Sick for you (offenderman y tu)

capítulo 3

Otro día de estudio para todos, esperando a que llegue el profesor de la última materia se hacia eterno. Pero Celestine no paraba de pensar en lo de ayer su primera impresión hubiera sido que no saldría de esa, pero fue todo lo contrario con una tarde de solo caricias y afecto del que tanto necesitaba cada recuerdo volvía a su mente cómo él pasaba solo su dedo por su pecho y tocaba su cintura cómo si fuera algo tan frágil, cómo se acercaba al rostro de ella solo para acariciar sus mejillas, cuando pasaba su mano caliente por los muslos de ella.

—"Puede concentrarte al menos hoy y dejar de pensar en estupideces"

—¿Que te pasa conmigo? Estás más estúpido de lo normal Puppe.

—"No me digas Puppe, no me llamo así, Estúpida".

—Puedes dejar de molestarme maldito estúpido.

Sin darse cuenta, tenía al profesor observándola mientras insultaba a la nada, no pudo evitar dar un suspiro de molestia al saber lo que se le aproximaba.

—Señorita Celestine, me haría el favor de salir del aula.

—Perdone profesor.

Retirándose del aula, a penas salió se topó con un hombre grande, alto y lindo con un perfume que te gustaría sentir toda la vida, su cabello era tan gris cómo la misma plata, aparentaba ser alguien joven, sus ojos de depredador eran hipnotizantes.

—¿Ya estás castigada tan temprano?—Preguntó él.

—Solo se me escapó alguna que otra palabra. Y ¿A quién buscas?

—¿Acaso no me reconoces?—Este rió un poco, y solo hizo que ella tuviera más duda— O tengo que quitarte la blusa nuevamente.

—"Este tipo no se cansa"

—Offenderman que carajos haces en este lugar y... ¿Por qué luces así?

—La forma humana no es de mi agrado pero gracias cariño. Y vine porque quiero salir contigo.—Este se acercó un poco a ella pero Celestine puso su mano en el pecho apartandolo.

—No puedo irme así de la nada, hay que firmar y esas cosas.

—Es facíl, falsifiqué tantas cosas y esta no es problema.

Tomándola de la mano entró directamente al aula, Celestine moría de verguenza mientras Offenderman hablaba con el profesor mientras llenaba algunas cosas, aunque varias ya le habían dado unas vistas.

—Bueno Celestine ya puedes irte y espero que todo esté bien con ese detalle—Lo que dijo el profesor la dejó confundida.

—Eh sí, no se preocupe—A penas salieron del aula, se metió con Offenderman en el aula vacía de al lado—¿Que excusa le dijiste?

—Nada grave sólo le dije que tenías que ir al médico por el bebé.

—¿Es una broma no? ¡Le hubieras dicho otra cosa! Ahora le dirá a todos los profesores y van a creer que estoy embarazada y no es así.

—Si no estabas tan molesta mientras las demás me miraban, decía otra cosa.—Offenderman pasó su mano por la mejilla de la joven—Te ves bien estando celosa.

—No estaba celosa, y no insistas.

—Tampoco estás embarazada pero no me molestaría hacerte un hijo.—Agregó este, se acercó a ella.

Él solo dejó un suave beso en los labios de la joven, un beso corto, esperando a que ella se moleste pero, sólo consiguió que ella lo mirara por unos segundos, Celestine se acercó a él para darle otro beso, y lentamente pasaba sus pequeñas manos por el pecho de él para subir hacia su cabello, un beso que ambos se deseaban desde el principio, las manos de Offenderman tocaban la cintura de Celestine, él quería más, pero unos pasos apresurados se oyeron y ella se apartó pero ahí de pie ya los había visto una alumna, quien los miraba con interés, sobre todo a él.

—Lamento interrumpir pero, Celestine el profesor tiene que darte un trabajo y te espera en el aula.

—Dile que lo buscaré mañana, ya nos vamos—Le respondió ella.

—Vamos Celestine tenemos que irnos—Offenderman con tono serio tomó la mano de ella con fuerza para irse, pero la tercera se puso frente a ellos.

—Oh Francis, no hagas que no me conoces deja de mentirle a tu novia—Al oírla decir el nombre de él, Celestine conectó unas cuantas piezas.

Francis era el nombre de antes, la única manera que ella podría saberlo fue si estuvo con él.
Sólo fue una mentira más de muchas que él le podría haber dicho, Celestine se río de la situación, los miraba a ambos.

—Genial, sabés qué Amanda—Celestine soltó la mano de Offenderman—los dejo solos, se ve que tienen mucho por hablar, yo me voy.

Safandose del agarre de Offenderman/Francis no aguantó mucho en salir del edificio y comenzar a cuestionarse todo desde el principio, comenzó a llorar por la decepción que era obvia desde un principio, sin importar quien la viera llorar ella solamente quería llegar a la casa y ponerle un fin.
Al llegar a los minutos, lo primero que hizo fue tirar el bolso en el suelo para ir a llenar la bañera de agua hasta el tope.

—Mentiroso igual que todo el resto, mentiraa y mentiras.

—"No hagas una estupidez, sabes que no puedo ayudarte si tu no impides hacerte eso"

—Callate Puppe, callate no quiero oír a nadie ¡Quiero estar sola!—Comenzó a gritar en la soledad.

Sus lágrimas caían una tras otra por su mejilla, oía cómo el agua llevaba la bañera hasta que esta desbordó y supo que ahí era el momento para entrar. Dejando caer la ropa puesta al suelo, quedando sólo con ropa interior, entró a la bañera y con tristeza tomó el cutter escondido, y con suma rapidez cortó sus muñecas hasta que comenzó a sangrar más de lo usal y se sumergió mientras la sangre se mezcla con el agua.

(Actualización 25/05/23)