Lo último que Logan recordaba era haber sido lanzado por los aires por cierta chica albina. El sabia lo que había visto, la había visto morir delante de sus ojos cubierta de sangre, pero también sabia que la había visto en esa habitación junto a Anna.
¿Qué había pasado con ella? Se levanto del piso con un poco de dificultad, a su alrededor todo estaba oscuro, tan oscuro que no podía ver su propia mano frente a su rostro. Comenzaba a pensar que estaba muerto, que todo había terminado para el, pero no estaba muerto, estaba tan vivo como su amiga, lo único que había cambiado era que estaba en el otro lado.
A pesar de la crueldad con la que podía llegar a actuar Lilith la mayoría de las veces, esta había sido un poco más considerada con este chico por las ordenes de su hermano mayor, si bien lo había lanzado al inframundo, lo había dejado en un lugar en donde no vería las atrocidades que allí eran cometidas, ni se perdiera en la inmensidad del infierno. Debía mantenerlo vigilado, era parte del plan que Kandian tenia, y aunque no le había dicho que era exactamente, debía obedecer sus órdenes como rey.
Así que mientras se limpiaba las uñas sentada a una distancia prudente de Logan, lo observaba caminar de un lugar a otro un poco desorientado, algunas almas más pequeñas tenían la intención de acercarse a el, caminaban a su lado observándolo, sorprendidos por ver a un vivo en sus tierras, pero en el momento en que sentían la presencia de Lilith salían corriendo como perros asustados.
- ¿Hola?
Logan armado de valor, había comenzado a caminar a tientas sin saber que era seguido por Lilith, ella no tenia ninguna intención de hablarle, menos de ayudarle, solo debía procurar que no se perdiera ni fuera atacado por alguna alma desesperada.
Por más que ella tratase de sentir algún tipo de empatia por los seres humano, nada llegaba a ella, ningún sentimiento más que odio, solo los veía como seres débiles y a ella no le gustaba la gente débil, ella era superior a ellos y como un ser superior no debía mezclarse con seres inferiores.
Al ir inmersa en sus pensamientos no pudo ver que el chico al que seguía se había detenido haciendo que chocara con su espalda, dio un paso atrás sorprendida y aunque no quisiera admitirlo, un poco avergonzada por haber bajado la guardia en una situación como esta, pero no podía ser culpada, estaba en su hogar, no había nada allí que pudiera hacerle daño de alguna forma por lo que era el único lugar en el que podía bajar la guardia y perderse entre sus pensamientos. Pero estaba este chico, que al darse la vuelta para ver que había tropezado con el se veía asustado, confundido, Lilith pensó que se parecía a su hermano pequeño la primera vez que había salido con el a recorrer sus tierras.
Logan la reconoció en el momento en que se dio vuelta y vio ese cabello blanco como la nieve, no sabia exactamente como reaccionar, si bien la chica le había gustado desde que la vio en la fiesta, después de los últimos acontecimientos no podía saber si seria buena idea parecer caballeroso con ella, ella había tratado de matarlo y lo había engañado. Pero a pesar de todas las razones por las que no debería ser amable con ella, basto una razón por la que si debería ayudarla para que extendiera su mano en su dirección.
Lilith lo miro sorprendida por un momento, pero enseguida su mirada volvió a ser la de siempre, sonrió y tomo la mano de Logan, y aunque el chico creía que todo estaría bien se dio una sorpresa cuando comenzó a sentir su mano caliente lo que hizo que la soltara inmediatamente. Lilith lo había quemado y en su piel se podía ver una pequeña herida, soltó un par de palabrerias y se alejo de ella mientras la veía levantarse divertida.
- Si hubieras dicho que no necesitabas mi ayuda lo habría entendido.
- Nunca me toques, no tienes derecho a hacerlo, te odio recuerda eso y la próxima vez haré algo peor.
- ¿Donde estoy?
- En el inframundo.
Solo con escuchar esa palabra se le ponía la piel de gallina, a pesar de que hasta el momento no había visto nada horrible, sabía lo que aquí pasaba por las historias que había escuchado, y si estaba aquí significaba que estaba muerto, pero no tenía miedo por el, podía aceptar que había muerto, lo que más le preocupaba en estos momentos era su amiga, Anna que debía estar sola en ese castillo con todas esas criaturas.
- Estoy ...
- Por desgracia no, estas vivo, solo te mande aquí para vigilarte mientras Kandian hace su plan.
- ¿Qué plan?
- Asesinar a tu amiga.
La chica lo había dicho con tanta frialdad, aunque sus ojos se veía la excitación que esas palabras le causaban, mientras que el comenzaba a entrar en pánico, Anna no podía morir aquí y a manos de ese chico, no soportaba la idea de que sufriera todas las torturas que había visto durante el día, no soportaba la idea de que muriera sin antes haberle dicho todo lo que sentía por ella.
- Necesito salir de aquí - Dijo aterrado mientras miraba hacia todas las direcciones buscando una salida.
- Lastima, no te dejaré.
- Debe haber una salida, o una entrada al castillo aquí.
Lilith se quedo en silencio mientras lo miraba, se le había ocurrido un juego que la mantendría divertida mientras Kandian necesitara su ayuda.
- Si la hay, solo tienes que buscarla. No te lo impediré, pero tampoco te ayudaré.
En cuanto Logan había escuchado que si había una entrada al castillo comenzó a correr en la primera dirección que se le había ocurrido, tenia miedo, pero no por lo que podría ver o encontrarse en el inframundo, tenia miedo de llegar demasiado tarde a ayudar a Anna y Kathlyn.
Siguió corriendo en todas direcciones mientras veía gente llorar sentadas en el suelo, niño, mujeres, adultos, ancianos, unos más asustados que otros, pero nada le impidió seguir buscando la manera de encontrar a Anna, y aunque el no lo sabia, era seguido de cerca por Lilith y algunos demonios, tampoco sabia que estaba encerrado en una ilusión creada por Lilith y que solo quería torturarlo sicologicamente, ni que nunca encontraría la entrada.
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Masquerade
FantastiqueEn el aburrido pueblo de Mahintara, Annabella, una introvertida adolescente de 17 años y deseosa de una aventura, vive una aburrida vida junto a su familia. Cuando Sarcham, un enorme y abandonado castillo con una oscura historia, reabre sus puertas...