ayúdame a poner la mesa.
-Pero te toca a ti.
-Solo ayúdame, ¿quieres? Por cierto, mamá. ¿Pensaste lo de Peter? Ya ha pasado mucho tiempo...
-Sí hija, he decidido no tener citas por un tiempo, espero que lo entienda. - Asentí y me limité a poner la mesa.
Me puse a pensar en Finn y Cody. Resultó que Cody se había caído de la litera de su habitación y se había golpeado la cabeza con la mesa de noche. Tuvieron que ponerle puntos pero no hizo falta que se quedara en el hospital así que cuando Finn llegó a su casa me llamó. Me pidió perdón por haberse ido sin decirme nada, y yo le pedí perdón por haber sido tan estúpida. Desde entonces había pasado una semana y no habíamos hablado mucho. Estaba decidida a hacer algo, pero no sabía qué.
Kim y yo nos sobresaltamos al escuchar el timbre y fuimos corriendo a abrir la puerta. Mi madre dejó de cocinar para saludar a Kol. Abrí la puerta y mi hermano estaba parado en el portal, cargando un montón de maletas, las tres lo abrazamos y él hizo lo mismo. No vi a Chloe hasta que me di cuenta de que había una melena rubia en el asiento de atrás del conductor intentando abrir la puerta. Ya me caía bien.
-Tengo algo que deciros. - Kol rodeó el coche que había alquilado y le abrió la puerta a Chloe. Mi madre y Kim estaban esperando otra cosa, pero al ver a Chloe salir del coche y rodearlo, con una barriguita de tres meses, se quedaron de piedra. Ella era preciosa. Su melena era rubia y tenía una sonrisa que agradaba mucho verla. A mi madre se le caían las lágrimas mientras intentaba correr con sus tacones hacia ella para abrazarla, Kim se había quedado con la boca abierta todo ese rato y yo me había dedicado a grabar el momento.
-Cierra la boca, Kim, van a entrar moscas. - Kim despertó y sacudió la cabeza.
-¿Tú lo sabías? - Asentí mientras le sonreía. No sé por qué me dio la impresión de que no le había gustado la noticia hasta que en un pestañear vi a Kim colgada de Kol y luego bajarse de sus brazos para abrazar a Chloe. Parecía contenta.
-¡Kat! - Chloe subió las escaleras para llegar hasta la puerta y me dio un abrazo. - Por fin nos conocemos. - Ahora era yo la que estaba con la boca abierta. Era la novia perfecta para mi hermano.
Chloe había resultado ser más simpática en persona. Cuando hablábamos por Skype no podíamos hablar de muchas cosas porque estaba mi hermano, pero al terminar de comer nos sentamos en el sofá a hablar y terminé contándole lo de Connor y lo de Finn. Era una chica muy madura y me dijo que había hecho bien en dejar a Connor y seguir con mi vida. Sin embargo, no estaba de acuerdo en que porque yo no quisiera una relación tuviera que ser tan antipática con otros chicos. Reflexioné bastante sobre el tema y ella me aconsejó llamar a Finn e invitarle a cenar a algún sitio, para que viese que sí me importaba. Así que eso hice. Llamé a Finn y le dije que lo invitaba a cenar a un restaurante que estaba en el único centro comercial que había en mi pueblo. Él aceptó con la condición de que fuéramos en su coche, y yo accedí.
ESTÁS LEYENDO
Just my Luck
Roman pour Adolescents¿Qué pasa cuando nada ni nadie puede cambiar tu vida y solo tú tienes la oportunidad de tirar el dado? ¿Lo tirarías? ¿O esperarías a que otra oportunidad llegue volando de algún lugar secreto? Kat no es de las que espera, pero tampoco de las que arr...