Pide un deseo

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                                    -Hola Ashlee_ su pose era la de siempre, elegante, pero esta vez prevalecía la superioridad

-¿Que tienes que ver tu con todo esto?

-Mucho, no me puedo tomar todo el crédito aunque quisiera, Derek ha sido de mucha ayuda

-¿Y te atreves a decirlo de ese modo? ¡Yo confiaba en ti!_ no sabía que me molestaba más, si el hecho de que ella estuviera a cargo de toda esta situación o su sonrisa de victoria, victoria que no sabía hacia qué, pero hacia quien si era obvio, era hacia mi

-¿Confiabas en mí?_ su sonrisa se hizo más abierta_ ¡Maldita perra! Nos hiciste daño a todos y todavía te quieres hacer pasar por víctima, pasaste por encima de todos los que quisiste para lograr lo que querías_ su expresión cambió a una de furia repentinamente_ la verdad te subestimé, nunca pensé que serias capaz de llegar a hacer cosas como las que hiciste, pensé que tu amistad era sincera y ¡claro! Como no eras capaz de hacer las cosas por ti misma, no sé de dónde demonios sacaste un genio, nunca pensé que esas fantasías absurdas fueran ciertas y transformaste tu vida radicalmente. Y ya que hablamos de confianza, Brittany confiaba en ti más que en nadie, la traicionaste de la peor manera que se podía...

-Yo nunca...

-NUNCA PLANEASTE QUITARLE A IAN... claro... y por eso la mandaste a violar con el imbécil más grande que había en la universidad para que Ian los viera y pensara lo contrario para así tu poder meterte a la fuerza y hacerte notar_ me sentí espantada al escuchar todo esto_ y como si no fuera poco, robaste el periódico más importante de Los Ángeles, casualmente el periódico del padre de Brittany_ eso era algo más obvio para ella, Derek fue quien me ayudó con ese desfalco

-¿Cómo sabes todo eso?

-¿Quiere decir que no lo niegas?_ dijo Derek quien había estado ausente de la conversación

-No, tú me ayudaste ¿lo olvidas?_ clavé mis ojos en él y ojalá que las miradas pudieran hacer daño_ pero supongo que no me tienen aquí para hacer justicia, si no ya me hubieran denunciado a la policía, ¿o me equivoco?

-Haremos justicia a nuestro modo y queremos al genio

-¡De Hazim no obtendrán absolutamente nada!

-Sí, ya sabemos que aún es tuyo, que aun tienes un deseo pendiente, que al pedirlo el vuelve a su lámpara dispuesto para que otro amo lo tome

-No voy a pedir ese deseo, Pamela

-Créeme que lo harás, tu libertad dependerá de ello_ forcé las cadenas para tratar de liberarme inútilmente_ esto va a ser más interesante de lo que creíamos Derek, el genio está enamorado de ella y ella al parecer no le es muy indiferente_ me tensé aún más_ ¿qué pensaría Ian de todo lo que has hecho?

-¡NO METAS A IAN EN ESTO, PAMELA!_ halé tan fuerte de las cadenas para tratar de levantarme que voltee la silla cayendo al suelo en muy mala posición

-Yo meto a quien yo quiera Ashlee, no dependes de nadie aquí dentro, sólo de que pidas ese último deseo y liberes de tu dominio a Hazim, este será tu infierno

-Sigo sin entender ¿esto es por pura ambición? Yo jamás te hice daño a ti

-Siempre viví sometida por ti, humillada, comiendo las sobras que tú dejabas, siempre pisaste a los demás para escalar y no te dabas cuenta o posiblemente si lo hacías, eso te hace peor. ¿Crees que no sé qué me hiciste tu asistente para humillarme?

-Tu peor error fue cambiar de la noche a la mañana, desde que me empezaste a rechazar supe que algo no andaba bien

-Siempre fueron como los caracoles, babosos y rastreros, no valen nada_ Derek me dio una patada en el estómago, tosí estruendosamente. Me tomó por el brazo y parte de la silla para levantarme bruscamente, entraron los 2 sujetos que me habían llevado a esa habitación

-La diversión comienza ahora para ti, espero que tu estadía sea placentera_ dijo Pamela saliendo de la habitación junto a Derek, los hombres se acercaron a mí, me subieron a la camilla que estaba en un costado, yo mientras luché lo que pude contra ellos, era inútil eran superiores en fuerza y tamaño

-Estate quieta muñequita

-¡Muñeca tu abuela!_ traté de subir las piernas para darle en su punto débil, pero me frenó

-Oh, cuidado nena, afectaras la diversión si golpeas allí_ fue entonces cuando entendí que pretendían, me amarraron de las manos en la parte superior de la camilla y los pies en el fondo, logré zafar una de mis manos y golpee al más joven con mucha fuerza. Este me regreso el golpe

-No tendremos compasión contigo muñeca_ dijo el "grandote". Subió mi vestido de novia hasta las rodillas y lo cortaron con unas tijeras entre ambos, grité en el proceso hasta que quedé solo en ropa interior.

Entre los dos abusaron sexualmente de mí, describir el suceso es duro para mí, trato de hacerlo y no puedo, los recuerdos se me mezclan, sólo puedo decir que lloré mucho, grité y traté de zafarme pero nadie venía a por mí, era evidente que estábamos lejos, era evidente que no jugaban cuando decían que esto sería un infierno.