04.

5.6K 250 13
                                    


Fiesta


*NARRADOR*

—Damon...—la chica repitió por última vez, y sonrió irónicamente, mientras Damon se acercaba más a ella. Su respiración se hacía cada vez más pesada y agitada. El mundo a su alrededor se había detenido, y aquello le recordaba a Abbigaíl que intentaba poner resistencia para alejarse de él. Increíblemente ese chico la ponía nerviosa. En momentos como estos es cuando le dan ganas de salir huyendo lejos, y terminó recordando el por qué no le gustaba ir a fiestas, y más que sus amigas la dejaran sola. —Creo que iré a tomar un poco de aire, el ambiente aquí está... tóxico —manifestó mientras se separaba de él y caminaba en dirección a la salida.


Dios, era tan extraño todo esto para ella. En pocos días había conocido a tanta gente, y ya creóa que le atraía el Salvatore mayor. "¡No, no. Quita esas ideas de tu cabeza Abby, por favor!", se repitió mentalmente en su cabeza.


—¿Qué es lo que estoy haciendo? —susurró débilmente, mirando por aquella terraza que daba una bella vista.


Abbigaíl bajó la mirada, mientras apoyaba ambas manos cruzadas sobre el barandal y dejó caer todo su peso depositado en ella.


—Pensé que te agradaba estar conmigo... —Damon se acercó a ella.  —Digo... por lo nerviosa que te pones, deduzco que te gusto y que estás enamorada de mí —inquirió con confianza en sus palabras. 


Pero de igual manera lo decía con un tono burlón y algo egocéntrico, mientras caminaba para posicionarse al lado de la chica de encaje negro.


Abby rodó los ojos esperando que eso no fuera cierto.


—¿Estás loco, Damon? No sé con qué clase de mujer estás acostumbrado a tratar, pero yo no soy así —reclamó un tanto ofendida con sus palabras, pero en vez de detenerse, continuó. —Primero que nada, ¡NO me conoces, ni yo a ti!; segundo, creo que eres el ser más arrogante, egocéntrico y narcisista que posiblemente no ame a nadie más que a sí mismo —le gritaba ya molesta. Se despegó del barandal para dar fin a la conversación. —y tercero;...  —no logró terminar las frases que tenía preparadas para él.


De un momento a otro Damon se abalanzó sobre la chica, ejerciendo presión sobre sus labios, cayendo en un cálido e inesperado beso. Sus grandes manos tocaban su cintura con delicadeza. La morena sin resistir, impulsivamente cerró los ojos para recibir aquel beso que en el fondo anhelaba, pero rápidamente retomó la compostura inicial. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
The Secret; Magic [1] | Damon Salvatore [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora