Los días pasaron y te veías cansada, tenías ojeras y decías que tu hermano mayor estaba fuera de la ciudad y tenías el doble del trabajo, el viernes tu hermano llego y me enviaste un mensaje para juntarnos en el parque.
—Hola. — Salude.
—Hola. —te recostaste sobre el césped y yo me senté a tu lado.
—Jack quiere internarlo.
—¿Eh?
—Quiere que viva en un hospital, no quiero eso, eso es cruel.
—Mejorara. —Desde tu posición me observaste ¿examinándome? —¿Qué pasa?
—Nada, solo... me alegra haberte conocido.
¿Podría haber mejor comentario?
No.
Unos metros más allá un niño estrello su cometa en el árbol, al verlo te pusiste de pie y para mi sorpresa lo trepaste y soltaste la cometa dejándolo caer, te dieron las gracias.
— ¡Sube!
— ¿Qué?
— ¡Vamos!
Arriba había una bonita vista, y reímos y disfrutamos el momento... quite una hoja de tu trenza.
—Siempre llevas trenzas.
—Mi... Mi madre me las hacía. Por eso las uso.
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La de trenza y liston.
Krótkie Opowiadania"Él la quiso desde el principio, siempre, a ella, a su trenza y a su listón".
