Las aventuras de Loxie

Capítulo 21

Feliz. Felicidad es lo que siento. Encontré a mi hermana hace ya cosa de un año, y durante este periodo de tiempo, he conocido a mucha gente: a Marie, a Ethan, a la reina Aquamarine, a Lindsay, a Emma, a los abuelos de Blake, y por supuesto, a Blake. Él es mi único y mejor amigo, el único que he tenido en mucho tiempo.

Creo que ser feliz es lo que me merezco, ¿no? Digo, he pasado por muchas cosas y de verdad que siento que las que me quedan por vivir, serán mejores y compartidas con quienes quiero, mi nueva familia. Y...

-Loxie, es hora de cenar.- mamá está siempre pendiente de Sabby y de mí ahora que estamos juntos de nuevo.
-¡Ya voy!- digo entusiasmada ya que mi estómago esta rugiendo desde hace un par de horas.
-¿Qué estabas haciendo, Loxie?- Pregunta Sabby una vez estamos todos sentados en la mesa.
-Nada en especial, ¿y tu, qué hacías?
-Pues... Estaba con papá en la plaza comprando adornos, ya que se acerca la Navidad.

Puede que la Navidad también haga que me sienta feliz, ya que es la primera vez en años que la pasaremos juntos. Antes de que desapareciera Sabby anhelaba que llegara el día de Navidad, pero después de aquel fatídico día, deje de esperar y empecé a ser una persona triste y no feliz.

Feliz, ahora recuerdo como se siente uno cuando esta de buen humor y positivo por la vida.

Después de acabar de cenar me voy a la cama. Me quedó dormida casi al instante, ya que estoy muy cansada.

¿Dónde estoy? Esto parece un... ¿Cementerio? ¿Qué está pasando aquí? No entiendo nada... Estas personas me suenan, las conozco. Son papá y mamá, y ¿Sabby? Están llorando, ¿por qué? Me acerco lentamente hacia mí familia. Están llorando mientras miran una lápida en la que pone: "Loxie (2100-2118) Valiente y gran persona para muchos, una heroína para otros." ¿Qué es esto? ¿E-Estoy... muerta? N-no. No puede ser. No. Me niego a creerlo. ¿Muerta? Imposible, y-yo n-no es-estoy muerta. Lágrimas aparecen por mí rostro. No puedo evitarlo y empiezo a sollozar fuerte. Lágrimas y más lágrimas se abren paso por mis ojos y se resbalan por mis mejillas para luego caer al nevado suelo. No me he dado cuenta pero Sabby se ha girado y ahora esta cara a cara conmigo. Entre sollozos empieza a cantar una canción de cuna que se me hace conocida. Es la canción de cuna que le cantaba a Sabby cuando éramos pequeñas y ella no podía dormir. La escucho atentamente y cuando para me mira de una manera que me indica que siempre estará conmigo. De repente oscuridad. Todo se nubla. No veo nada, no oigo nada y no siento nada. Y de repente calma. Calma que acaba cuando aparece la imagen de alguien que conozco abalanzarse contra mi. No puede ser, es...

Me despierto sobresaltada. Quiero creer que es un sueño. De verdad que quiero. Pero cuando alguien sueña con su propia muerte... No trae nunca buenos augurios. De verdad que espero que sea sólo un sueño. Sin pensar más sobre el asunto vuelvo a dormirme.

¿Será sólo un sueño?