Sabor a ti.

Capitulo 83

____ cuelga el teléfono algo molesta, Nash se le acerca con Kate en brazos.

-¿Que sucede?

-Lo de la cama de la niña. No podrán tráela hoy!

-¿En serio? Y mira que ya guardamos la cuna.

-Si.

-Bueno tu no te preocupes, yo la busco, no tiene caso sacar de nuevo la cuna para luego guardarla mañana.

-¿Estas seguro?

Nash sonríe y le da un pequeño beso.

-¿Me acompañas o te quedas?

____ sonríe y le devuelve el beso.

-¿Que te parece si te espero aquí? -Pregunta con la voz seductora.

-Voy asegurarme de que la niña este durmiendo.

Nash la toma por la cintura y besa sus labios sensualmente pero de pronto sienten las pequeñas manos de Kate sobre sus rostros, ambos se separan y se ríen.

-Mejor la llevo a casa de mi mama.

*****

Nash se encontraba dentro de la tienda, esperando a que unos trabajadores lo ayuden a montar la pequeña cama de Kate en su carro, de repente él ve como una mujer entra corriendo, como si estuviera corriendo detrás de alguien, el sigue la mujer con la mirada, hasta que ve lo que parecía ser una pequeña cabeza con cabello castaño corriendo detrás de unos muebles luego escucha la risa burlona de un niño, la señora intentaba alcanzarlo pero tenia muchas bolsas en mano, Nash se ríe y decide ayudarla atrapar al pequeño travieso.

-Yo lo agarro por aquí.

El corre por el otro lado, y el niño choca entre sus brazos, Nash lo carga, pero al mirar su rostro se queda pasmado y serio.

-Hay señor, Gracias! Este niño me va matar uno de estos días.

La señora respira fuerte buscando aliento, ella luego alza la mirada hacia Nash y el pequeño también se queda asombrada.

-Dios....es usted....tan parecido...

Nash no puede pronunciar palabra, su parecido con el niño era increíble.

-Lo veo y no lo creo.

Ella se acerca aun mas, con la expresión perpleja.

-¿Como se llama?

Antes de que él pudiera contestarle, escuchan una voz.

-Nash Grier.

-¿Ann?

-Hola, Nash.

-Ann, ¿Donde has estado?

Ann voltea hacia la señora.

-Déjanos solos por favor.

La mujer se retira, mirando hacia atrás aturdida.

-¿Porque te fuiste así? Sin decir nada, Desapareciste.

-¿No era eso lo que tu querías? Querías estar con _______ ¿no? Pues te deje el camino libre.

-Estabas embarazada, ¿Y el....

Sus palabras se quedaron cortas al darse cuenta del niño que llevaba en brazos.

-No puede ser..

-Te presento a Nash, tu hijo.

Nash siente que su corazón quería saltar de su pecho, en sus brazos se encontraba su hijo, indiscutiblemente era él,  el parecido era innegable aunque durante el embarazo de Ann, él no sintió nada hacia ese bebe que supuestamente era suyo pero al mirar el rostro de este pequeño, Nash siente una ternura inexplicable.

-¿Porque nunca dijiste nada? ¿Como fuiste capaz de desaparecer con mi hijo?

-Tu querías estar con _____! Y te dije que no le pondré madrasta a mi hijo y menos esa..

-No te atrevas a insultarla ¿me oyes?

Nash respira profundo, intentando mantener la calma al ver como la expresión de su hijo cambia de una sonrisa a preocupación.

-Este no es el lugar de discutir sobre esto.

-Tienes razón....Pásame a mi hijo.

-Tengo derechos.

-Por ahora no eres nadie, Ni tu apellido tiene así que no tienes derechos a reclamar nada.

Ella le arrebata el niño de sus brazos, el pequeño empieza a llorar.

-¿Así tratas a tu hijo?

-Solo esta asustado, a mi hijo lo adoro.

Ann empieza a alejarse.

-Espera, Hay muchas cosas pendientes, Mi hijo,nuestro matrimonio.

-No te preocupes, Nashty, Mi abogado se pondrá en contacto contigo.

Ella se aleja rápidamente, dejando a Nash desconcertado y con la palabra en la boca.