Amigos con derechos (Sebastián Villalobos y tu HOT)

Capítulo 23-Alcohlizado

Por la mañana Sebastián se fue a una cita súper importante según el de una revista, me dejo sola en ese gran departamento. No me daba buena espina todo por alguna razón, no era desconfianza porque yo misma escuche esa llamada y meses atrás note que la revista había estado interesándose en el pero algo dentro de mi pasaba, es como cuando sientes algo atorado en el pecho como un presentimiento; pero bueno no le di tanta importancia y me paré de la cama directo a la ducha, la agua recorría mi cuerpo justo cuando oí que alguien habría la puerta principal, ya había acabado y salí del baño con sólo una toalla enredada en mi cuerpo, por un momento pensé que era la limpieza ya que Sebastián no podría haber llegado, pero ni una de las dos era Sebas Arango me cambie lo más rápido posible al verlo por una abertura en la puerta medio cerrada y salí de pronto.
-¿Sebas?
-¡_____! Pensé que no te encontraría.
-¿Porque? ¿Que paso?- dije un poco acelerada.
-No, nada tu tranqui, quería saber si podrías acompañarme a el centro comercial.
-Claro ¿Para que?
-Tengo una convivencia pero no quería ir solo.
-Vale vamos solo voy por mis cosas.
Cogí mis llaves, mi mochila que traía todo y ya salimos hacia su auto, no se me hacia tan raro ir con Sebas ya que nos llevamos súper bien, el conducía mientras yo grababa ya que el me lo pidió. Todo salio bien, Sebas me invito a tomar algo, estábamos en un lugar no tan elegante pero tranquilo, yo tomaba a mi bebida cuando el hablo.
-¿Pasa algo?
-No nada- deje mi vaso en la barra
-Tu no estas bien _____, ¿Que tienes?
-Desde que se fue Sebastián, me ah dolido el pecho como un mal presentimiento.
-De seguro no es nada, deberías ir al doctor.
-No lo creo pero ya veré- y con eso di fin al tema.
Acabamos las copas y fuimos camino a casa. El detuvo el auto para que me bajará y se siguió derecho para ir camino a su casa, tome el ascensor, y llegue a la gran puerta pero justo cuando iba a abrir esta lo hizo y lo vi ahí parado sosteniendo la manija con los ojos hechos furia.
-¿Donde carajos estabas?- su voz era fuertemente dura como si algo peor hubiera pasado.
-Fui con Sebas a la convivencia- estaba temblando de miedo, nunca lo había visto así.
-¡No me mientas! ¡Te acostaste con el!
-¡Estas loco, yo nunca lo hice! -grité ahora si estaba enojada por esa acusación.
-Y esa ropa tirada tuya- recordé que salí corriendo y deje la cama sin tender y mi ropa tirada.
-Salí disparada de la casa no recogí nada, no puede ser que por esto me grites cómo loco-agache la mirada echa rabia
-Perdón, me imagine no peor- me abrazo y sentí el olor a alcohol.
-¿Haz tomado?-mi pregunta era obvia
-Si- se volteó y se dirigió hasta la sala- El entrevistador me invito algo y eh terminado así.
-Ya vete acostar por favor
-Lo haré- fue hasta la cama y durmió.