Estaba en el consultorio de Tim, recostado en esa típica silla que tienen los psicólogos para sus pacientes.
- ¿Ya me vas a ayudar, o vas a estar viéndome ahí otros diez minutos?
- Esto que hago es importante.
- Sólo has estado viéndome y dibujando lo que seguramente son obscenidades en tu libreta esa.
Y como obviamente era cierto, rápidamente la cerró y lanzó a otra parte de la habitación.
- Bien, has dicho que te sientes raro últimamente.
- Si...es está cosa extraña que no me deja dormir ni extorsionar personas como normalmente hago. Creo que estoy enojado.
- ¿Por qué?
- Porque ella está saliendo con el imbécil.
- ¿Eso no te dice algo?
- Si, soy muy territorial.
- No es la respuesta que esperaba.
- ¿Qué pensabas que respondería?
- Qué te sientes intranquilo porque estas celoso, ya que ella te gusta. Y no lo admites.
- No te pago para decir tonterías.
- No me pagas en lo absoluto. Y hablo en serio, tú estás celoso, convives a diario con ella y no quieres que te la quiten. Soy un profesional, se de lo que hablo.
- No, no, no. Ella está loca, mal y me saca de quicio, al menos es algo divertida y linda, creo. Es bastante agradable cuando no atenta contra mi salud mental y física. Sólo no soporto la idea de que ese idiota se la lleve porque...
¿Qué?
- Porque la quieres.
¿Qué?
------------------
A partir de aquí empieza lo serio. Creo.
ESTÁS LEYENDO
Coffee Shop
Short Story[Sin editar, algún día la corregiré y agregaré narración, que pena. Disculpen las molestias] Ella entró como todos los días a la tienda, se detuvo a unos cuantos metros de mi y me miró fijamente. Se tapó la boca con ambas manos y grito horrorizada...