Las aventuras de Loxie

Capítulo 8

Es la hora de que Blake se marche del hospital. Le prometí acompañarlo a su casa, pero no sé donde vive.

-Blake, ¿puedo hacerte una pregunta?
-Por supuesto- dice mientras recoge la mochila que llevaba.
-¿Dónde vives?
-Si estás pensando en que vivo en esa casa donde dejé a mis ovejas el otro día, estás en lo cierto. Pero hay otro camino por el que podemos llegar sin tener que volver al valle perdido.
-Sí, era exactamente lo que estaba pensando. ¿Cuál es ese otro camino?
-El que pasa por el río. Pero de verdad que no tienes que acompañarme.
-Si que debo hacerlo.

Después de decir eso Blake y yo nos ponemos en camino hacia su casa, cerca del pueblo de Solier.

Caminamos durante horas. Y por fin llegamos a una especie de masía con un establo enorme.

-Vaya, es un lugar precioso.- digo parándome en la entrada.
-Sí, lo es. Mis abuelos y yo hemos trabajado mucho para conseguir esto.
-¿Vives con tus abuelos? ¿Qué les ha pasado a tus padres?
-Miadre murió cuando yo tenía 5 años y mi padre nos abandonó cuando era pequeño.
-Vaya, lo siento, no quería que recordaras algo tan horrible.
-No es tan horrible si no he crecido con ellos, a demás, mis abuelos me quieren. Por cierto, ¿te apetece pasar?
-Debo irme ya. Quizás en otra ocas...-no me da tiempo a acabar la frase, por que una mujer mayor, muy alegre y vital me interrumpe.
-Oh Blake, ya has llegado. Me tenías muy preocupada. -De repente la mujer me ve.- Hola jovencita, no sabía que Blake fuese amigo de una chica tan guapa.
-Abuela, me estás avergonzando un poco.
-Hay, ¿no me vas a decir quien es ésta mucachita?
-Abuela, ésta es Loxie. Loxie, ella es mi abuela, Margareth.
-Encantada Margareth.- le digo respetuosamente.
-Blake, no seas maleducado y deja pasar a Loxie.
-Oh, señora, yo tengo que irme, a demás no quiero ser una molestia.
-¿Qué vas a ser tu una molestia? Anda pasad.

Y ya veis. Me encuentro pasando el maravilloso umbral de la casa de Blake, acompañada de él y su abuela.