18. La nueva delincuente.

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27 de agosto. Miércoles.

Antes de que el despertador sonase por toda mi habitación, el tono de una llamada entrando por mi móvil me sacó de mi más profundo sueño y contesté sin ni si quiera mirar de quién se trataba.

-¿Siiii?

-Hola cariño, me han llamado de comisaria, ya tienen a la persona que soltó el rumor de tu padre, estoy trabajando asique me es imposible ir, la policía solo necesita que nos pasemos para ver si reconocemos a esa persona. Del resto ya me ocuparé yo más tarde, ¿puedes ir?

-Mmm, claro mamá. ¿Qué hora es? -Tenía tanto sueño que dudaba si lo que estaba teniendo era una conversación real.

-Las diez y media, ya va siendo hora de que te levantes.

-Siiii. Adiós mamá.

Y colgué.

Bajé las escaleras como pude, saludé a mi tía que me informó de que ya había hablado con mi hermana y que se había mostrado demasiado tranquila con el tema, y que quizás no se acababa de creer todo, o no quería creérselo. A lo que llegué a la conclusión de que hablaría con ella cuando volviese de comisaría.

Demasiada información a primera hora de la mañana.

Desayuné, me arreglé y cogí el coche de mi tía.

Aunque al principio estaba poco convencida de ir sola a comisaria a reconocer a la persona que había dicho tal cosa de mi padre, al final decidí que era lo mejor, para mi enfrentarse a algo así era una prueba de superación. Todo lo que tenía que ver con mi padre suponía un reto para mí. No sabía con qué me iba a encontrar, pero si mi madre había confiado en mí para esto, era por algo.

Mientras conduje deje volar mi imaginación hacia todos los hombres que formaban parte de mi vida y por una vez me sentía bien con lo que estaba haciendo, había montado un drama cuando desde un principio sabía lo que quería, o al menos, lo que pensaba que quería.

Llegué a comisaria antes de que a mi cabeza le diese tiempo a asimilar todo lo que venía ahora pero hoy me sentía la ama del mundo asique aparqué, bajé del coche y entré al lugar donde se encontraría la persona más odiada en estos momentos por mi familia.

El inspector Williams estaba en la mesa de algún compañero, buscando algo en el ordenador, hasta que me vio, se levantó rápidamente y vino a mi encuentro.

-Buenos días inspector Williams. -Le saludé.

-Buenos días señorita Swan. -Me tendió la mano que estreché. -Si me acompaña, por favor, necesito que reconozcas a esta persona.

Fuimos a una sala dividida en dos por un cristal que a mí me permitía ver en su interior, pero a la persona del otro lado no le permitía vernos a nosotros. En ese momento pensé que estaba viviendo una película.

-Bien, en unos minutos entrará la persona responsable del rumor de tu padre, puedes acceder a hablar con ella si quieres, pero si no quieres también puedes reconocerla desde aquí. -Me informo el inspector.

-Está bien, que pase. -Dije.

Al minuto entró una chica joven, rubia, con unos ojos afilados verdes. En ese momento caí en todo, esa chica era la misma del coche del otro día que me hizo una foto estando con Owen, pero ¿qué hacía ahí? ¿Por qué una chica de mi edad habría querido soltar un rumor así?

Lo decidí al instante.

-Quiero hablar con ella. Creo que la he visto antes. -Dije al inspector para que me llevase a esa sala de interrogatorios donde estaba la culpable de todo.

-Puedes preguntarle lo que quieras, pero si en algún momento vemos que haces algo por lo que pueda denunciarte o ella hace algo sospechoso, te sacamos de allí, ¿entendido? -Me iba diciendo el inspector mientras me llevaba a la puerta de la sala.

-Está bien, no tocar, no insultar y todo eso, ¿no? -Respondí.

-Veo que has pillado todo, y por favor, cualquier cosa me haces una señal y te saco de ahí.

-Entendido.

Abrí la puerta y entré.

La chica nada más verme sonrío y no tardo ni un segundo en hablar.

-Al fin nos conocemos, Summer Swan.

Hablaba sonriendo, lo que daba mal rollo, parecía mayor que yo con esa actitud desvergonzada que desprendía, pero en el fondo era sólo una chica joven como yo.

-Puesto que sabes mi nombre, creo que tengo el mismo derecho a saber el tuyo.

-Me llamo Lucy Larson, pero no hace falta que perdamos el tiempo con presentaciones, vayamos al grano. Yo se cosas que tú no sabes y supongo que te gustaría saber, ¿cierto?

-Mi padre no se suicidó si es eso lo que me quieres decir.

Su risa lleno cada espacio de la minúscula sala, definitivamente estaba loca.

-Que graciosa eres, y que poco inteligente. -Se puso seria y no sabía que dos caras suyas daban más miedo, la de chiflada o la de pocos amigos. -Eso era una tontería que me ha servido para llamar tu atención. En cualquier momento puedo desmentir esa noticia pero necesitaba algo que me hiciese llegar hasta ti. Pensé que al hacerte la foto y seguirte intentarías buscarme, pero ya veo que no te va eso de hacer de detective asique he tenido que usar mis métodos.

-Muy bien, ¿qué es lo que quieres?

Me estaba cansando de su jueguecito de sabelotodo.

-Tú quieres información y yo quiero dártela. Pero no es el momento. -Rodó los ojos por toda la sala para darme a entender que estuviese la policía escuchando no era buena idea.

Me hizo dudar, ¿sería posible que la policía estuviese implicada? Tenía que dudar de todo.

-Vale, desmiente la noticia y no tendrás cargos por nuestra parte, lo que has hecho es una niñería sin gracia, pero yo seré la madura de las dos y te daré otra oportunidad para desaparecer de nuestras vidas.

Esperaba que entendiese el mensaje que acababa de darle, hablaríamos fuera.

A lo que esperé, sonrió. Lo había entendido.

Rodeo la mesa hasta donde yo estaba y abrió la puerta de la sala de interrogatorios.

-Ha sido un placer, no te olvides de coger lo que se te ha caído cuando has entrado. -Miró rápidamente hacia el suelo, donde se encontraba un pequeño papel en él.

Me agaché lo más natural que pude, lo cogí y lo guardé rápidamente en el bolsillo trasero de mis pantalones cortos.

-Espero no volver a verte. -La dije y cerré la puerta tras de mí.

Volvería a verla muy pronto.

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Lo sé, hace mil años que no aparezco por aquí pero me gustaría creer que he vuelto para continuar con ésta historia, asique a los que sigáis ahí leyéndome después de todo este tiempo, gracias.

En éste capítulo aparece un personaje nuevo y os aseguro que va a ser fundamental para la historia. Por ello, os he dejado una foto de una actriz que en cuánto la vi me recordó al personaje que yo tenía en mente como Lucy.

Espero que os guste y nos seguimos leyendo.

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⏰ Última actualización: Mar 17, 2018 ⏰

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