Capítulo 7: Deportes.

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DEPORTES.




—¡¿Estas de broma, Scott?!
—No, no... Esque tienes que ayudarme. Dijo que el trato sólo durará 2 semanas y acabaría después de ese tiempo si quieres o si no el seguiría haciéndolo. Si dices que si me dará el auto la próxima semana  —suspiro—. Mi tía me mandó un cheque con dinero porque mi primo arruinó la Xbox que le preste, eso más mis ahorros y algo de dinero que me dieron mis padres ya tengo el primer pago. ¡Di que si!
¡Como era posible que el tonto de mi amigo hubiera pensado que habría aunque sea una pequeña posibilidad!
— ¡No Scott, no lo haré! ¡Por favor! ¿Qué se siente ese chico? Es tan presumido, ya me lo imagino —hice una pausa e imite con voz chillona lo que supuestamente había dicho Marlon—.  "Dos semanas y si quieres puedo seguir haciendolo".
—Vamos nena, ayúdame. ¡Quiero ese auto!—suplicó Scott.
—No.
—Sólo imagínate; eres como mi hermana pequeña, después de esas dos semanas, podrás ir y venir conmigo. Aguanta sólo dos semanas.
—Sí, eres como mi hermano, eres igual de tonto que los hermanos mayores—dije tratando de reprimir una sonrisa.
—¿Entonces es un si?
Aún no sabía, seguía pensando en lo que le dije a Marlon afuera de la escuela.
—No sé, lo pensaré.
—Bien eso es un avance.
—Si... Bueno y para tomar una desicion más rápido necesito motivación... Como mi hermano mayor tendrás que comprarme el desayuno en Trollis esta semana.
—Valla que chantajeas igual que las hermanitas pequeñas.
—Si, esto es tonto ya que tenemos la misma edad—me reí.
El ambiente se había relajado.
—Cierto pero soy más alto, bueno nos vemos mañana.
—No quiero que pasen por mi.
—Eso no, mañana iremos.
—Me iré más temprano si es necesario.
—Le diré a Marlon que llegue más temprano.
Pero bueno, ¿Ya estamos otra vez?
—Eres un pesado. Adiós.
—Si, como digas mañana te veo.
Colgué. Malhumorada.


*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*



Abrí la puerta y estaban ambos esperándome dentro del Mustang.

No los miré. Sólo me subí en la parte trasera del vehículo.
—Buenos días—dije apresuradamente para impedir que se escuchara el castañeo de mis dientes.
Hacia tanto frío como pocos días, me sorprendía que no estuviera nevando.
—Hola—dijo Scott frotándose las manos.
—Buen día, ¿Mucho frío no? Bonito suéter—repuso Marlon con burla en su rostro.
Vale, el suéter de felpa no era lo más bonito que tenía, pero para días tan fríos siempre servía.
No contesté.


Las clases fueron normales.
Cada vez hacia más frío.

El clase de deportes, la profesora dijo que por el clima no haríamos nada y dejó que nos sentaramos en las gradas.
Scott no estaba en esa clase conmigo.
Así que estaba con Frizey, una companera. Hablábamos de series de televisión, cuando la profesora hizo sonar su silbato.
—Él es su nuevo compañero, Marlon. Estará en esta clase con ustedes. Su horario esta listo. Tal vez algunos de ustedes ya lo conozcan. Dice que es bueno en deportes, señoritas no se alboroten.
Sonrió a la clase, luego me miro y se encaminó hacia donde yo estaba.

Rápidamente me gire hacia Frizey para seguir conversando e ignorar a Marlon. Pero ella, como todas las chicas de mi clase lo estaban observando. Era muy atractivo, como pocos de esta escuela.
Era una lástima que ese día no fuéramos a tener un juego de fútbol o baloncesto, yo era buena, le daría una sorpresa al presumido de Marlon.
Lo que no me gustaba de algunos libros, era que describían a las chicas como frágiles y tontas. Yo no era así.
—Hola—dijo sentándose a mi lado.
—Marlon, ¿Qué tal?—dije siendo amable.
—Bien.
—Me alegro...
—Hola, yo soy Frizey—me interrumpió mi compañera. En ese momento varias chicas se acercaron a donde estábamos.
—Hola cielo —me miró—,  mucho gusto—se giró y le contesto a Frizey.
Marlon me miro con cara divertida.
¿Qué? ¿Le había dicho cielo a ella?
Me levanté y me abrí paso entre las chicas que se amontonaban alrededor.







Cometarios, votos. Vamos ayudenme.
All the love. x
Ella.


"Between the fire and the wind."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora