16. Reflexiones en compañía.

39 4 0
                                    

Me duché y salí con el mismo vestido con el que había entrado esta tarde.

Las chicas me estaban esperando fuera, en el mismo banco en el que había estado con John días antes. Shannon fumaba y Dakota escribía algo en su móvil, hasta que me vieron llegar y Shannon después de dar la última calada al cigarrillo lo tiró al suelo y Dakota guardó el móvil en el bolsillo trasero de sus pantalones cortos.

-¿Ya esta lista la reina? -Dijo Shannon.

-Por supuesto. -Dije haciendo una reverencia. -¿Desde cuándo fumas? -La pregunté.

-No lo hago, bueno, relativamente. Sólo cuando estoy esperando a alguien y no sé qué otra cosa hacer. -Se encogió de hombros como queriendo disculparse porque realmente era estúpido lo que me acababa de decir.

-Eso es ridículo y lo sabes.

-Lo sé.

Y las dos nos echamos a reír. Por su parte Dakota no decía nada, sólo se limitaba a mirarnos y sonreír por la ridícula conversación que estábamos teniendo Shannon y yo.

-Bueno, -Rompió el hielo Dakota. -ya nos puedes ir contando que está pasando aquí. Eres toda una caja de sorpresas.

En todo este tiempo no me había dado cuenta que estábamos caminando en dirección contraria al parking de la Escuela y que estábamos llegando a lo que podría ser nuestro destino.

-Es cierto, os tengo que contar muchas cosas, pero no me juzguéis. -Las dije.

-No puedes tener peor historial que el nuestro. -Dijo Shannon sonriendo con complicidad a Dakota.

Me pregunté desde hace cuanto se conocían.

-¿Desde cuándo os conocéis? -Solté sin venir a cuento. -Digo por como os miráis y demás, parecéis amigas desde hace mucho tiempo.

Eso contando que Dakota se vino aquí a vivir hace dos años, pero podría ser que se conociesen de antes.

-Y lo somos, más o menos. -Contestó Dakota. -Nos conocimos hace dos años, cuando yo me vine aquí a vivir y entré en la Escuela de danza, enseguida nos hicimos amigas y desde entonces hemos sido inseparables.

Asentí con la cabeza y Shannon señaló el sitio en el que cenaríamos algo.

-¡Aquí es! -Dijo entusiasmada.

Entramos en el famoso y conocido Peggy Sue's, un bar decorado al estilo de los años setenta. Los suelos eran de cuadros azules y blancos y las paredes estaban pintadas a dos tonos de rosa pastel. Me encantaba este sitio, sobre todo por lo bien que olía siempre al entrar. Nos sentamos en una mesa de color rosa chicle con las sillas a juego y con dos rayas atravesándolas de lado a lado. Eran bastante cómodas.
Antes de contarle mi situación sentimental, pedimos la comida, Dakota una hamburguesa con patatas, Dakota lo mismo y yo unos crepes salados con una ensalada cesar. Estaba cansada de comer hamburguesas cada vez que salía.
Cuando por fin teníamos la comida y la bebida en la mesa, dije:
-Veréis, esto va a ser largo...

Empecé desde el principio, por cómo había conocido de forma ridícula a mi querido vecino Owen, en cómo me había acabado presentado a Ian, el prototipo de chico perfecto con el que podría haber salido y había rechazado por culpa de John, al cual conocí días antes en la misma academia y me había dejado con ganas de saber más de él. En como Owen me había besado para demostrar una estúpida teoría y desde entonces se había convertido en la persona más importante y en la que más podía confiar pero se había estropeado todo al confesarnos unos sentimientos imposibles entre nosotros. Y como de forma sorprendente John aparecía de la nada y me atraía de una forma ridícula y surrealista haciendo que me diese igual todo lo demás cuando estaba con él.

Cuando al fin terminé de hablar ya nos habíamos terminado casi toda la comida.

Como era de esperar Shannon y Dakota me bombardearon a base de preguntas estúpidas para conocer cada mínimo detalle.

Al final, en un momento de lucidez Shannon abrió mucho los ojos y dijo:

-¡Ya entiendo todo! Escúchame con atención, porque puede que esto resuelva tu caótica cabeza. -Me dijo sonriendo con complicidad. -Imagínate que cada una de estas patatas -Cogió tres patatas fritas y una la untó con kétchup, otra con mayonesa y otra la dejó sin untar. -es cada uno de ellos. Owen te apasiona, porque es imposible, te hace comerte la cabeza y a la vez es el que más da por ti, porque te conoce, pero a elegido a su novia antes que a ti asique adiós. -Y se comió la patata que representaba a Owen, que era la que tenía el kétchup. Dakota y yo nos miramos confundidas, ¿a dónde quería llegar con todo esto? Ahora cogió la patata untada de mayonesa. -Y tú querido Ian, el más dulce de todos, el que quizás pararía un tren por ti apenas sin conocerte y sin duda no se va a rendir, pero le falta algo, que es todo lo que tiene Owen y tanto te gusta. Tampoco nos sirve. -Y se comió a Ian. Cogió seguidamente la patata sin nada. -Y por último y no menos importante John, tiene ese lado salvaje que le caracteriza, tiene carácter y eso te gusta pero además y en el fondo tiene esa capa de chico bueno, que se preocupa por ti y que se pone nervioso cuando tú estás cerca, en conclusión, el chico perfecto. Tiene una parte de Owen y tiene otra parte de Ian. -Mientras decía esto último untaba la patata con kétchup y mayonesa y me lo dio a mí. -Es tuyo, si le das una oportunidad y te das una oportunidad a ti misma.

Dakota y yo no sabíamos que decir, sin embargo ella miraba con asombro a Shannon, como si fuera la viva imagen de la inteligencia, yo, sin embargo, la miraba sin más.

Tenía razón, muchísima razón, pero mi vida ya era lo suficientemente complicada como para complicarla aún más.

Aún así dije:

-Elijo a John.

Mis dos amigas se miraron y empezaron a aplaudir contentas por la decisión que acaba de tomar sin apenas pensármelo dos veces.

No sabía que iba a salir de todo esto, pero me arriesgaría.

-------------------------------

¡He vuelto! (O al menos por ahora). No quiero prometer nada pero me vuelvo a sentir inspirada y con ganas de continuar con esta historia asique espero que os guste, como siempre y muuuuchas gracias por esta larga espera. 

Nos leemos pronto.

Psd: La de la foto es la increíble Shannon que ha tenido gran protagonismo en este capítulo. 

Llévame hacia ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora