Un amor inesperado

10.Cambiaste mi vida

Se sentaron de nuevo en su lugar mirandose

-¿Sabes?, ya hasta olvidé que le temo a estas cosas

-Lo pude notar, te dije que pasaría rápido, es solo que pierdas el miedo.-Giró su rostro hacia la ventanilla sin borrar su sonrisa

-¿Ya llegamos?, eso fue rápido.-Dijo mirando la ciudad debajo de ellos, acarició su mano

-Listo, ya llegamos

-Eres tan perfecto

-Eso no es verdad...solo tú eres perfecto.-Respondió mirandolo y el chico le robó un beso

-Te digo que lo eres y punto, no es algo que esté a discusión

-Somos perfectos, eso es todo

-Se les avisa que estamos por aterrizar en París, será mejor que abrochen sus cinturones.-Dijo una voz por el parlante, Donovan se acomodó en el asiento sin dejar de mirar al chico

-Viene lo difícil.-Bromeó

-Oye no me ayudes tanto..-Soltó una risa nervioso y se aferró a su mano

-Solo estoy jugando, lo dificil ya pasó y ni siquiera lo sentiste

-Eres cruel..-Le sacó la lengua

-Un poquito, y si sigues sacando la lengua juro que te la arrancaré

-¿Y cómo harás eso?.-Dijo sacandola de nuevo y dejandola fuera

-Asi.-Dijo para morder su lengua y no soltarla, luego la soltó dejando un beso en los labios del chico.-No soy tan cruel

-Lo sé

-¿Te confieso algo?

-Claro dime

-Tengo un hermano gemelo, ni siquiera lo sabía, hasta el día que ingresé aquí, ni vida estuvo llena de mentiras

-Ey, arriba esos ánimos, y bueno, espero no equivocarme de hermano.-Le dijo divertido tratando de que sonriera

-Espero que eso no pase, porque me veré obligado a romperle los dientes a mi propio hermano.-Dijo bromeando pero sin sonreír

-Oye no te pongas así, llegando tú y yo iremos a conocer Londres ¿si?, ambos estaremos juntos, no te dejaré y olvidarás por el resto del día el tema de tu hermano ¿de acuerdo?

-Sí, tú eres el único que me hace sentir bien en estos momentos

-¿Vamos?.-Dijo al escuchar que ya habían aterrizado

-¡Vamos!.-Respondió levantandose del asiento

Salieron del lugar, Gabriel estaba más tranquilo y es que cómo no estarlo si Donovan lo llenaba de vida

-¿Qué es lo que haremos primero?

-Lo que tú quieras

-Tú eres el chico divertido aquí, así que tú decide.-Rió leve

-De acuerdo, creo que tengo algo en mente pero primero hay que ir al hotel a hospedarnos

-Me parece bien

Caminaron adentro del aeropuerto y fueron al área del equipaje, se soltaron para tomar cada quien su equipaje, luego salieron a tomar un taxi, subieron y le indicaron al taxista la dirección del hotel, Donovan tomó la mano de Gabriel y recargó su cabeza sobre su hombro, ambos miraron el paisaje por la ventana

-Es hermoso ¿no?

-Lo es, siempre quise conocer este lugar

-Igual yo, me agrada conocerlo en compañía tuya.-Admitió mirándolo

-Eso me fascina.-Dijo para robarle un beso

-Estoy completamente seguro que nos divertiremos demasiado en este lugar

-Así será, ya lo verás

Luego de un rato el taxi estacionó, bajaron y pagó para tomar la maleta

-Andando, vamos a recepción a registrarnos

-Te sigo.-Le respondió tomando su equipaje, Donovan habló con la recepcionista y luego miró al chico

-¿Quieres en la misma habitación o separados?

-En la misma, si no te incomoda

-Claro que no lo hace.-Pidió la habitación, tomó la llave electrónica y luego su equipaje.-Vamos, es en el tercer piso, ¿escaleras o elevador?

-Elevador, a menos que quieras que llegue muerto por las escaleras

-Vale, elevador será.-Caminaron hasta ahí y oprimió el botón para abrir, unos segundos después las puertas abrieron y entraron, dejó la maleta en el suelo para oprimir el botón del tercer piso, miró al chico con una sonrisa

-¿Sabes algo?, muero de hambre, el viaje fue agotador

-Pediremos que nos lleven algo a la habitación ¿si?

-Me parece bien.-Dijo tomándolo de la mano

Donovan se acercó para besarlo y de inmediato respondió tomándolo por el rostro impidiendo que se alejara, lo cual el otro no pensaba hacer pues rodeó su cintura con sus brazos apegándolo a él, mordió su labio inferior y lo siguió besando hasta que vieron el elevador abrirse y se separaron tomados de la mano y aguantando una carcajada al ver a un par de señoras entrar y mirarlos como si fuesen unos enfermos, ambos salieron del elevador sonriendo y caminaron hasta la habitación donde entraron dejando su equipaje, Gabriel se tiró en la cama

-Al fin

-Eso fue cansado

-Sí, fue agotador

-¿Qué quieres de comer?.-Le preguntó recostandose a su lado y cerrando sus ojos

-¿Pizza o qué se te antoja a tí?

-Yo me como todo, así que pizza será.-Se estiró tomando el teléfono para marcar a recepción, el otro encendió el televisor mientras pedía la orden

-¿Sabes?, me haces sentir tan bien.-Le dijo al sentir que le acariciaba el cabello luego de colgar

-Y tú a mí, me alegro de haberte encontrado

-Cambiaste mi vida para siempre Donovan, nunca me había sentido tan vivo como hasta hoy, estaba harto de estar respetando todas las reglas y contigo...contigo fue diferente.-Suspiró contento

La sonrisa del ojiazul parecía no caber en su rostro, comenzó a repartir pequeños besos en todo el rostro del ojiverde, mientras reía leve ante sus besos para luego atraparlo en uno algo largo, Donovan se giró colocándose a horcadas sobre él, luego comenzó a hacerle cosquillas

Pasaron la tarde entre risas, besos, caricias, abrazos, todos muestra de un amor que comenzaba a nacer, un amor que ninguno de los dos imaginaba que fuera tan fuerte en un futuro, uno que rompería cualquier barrera que se les pusiera en el camino, porque era un amor como pocos, un amor verdadero lleno de honestidad, confianza pero sobre todo cariño, ese cariño que ambos se tuvieron mutuamente desde el primer momento en el que se conocieron, desde ese día todo cambió en la vida de ambos y no se arrepentirían de ello, sino que gozarían cada momento a plenitud