Paula:
Anoche desperté en casa de alguien que no conocía. Me encontraba desnuda debajo de las sábanas con un chico de pelo castaño de espaldas a mi. Me levanté despacio para no despertarlo.
Recogí mi ropa y me vestí. A los 5 minutos estaba fuera de esa casa de camino a la mía. Tenía una resaca enorme y no me acordaba de nada de la noche anterior.
Estaba harta de todo. Mi vida era una mierda. Las drogas, el alcohol y el sexo a todas horas se volvía demasiado adictivo.
En un momento una imagen de mi madre apareció en mi mente. Una detrás de otra. Mi madre regañandome cuando era pequeña. Si viviera, todo sería mejor. Seguro que desde allí arriba estará preguntándose que hizo mal para obtener una hija así.
Ojalá pudiera verla de nuevo y decirle todo lo que la quiero. Ojalá un día pueda regresar con ella y ser feliz de una vez. Y lo decidí, pronto me reuniría con ella.
Fui a la cocina y cogí un cuchillo.
-Mamá, te quiero, pronto estaré junto a ti. - Y clavé el cuchillo en mi pecho desgarrando mi corazón, sientiéndolo atravesar mi cuerpo.
Fin.
Buenas, aquí os dejo el último capítulo de esta historia. Gracias a la gente que ha estado leyendo mi historia. Deciros que tengo más proyectos en mente.
Os quiere mucho: Patri:)
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Virgen a los 19
Teen Fiction¿Porque hay tantos temas de perder la virginidad cuando tendría que haber más temas sobre el porqué la virginidad es tan importante cuando es sólo un símbolo que nos han impuesto de hace años y es sólo un paso para la madurez?
