capítulo 4.

6.3K 406 159
                                    

La luz del foco hizo que despertara, abriendo los ojos de a poco notó que estaba en la cama y a su lado Offenderman que le daba la espalda.—¿Que hace él aquí?—Se preguntaba en su mente, levantándose con cuidado tenía una gran debilidad y al estirar sus brazos sentía cómo sus heridas se abrían a lo que se quejó un poco por el dolor.

--No hagas eso, deja que se curen.—Viendo hacia el frente estaba él sentando en la cama pero aún sin verla de frente.

—¿Por qué no me miras? Así ves cómo soy en realidad.

Él sólo dio un suspiro de cansancio pero poniéndose de pié caminó hasta queda frente a ella y la miró sus ojos irritados, labios morados, piel fría y cortada...

—Perdón por haberte conocido Celestine.

Esas palabras rompieron su corazón aún más, él dio un paso a punto de marcharse pero con la poca fuerza que tenía Celestine en ese momento lo agarró de la mano.

—Al menos quedate esta noche conmigo

Al quedarse le haría aún más daño, pero no podía negarse ante ella aún sin un motivo se convirtió en su debilidad, la flor más bella del mundo enamorada de una mala hierva cómo él.

—Me quedaré sólo para asegurarme que estás bien—Dijo este para recostarse lentamente a su lado, ambos acostados en la cama sólo se dedicaba a observarla en detalle mientras ella sólo lo abrazaba.

—Si estás con ella no me hubieras tratado así cómo lo hacías y no tendrías que haberte quedado en la casa.

—No estoy con ella, Celestine sabes cómo soy que me acosté con muchas mujeres antes, ella solo fue una más.—Él al decir esas crudas palabras se alejó un poco para ambos sentarse.

—¿Por qué me salvaste si no te importo?

—Yo nunca dije eso, eres la mujer que hubiera querido desde el comienzo hasta el fin.

—Pero yo no quiero un fin, ¡Offenderman yo no soy una más! Si no me quieres bien, puedes irte ahí tienes la puerta, y si es lo contrario demuestra que realmente me quieres en tu vida.

Un beso fue la primera opción que tuvo de demostrarle que sí la queria y eso fue lo que hizo, la besó, un beso lleno de aquello llamado sentimiento, lo que él no tenía.

—Esa fue la primera demostración de que sí te quiero en mi vida, Celestine lamento el daño que te causé pero juro que lo que siento es real, y es raro hasta para mi, mirame soy un maldito asesino que se enamoró de una joven y bella mujer.

—¿Realmente me quieres?

—¿Acaso no fui claro? Tal vez tenga que besarte más.

02:01 P.M

Él estaba recostado en la cama, con su brazo tapando parte de lo que sería su rostro, unos sonidos tenues hizo que ék despertara y al ver a su lado Celestine no estaba en la cama, sólo se oían algunos pasos en la cocina y sigilosamente fue hasta allí y de su sorpresa ella estaba ahí pero con otra ropa y aún con su brazo vendado.

—¿Saliste de la casa?—Preguntó el intrigado y se apoyó contra la pared mientras la miraba.

—Solamente di una larga caminata—Le respondió ella aún sin voltear, con total tranquilidad lavaba sus manos temblorosas.

—Celestine, dime la verdad ¿Dónde estabas?

—Ya te he dicho, sólo salí a caminar.—Secó sus manos y al girarse, él la vio con manchas de sangre por toda su ropa.—Casi lo olvido de darte esto.

Le entregó una nota que había encontrado en la Gabardina de él, y en ese papel estaba la dirección en donde vivia Amanda.
—"¿Acaso llegó tan lejos sus celos que decidió matarla?"—Pensó él y se acercó.

—¿Tan celosa te puso esa chica?

—Celosa no, que la estúpida me haya jodido la existencia es otra cosa, Francis.

—Y ahora me llamas por mi otro nombre, Celestine eres tan transparente con tus sentimientos.—Él cambio a su forma humana, tal vez así podría molestarla un poco más y al hacerlo se inclinó un poco para tocar su rostro.

—Si piensas que caeré en tus encantos, estás muy equivocado.

—Al menos cambiate y ve a la cama.

—¿Te molesta que haya salido de la casa? Entonces deja de andar por allí con esas porque así les irá y a tí también.

—Y todo esto por celos, estás tan enferma que me encanta.

Ambos sabían que estaba mal lo que hacían, cómo un ser cómo él podría estar con una simple joven cómo ella. Sabiendo que Celestine saldría lastimada y sin importar los problemas ella estaría dispuesta a todo pero, él no aguantaría un amor.

Celestine apreciaba el rostro de Francis, nunca usaba su apariencia humanay en esa segunda vez recordaría cada rasgo de él.

—¿Nos vamos a cama? Sólo a dormir.—Remarcó

—Vamos, pero Celestine en algún momento caerás en mi—Reia un poco él, se acercó al rostro de ella para besar su mejilla.

—Ya quisieras que eso pase.

En ese instante se encendió la luz que ilumina la entrada de la casa, y se vieron dos siluetas, y Celestine sabía quienes eran.

—Mierda Francis, ve a mi habitación y no salgas.—Él la miró pero hizo lo que pidió.
Ella sólo tomó una camisa con mangas largas limpia y se la puso, y abrieron la puerta, eran sus padres.

—¡Hija! Que sorpresa que aún estés despierta.—Dijo su madre mientras ayudaba a su marido con las cosas.

—Sólo me quedé mirando la TV, pero ya me iba a dormir.

—Ve a la cama Celestine, con tu madre ya nos iremos a descansar.—Con su padre no había mucho trato, así que sólo se despidió y fue a su habitación en donde aún estaba Offenderman con su apariencia de siempre.

—¿Tus padres?

—Sí, pero no pasa nada ya se irán a dormir.

—Está bien, pero de todas formas tengo que irme por un tiempo.

—¿Ahora? Pero vendrás mañana ¿no?—Tenia esa tensión en su cuerpo y un nudo en su garganta, no aceptaría esa decepción.

—Yo no te lo quería decir, pero fuiste una mujer muy buena al tenerme aquí y vi cómo eres en realidad a lo que imagina el resto.

—Ve al punto Offenderman, quiero una explicación de esto.—Su visión se ponía borrosa por las lágrimas que quería aguantar hasta que una salió.

—No puedo, sólo me iré y no recuerdes esto porque no soportaría verte caer de nuevo. Algún día volveré pero mientras esperas no dejes que nadie te lastime.

—No quiero aceptar eso.

Celestine se aferró a él, cómo si haciendo eso nunca se iría, pero sólo la abrazó con cuidado y besó su frente. Lamentaba tener que verla destrozada pero si se quedaba más tiempo el daño sería aún más para ambos, y todo porque él no puede aceptar sentir algo más que pasión, y antes de marcharse él sólo le dijo unas últimas palabras. "Fue bueno mientras duró, te quiero Celestine y espero me perdones por esto"

(Actualización 25/05/23)

Sick for you (offenderman y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora