-¡Rayos, lo olvidaba!-rapidamente cogí aquellos pergaminos, los guarde y me dirigí a la habitación de Vegeta.
Respiro profundo para luego abrir la puerta.
-¿Vegeta?-pregunté con un aire temeroso.
Inmediatamente me tapan la boca.
POV Vegeta
El cielo se tornó rojizo, y el tiempo pasó volando, mientras lo observaba oscurecerse.
Era de noche.
Mi rostro francamente era decepcionante.
Vulnerabilidad.
Eso era lo único que reflejaba.
¡Maldición!
Como hubiera querido poder callar.
Controlarme.
Todavía pensamientos enloquecidos rondaban por mi cerebro.
Robar una vez más aquella nave.
Escapar.
Ser libre.
Pero, ¿De qué me servía?
Dañar, aún más, mi orgullo.
Tal vez... Si tan sólo me hubiera quedado aún cordura, no lo hubiera hecho, no me hubiera admitido que... Realmente gusto de ella.
Sí. Lo había hecho.
Mas, no me importaba.
Había gustado de mujeres de otras razas antes, pero jamás alguien como ella.
La puerta se abre cuidadosamente.
Ante esto me oculto tras la misma.
-¿Vegeta?-escucho débilmente, podía jurar que quien lo halla dicho creyó estar frente a su peor pesadilla.
Era ella.
Tomé la puerta bruscamente, cerrándola, para luego tapar su boca.
Tembló.
Me tenía miedo.
-No te haré daño...-susurré en su oído con decepción.
-Lo sé-dijo deslizándose hacia abajo mientras se liberaba-. Sé que jamás lo harías.
Mi mirada se llenó de sorpresa ante su acción.
Busqué una excusa, ya no tenía el control.
-¡¿Cómo lo sabes?! No tienes la menor idea, de lo que soy capaz de hacer.
-Lo... Dijiste, Vegeta.
-Yo no dije «jamás», mujer distraída-dije de forma arrogante.
Quedó paralizada por unos momentos.
-¡No me grites!-dijo finalmente al verse entre la espada y la pared.
Reí burlón.
-Yo realmente... Sé que puedo confiar en ti-dijo mirándome a los ojos.
-No deberías-dije soltando una carcajada-, eres una ingenua... ¡Tonta!
-¡¿Sabes?!-preguntó furiosa-¡Eres un maldito mono estúpido!, ¡Maldigo el día que te conocí!-respira profundo-Sinceramente, Vegeta, no sé que pase por tu cabeza que no te das cuenta que, ¡Intento ser amable contigo!, ¡Todo el tiempo!
-¡Ya cálmate, mujer!-dije acercándome.
-¡Aléjate, simio mal educado!
-¡YO NO SOY NINGÚN SIMIO, MUJER IGNORANTE!
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La Bella y la Bestia, FanFic de Vegeta y Bulma
FanfictionMiedo. Esa era la palabra que me describía. Yo sabía lo que era sentir desesperación, angustia, presión; miedo. Sufría, pero aún así sobreviví. Deje de ser un niño al ver que la madurez no era una opción sino, una necesidad. Me convertía en algo que...