17 James

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Mia:

Junio, 9:15 A.M.

Luego de que me diera otra vez una ducha por culpa de Jason y sus manos traviesas, estábamos en la camioneta con Luke y Michael. Atrás estaban en otro auto Bastian y Justin. Y adelante estaban Ethan y Tommy.

— No entiendo porque trajiste a  los chicos.— le dije a Jason arqueando mi ceja.

— Los alemanes me están jodiendo mucho y no quiero que les pase nada.— me explicó acariciando mi vientre.

Suspire y me recoste de su hombro.

— ¿Cuándo me darás mi teléfono?. — le pregunté acariciado su pecho cubierto por una camisa gris en corte V.

Cuando seas bonita conmigo.

— ¡Yo soy bonita contigo!.— le dije golpeando su hombro con fuerza.

— Bastante... — me respondió sarcástico.

— Hay veces en que no te soporto. — le comenté mal humorada.

Putos cambios de humor.

— Y yo a ti. Miramos ahora. — respondió.

— Después de tantas peleas. Aquí estamos...— hice una pausa acariciando la mejilla de Jason mientras rozaba mis labios con los de él muy levemente. — Pero aun espero mi teléfono.

— Jodida chantajista. — susurró en mis labios para besarme con fuerza.
— ¡Ey! Sexo en el auto cuando no estemos, Collins.— pidió Luke riendo con Michael.

Jason gruño:— La vista en el camino, gilipollas.

Reí con Michael.

Los chicos eran muy agradables conmigo. Además de Blake, Luke y Tommy eran los que más me buscaban conversación. Casi todos estos chicos Jason los conocía cómo la palma de su mano.

— Llegamos. — anunció Luke.

Jason, los chicos y yo nos bajamos del vehículo. Luego los demás se fueron aglomerando en frente de Jason.

— Cuiden esta entrada y la del consultorio. No quiero sorpresas. Esos hijos de puta saben de Mia. — ordenó Jason con su voz autoritaria.

— Todo cubierto, JC.— susurró Blake tocando la pistola que se encontraba guardada en su pantalón.

— Vamos.— Jason tomó mi mano mientras nos dirigiamos al consultorio de un buen amigo de Jason.

— No entiendo cuál es tu maña de tener control de todo.— le dije rodando mis ojos.

— Estás salvada porque estamos en un lugar público, pero la próxima vez que me ruedes los ojos no me importará en los más mínimo y te azotaré el culo hasta dejarlo rojo.— me amenazó Jason apretando fuertemente una de mis nalgas. — Y respondiéndote... ¿Cómo crees que tengo el control de Los Ángeles?.

Era un jodido hijo de puta. Y lo peor es que me gustaba.

— Eres un ser arrogante. — le respondí achicando mis ojos.

— Y un gran hijo de puta, no lo olvides.— me contestó con diversión en sus ojos.

Cuando llegamos al frente de la secretaria Jason dijo un nombre, que supuse que era falso para no revelar su identidad, y entramos de inmediato.

— Pero miren quien está aquí. La persona que dijo que jamás tendría hijos.— comentó un hombre mayor con su cabello casi blanco y ojos azules.

— La vida da vueltas, Josh.— le respondió Jason con una sonrisa de medio lado.

— Eso claramente lo puedo ver.— dijo el señor mirando mi vientre con diversión.— ¿Tu nombre, cariño?.

Iba a responderle pero Jason me interrumpió.

— Jazmín.

Lo miré sin entender pero luego me di cuenta que era por mi protección.

— De acuerdo, Jazmín. Veo que estas entre veintidos, veinticinco; o sea; cinco meses. Pero Justin me dijo que en el mes cuarto no fueron a consulta.— lo miré incrédula hasta que comprendí que ese era el nombre falso de Jason.

— Si, fue algo muy irresponsable.— le respondí jugando con mis manos.
— Pero bien. Lo bueno es que cumpliste con venir aquí.— me sonrió de lado tomando una de mis manos. — Pasa a el baño para que te cambies y te hagamos una ecografía.

Me levanté de la silla donde previamente me senté y me dirigí al baño pero cuando quería cerrar la puerta Jason me lo impidió.

— ¿Qué?.

— No me digas que también tengo que hacer eso frente tuyo...— le respondí mostrando mi cara de fastidió.

— No me contradigas.— me ordenó mientras cerraba la puerta tras de sí. — Ahora, sube los brazos.

Detuve la ganas de rodear mis ojos e hice lo que dijo. Me quitó el vestido y se quedó viendo mis senos.

— En serio adoro tus pechos. — me comentó Jason dejando un beso en cada pecho.

— Jason, concentrate.— gemí mordiendo mi labio inferior.

Él me guiñó el ojo y tomó una bata de hospital, la pasó por mi cuerpo para luego salir del baño.

— Jazmín, por favor recuestate en la camilla. — me pidió revisando la máquina que hace ecografías.— Justin, colocale esto en el vientre.

Jason asintió subiendo la bata dejando ver mis bragas negras. Cosa que Jason gruñó pasando uno de sus dedos por mis bragas. Me colocó el gel que al comienzo estaba frió pero gracias a las manos de Jason se tornó temperatura media.

— De acuerdo, veamos a ese bebé. — dijo el doctor mirando la pantalla de la máquina.

Se empezó a oír un constante pero pequeño ruido.

— Ese es el corazón del bebé. — nos explicó Josh.

Cuando vi a ese pequeño me enamore. Y por siempre.

Era pequeño se movía lo sentía moverse.

— Está dando patadas.— le anuncié a Jason con lágrimas en los ojos.

— Así es. Está muy activo. — me respondió sonriendo. — Felicidades, es varón.

Y ese varón se llamará James.

Pueden matarme, violarme y descuartizarme por ser tan irresponsables con ustedes.

Me siento horrible por eso y pido mil disculpas.

Las amo y espero que me perdonen.

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By: 1502Bizzle.

De Jason © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora