La elección perfecta. (ElRubius y tu)

Capítulo 12

23 de Diciembre por la tarde, yo me encontraba en mi habitación arreglándome, había quedado con Rubius para pasar una tarde de grabación, sí, le voy a echar valor y vamos a hacer gameplays. Hoy iría yo sola a su casa, él insistió en recogerme pero quería ir yo sola para ir memorizando la ciudad y tal. Aprovechando el ambiente navideño, me puse un jersey negro con un gato en medio que llevaba un gorrito de Navidad y una bufanda roja. Después me puse unos vaqueros, y unas converse negras. Después me retoqué el pelo y me pinté los labios en color burdeo oscuro, como siempre, y lista. Me despedí de mis abuelos, eran las 6 de la tarde y ya estaba en la calle, con Google Maps puesto. Caminaba, un poco confusa, siempre había una posibilidad de perderte, y Madrid es bastante grande. Recibí un mensaje.

Señor Doblas: Te vas a perder xD

___: Tu casa está cerquita, no me perderé -.-

Señor Doblas: Ya te estoy imaginando llamándome desesperadamente pidiéndome que te recoja x'D

___: ¿Te apuestas algo? ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Señor Doblas: Why not??

___: Si no me pierdo, harás lo que yo quiera.

Señor Doblas: Me parece bien, voy a ganar tomatita :D

___: No hagas que me enfade, Señor Doblas.

Señor Doblas: >:(

___: Ahora nos vemos ;*

Bloqueé la pantalla del móvil y seguí el camino, y después de unos 7 minutos andando, llegué a su casa, lo sabía... El portero me abrió, sabía quién era por la otra vez que vine, así que no hubo problema. Hoy me encontraba un poco juguetona, quería poner a prueba a Rubius, a ver que tal se me da, timidez no me arruines el momento porfa... Subí hasta la planta número 7 y golpeé su puerta.

Rubius abrió sorprendido y sonriente, sus ojos brillaban, vestía con una gorra hacia atrás, una camisa roja con un logo en color blanco y unos vaqueros negros junto con sus tenis. Gané...

-Vale, has ganado... ¿Qué quieres?

Entré en su casa, cerrando la puerta y sin dejar de mirarle a los ojos, notaba como empezaba a ponerse tímido, yo le miraba con mirada juguetona y sonriendo de medio lado. Una vez que cerré la puerta me acerqué a él, agarrándole de la camisa y atrayendo su cuerpo al mío. Él se mostraba serio y ruborizado, le había sacado los colores, eso era buena señal. Hasta ahora mi timidez no me estropeó la broma, con la mano que no estaba sujetando su camisa le agarré de la nuca y me acerqué a sus labios. Nos quedamos a corta distancia, estaba conteniendo la risa mientras que miraba sus labios fijamente, él simplemente permanecía callado y colorado, obedeciendo lo que yo hacía o decía. 

-Quiero un beso. -Intenté poner tono sensual.

Noté cómo Rubius ponía sus dos manos en mi cintura y me atrajo aún más a él, paré de fijarme en sus labios para fijarme en sus ojos, oh oh... Sentía cómo mis mejillas iban calentándose más cada segundo que pasaba, sus ojos verdosos eran ahora lo que recorrían lentamente la comisura de mis labios. Rubius no decía palabra, yo ya sentía que iba a explotar, me volvió a mirar fijamente y me sonrió mientras que yo permanecía callada y colorada, ¿En qué momento nos hemos intercambiado los papeles tan rápido?

-A sus ordenes...

Rubius cerró los ojos y sacó su lengua, la cual movía rápidamente de arriba abajo, puso una cara extraña y empezó a fingir gemidos divertidos. Yo empecé a reír, e intenté escapar de él, pero me tenía cogida por la cintura fuertemente y no me dejaba ir.