CONFUSA.
Un ruido... que molesto.
Alargue la mano a la mesita de noche y apague la alarma del celular.
Me levanté y me encaminé al baño.
Me vestí y maquillé un poco.
Baje a la cocina y estaba comiendo cereal, cuando escuche un auto estacionandose afuera.
¿Qué?
El timbre sonó y me dirigí a la puerta para que al abrirla me encontrará a Marlon en su auto y Scott en el porche esperándome.
—¿Qué hace él aquí?
—Que genio, buenos días —me dijo Scott.
—A mi también me da gusto verte cielo —Marlon sacó un poco la cabeza de la ventana.
—Si, lo que digas —le dije a Marlon sin mirarlo—. ¿Qué hace el aquí?
—Pues se ofreció a llevarnos a la escuela en lo que tengo mi propio auto —sonrió Scott.
—Vamos a ver, ¿tu vas a ser nuestro chofer? Gracias yo pasó.
—Nada de paso —me cortó Scott—, si tengo que cargarte y meterte en el auto lo voy a hacer.
—Vamos, aún está oscuro es peligroso que vallas caminando. Además hace frío —dijo Marlon.
—Bien.
—¿Bien? —dijeron ambos.
—Si, bien. Hace frío y no me apetece ir caminando.
Vale, era verdad hacia frío y estaría bien ir en ese auto maravilla. Aunque Marlon me sacara de mis casillas.
Llegamos a la escuela y todos los que estaban afuera nos miraron.
Unas chicas fueron con Marlon, parecían moscas. Pero ¿porqué molestarme?
Me di la vuelta y me encaminé sola a la cancha de baloncesto ya que Scott se había quedado con Marlon. Yo tenía clase de deportes a esa hora. Cuando alguien me tomó del brazo.
—¿No deberías de decir gracias?
Me giré, Marlon sujetaba mi brazo.
Mire donde su mano me tenía agarrada y luego a sus ojos.
—¿Disculpa?
—Disculpa aceptada.
—¿Quieres soltarme y explicarte?
Pensó por unos segundos y dijo:
—No. Y lo de las darme gracias es por traerte a la escuela, no dijiste nada. Sólo bajaste del auto y te marchaste. Eso no lo hace una persona educada.
—Mira Marlon; si traerme a la escuela te causa tanto problema con tus normas de educación. Tengo dos pies para ir y venir andando.
Intente soltarme de su agarre pero no pude.
Me quedé ahí mirando, sus ojos tan hermosos...
—Tus ojos, son tan lindos...
—Gracias, tomaré eso como un cumplido -dijo riendo.
¿Qué? ¿Que mierda acababa de decir? Bueno, sus ojos realmente son lindos. Pero en una situación así jamás se lo hubiera dicho.
—¿Qué? Uh, no esque yo...
—No te preocupes, traerte no es ningún problema. Sólo tienes que ser más educada. Y gracias de nuevo por lo de mis ojos.
Me soltó, y se encaminó hacia su auto, donde Scott hablaba con dos chicas. Dejándome ahí de pie confundida.
¿Qué demonios había sido aquello?
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La foto es para que se den una idea de como es la escuela.
Big love.
Ella. x
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"Between the fire and the wind."
Romansa''Y apareció de la nada, inesperado como el final de un buen libro. Me tomó y me hizo suya sin siquiera tocarme. Arrasó con todo y conmigo a su paso.'' ... Un chico y un peligroso secreto. Una chica que no tenía planeado conocerlo. Una verdad que am...
