Pide un deseo

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            -¡Estúpida mocosa!_ abrió la reja de nuevo el sujeto, me agitó varias veces, me dio unos leves toques en el rostro tratando de reanimarme_ la puta si va a morir de hambre. ¡Oh Derek! Me vas a tener que pagar mucho más... ¡mucho más!_ en la última frase me levantó, no podía abrir los ojos ya que me llevaba en su regazo, no se oían voces, todo sonaba tranquilo, solo se escuchaba el aspa del ventilador oxidado

-¿Que le sucedió?_ era la voz del doctor Kent

-No lo sé, supongo que está débil por no comer_ abrí el ojo derecho y vi que el doctor estaba lejos de Hazim, decidí agitarme hasta caer al suelo, de inmediato saqué el puñal de la funda donde la tenía en su pierna el sujeto que me cargaba y la clavé sin pestañar en su pantorrilla, aulló de dolor mientras caía arrodillado al suelo, trató de tomarme torpemente y con fuerza, cuando lo hizo le clavé el puñal en la carótida de la nuca, mucha sangré salió disparada

-¡No se mueva Dr. Kent!_ tomé el arma de la otra pierna del cuerpo que había dejado en el suelo sin quitarle la vista al doctor, lo apunté, temblaba de pies a manos

-Ashlee, tienes que tomarlo con calma, no sabes usar un arma..._ cargué el arma y disparé a una esquina, el Dr. Kent brincó de la impresión_ ok, veo que si sabes usarla

-Es mucho lo que te enseña la televisión estos días, doctor

-No eres una muchacha tonta Ashlee, sabes que no estamos solos, pronto vendrá alguien y toda esta locura se vendrá abajo

-Sé que vendrá alguien doctor Kent, como lo dijo, no soy estúpida_ se escucharon pasos apresurados por el pasillo, el chico apareció en la puerta portando su arma, voltee a apuntarlo, tenía cara de pánico, respiraba agitadamente, vio el cadáver en el suelo_ ¡Tú! A la esquina con el doctor_ él me apuntaba también pero obedeció mi orden_ Suelta tu arma

-No lo haré_ le disparé en el hombro

-¡Tira la maldita arma!_ obedeció, fue cuando me di cuenta que el niño no era del todo malo_ Bien doctor Kent, primero lo primero, ate a chico a la silla_ obedeció_ lo siento chico_ le di con la base de la pistola por la nuca y cayó desmayado_ bien, supongo que tiene un poco de adrenalina para inyectar_ sonreí un poco, el doctor me miró con algo de temor_ ¡oh vamos! Es doctor, tiene un laboratorio aquí, debe tener algunas dosis de adrenalina

-¿Que pretende hacer señorita Lawrence?

-Inyéctele adrenalina a Hazim_ de algo me tienen que haber servido las clases de biología y química, esperaba con todo el corazón que funcionara_ ¡NO ES UNA SOLICITUD DOCTOR KENT!_ abrió un estante que estaba en un costado y sacó una cajita con pequeños frascos, tomó uno_ quiero leerlo primero_ me acerqué con cautela, me mostró el pequeño frasco color café, decía ATROPINA, afirmé con la cabeza, tomó una inyectora y se la colocó a Hazim, sus latidos aumentaron la velocidad y en pocos segundos abrió los ojos, lo ayudé con la mano que me quedaba libre a quitarse las vías, los medidores cardiacos, etc

-¿Ashlee? ¿Pero que haces?

-Sacándonos de aquí_ le di la mano para ayudarlo a levantarse_ Doctor Kent, tome otra dosis que vamos a despertar a mi prometido_ obedeció y caminamos con cuidado hacia la celda de Ian, estaba a la expectativa que vinieran más, Hazim había tomado el arma del chico. Abrimos la celda, Ian estaba profundo, parecía que solo dormía, estaba golpeado

-No creo que sea necesario ponerle adrenalina señorita Lawrence, al parecer lo durmieron con un golpe y éter. Salió hasta mi celda y buscó el vaso con agua_ Con esto bastará_ le aventó el agua en la cara, Ian se despertó de mala gana, se exaltó al darse cuenta de donde estaba

-¡¿Ashlee?!_ se levantó en seguida con algo de dolor, lo abracé de inmediato, esto al parecer lo tomó por sorpresa pero no demoró en corresponderme_ estás bien_ dijo con alivio

-Es hora de salir de aquí_ dijo Hazim_ afirmé con la cabeza_ Ian sal, usted se quedará aquí dentro_ se dirigió al doctor

-Pero...

-Al menos conservará la vida Dr. Kent_ dije cerrando la reja. Corrimos a las escaleras que conducían a la salida del bunker, estaba abierta, Hazim fue el primero en salir

-¿Ahora qué?_ preguntó Ian ya estando afuera mientras mirábamos desesperados en todas las direcciones, era de noche, estábamos en medio de la nada, solo había pasto seco, a unos metros se veía una cabaña con la bandera de Estados Unidos ondeando en su porche

-¡CORRAN!_ dijo Hazim, no lo dudamos ni un segundo. Corrimos durante mucho rato sin un rumbo fijo, sólo buscábamos una carretera, una salida de ese lugar, hasta que mi debilidad me impidió continuar

-¿Ashlee, estas bien?_ me preguntó Ian

-No, no lo estoy, no puedo seguir_ comenzó a llover repentinamente

-Hay que buscar refugio

-Aun no estamos lo suficientemente lejos_ dijo Hazim

-Tiene que descansar ¡no puede seguir! Hay que darle algo de comer, está muy débil_ apenas alcancé a escuchar que dijo Ian, me desvanecí