Kuroko no basuke x reader

Kise Ryouta [4]

Estabas arreglando un bolso con un poco de ropa, mientras hacías esto tarareabas y una enorme sonrisa estaba estampada en tu rostro; la razón de esto era muy simple, irías con Kise y el resto del equipo de baloncesto a un viaje por tres días a la playa. Quizá no era una gran razón para estar así, pero a decir verdad, podrías tener grandes paisajes que fotografiar, y podrías estar más tiempo con Kise, bueno, no tanto, porque el chico también tiene que entrenar, pero aun así estabas muy feliz.

- ¿(T/N)-chan, estas segura que llevas todo? -pregunto tu madre mientras entraba a tu habitación.

-Sí, llevo varios cambios de ropa, un traje de baño, zapatos, cepillo de pelo, cepillo de dientes, cámara-dijiste mientras revolvías en tu bolso.

- ¿A qué hora pasara Kise-kun por ti? -pregunto curiosa su madre, esa podría ser la oportunidad de conocer al novio de su querida hija.

-Como a las 7:30 am, no es necesario que te levantes a esa hora mamá -te apresuraste a decir, sabias que tu madre quería conocer con ansias al rubio.

-No importa, me levantare igual a esa hora, tengo que hacer cosas desde bien temprano -tu madre desvió la mirada, tu solo la miraste mas inquisitivamente-está bien, yo solo quiero conocer a Kise-kun.

-No sabes mentir para nada -reíste mientras le tirabas un peluche, comenzando así una guerra de estos.

Una vez terminada la batalla de peluches, te fuiste a acostar, ansiosa por aquel anhelado viaje, pero estabas tan ansiosa que no podías dormir, para que te entrara el sueño tomaste tu celular y comenzaste a mirar las fotos, la mayoría eran de Kise y tú, sonreías cada vez que veías una, al final, te quedaste profundamente dormida.

Un molestoso ruido comenzó a retumbar por toda tu habitación, era la alarma, la apagaste delicadamente lanzándola contra tu armario, logrando el objetivo de callar de una vez aquel objeto de tortura. Perezosamente te sentaste en la cama, miraste a tu alrededor, te refregaste los ojos y te levantaste para poder bañarte. Eran las 6:30 am, ni para la escuela te levantabas tan temprano, pero querías bañarte y hacer tus quehaceres con calma.

- (T/N)-chan, el desayuno está listo, baja pronto o se enfriara-dijo tu madre mientras golpeaba la puerta del baño.

-Ya voy -dijiste mientras terminabas de secarte el pelo.

Una vez lista bajaste, encontrándote con un desayuno conformado por panqueques, jugo de frutas natural y cereal con leche, una sonrisa te ilumino el rostro, casi nunca tenias un desayuno así, ya que por lo general siempre salías tarde de casa y con suerte alcanzabas a comer un puñado de cereal.

-Wow, mamá, gracias por el desayuno-dijiste mientras te sentabas y comenzabas a desayunar.

-Bueno, tengo que darte un buen desayuno antes de que te vayas con tu novio-ahora sabias a que se debía este gran desayuno.

-Mamá, si querías conocer a Kise, no era necesario que me preparas todo esto, pero no me quejo-te metiste otra cucharada de cereal a la boca -tranquila, hoy lo conocerás.

-Es que (T/N)-chan, no es mi culpa, tu nunca lo ibas a traer, debía tratar de convencerte de algún modo- se quejo tu madre mientras se sentaba al frente de ti.

-Lo iba a traer, pero cuando papá y mi hermano volvieran -dijiste desviando la mirada.

-Cuando quieres, puedes ser muy tierna -dijo tu madre recogiendo el plato de cereal y las demás cosas.

Estabas ansiosa, te ibas de un lado hacia otro, buscando algo que hacer, solo querías que Kise llegara pronto. Mirabas la hora a cada minuto, la espera te estaba matando. Sentiste que alguien tocaba a la puerta, y ese alguien no podía ser más que Kise, saliste corriendo, te tropezaste llegando a la puerta, te levantaste y abriste la puerta muy rápida mente.

- (T/N)-cchi, buenos días -el rubio te recibió con una sonrisa y una bella flor.

-Kise-kun, buenos días -tomaste la flor que te ofrecía y le diste una sonrisa.

- ¿Vamos? -pregunto el chico, mientras te tomaba de la mano.

-Eh, Kise-kun, sabes, mi mamá quiere conocerte, ¿podrías pasar un momento? Ella se conforma con que la saludes -te sonrojaste al decir eso, para ti sonaba demasiado raro.

-Eh, claro -el chico entro sin que tu se o indicaras.

-Kise-kun, es un agrado conocerte -dijo alegre tu madre y algo embobada por el chico, digo, quien no lo haría.

-Es un agrado para mí también el conocerla -el chico ilumino el sitio con una sonrisa.

-Bueno, no les quito más tiempo, diviértanse mucho-dijo su madre haciendo un ademan con su mano -Kise-kun, cuida muy bien de (T/N).

-Así lo hare, no se preocupe-termino de decir el rubio mientras tomaba tu mano y la apretaba levemente.

Kise te había venido a buscar en el auto de su hermana, claro que ella conducía. Te sorprendiste de lo iguales que eran, el mismo color de cabello, los mismos ojos color miel y hasta su personalidad eran similares.

- (T/N)-cchi, eres la primera chica con la que Ryouta ha durado más de una semana -dijo la hermana de rubio mientras conducía.

-Nee-chan, eso es porque con (T/N)-cchi voy en serio -te sonrojaste al oír aquello.

-Eso es bueno Ryouta, ya era tiempo que estuvieras con alguien seriamente, que dejaras de jugar con las chicas fue bueno -dijo esta vez más seria.

Las palabras de la hermana del rubio quedaron resonando en tu mente, ¿Y si Kise solo estaba jugando contigo? No sería la primera vez que jugaba con alguna chica ¿No? Pensando esto el viaje se te hizo muy corto, tanto que ni te habías dado cuenta de que ya estaban en la estación de trenes y ya estabas sentada al lado de chico.

- ¿(T/N)-cchi, que pasa? Hace rato que estas rara, como si no estuvieras aquí-dijo el chico mientras te miraba.

-Eh, no pasa nada- le respondiste, obligándote a salir de aquella nube de preguntas-estoy bien.

- (T/N)-cchi, dime la verdad, algo te pasa-te dijo el chico mostrando un semblante serio.

-Es que...bueno -inhalaste un poco de aire y continuaste -es que me quede pensando en lo que tu hermana dijo, acerca de que antes jugabas con las chicas.

-Oh, (T/N)-cchi, no te preocupes por eso -dijo abrazándote con mucho cariño, susurró a en tu oído-yo nunca jugare contigo, yo te quiero más que a ninguna otra cosa.

Lentamente correspondiste el abrazo del chico, era increíble la manera en la que el chico podía leer tu comportamiento, hasta el punto de saber lo que te estaba atormentando. El chico se separo de ti, solo lo suficiente como para poder besarte.

-Oigan ustedes, no se atrevan a ponerse melosos en el tren -le grito Kasamatsu mientras le tiraba una botella a Kise.

-Kasamatsu-senpai, no me tire cosas -se quejo el rubio mientras se sobaba donde le había golpeado la susodicha botella.

Y en ese momento, comenzó otro de los escándalos del club de básquet de Kaijo.

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esto lo logre escribir mientras "estudiaba" lenguaje XD

me ila telible en la plueba, pelo no me alepiento de nada.....

nos vemos el proximo fin de semana....