Takao Kazunari [10]

2.6K 157 8
                                    


A Kazunari todo le estaba saliendo bien, de poco su nombre iba tomando fuerza dentro del mundo del espectáculo. Ya tenía varias canciones que habían estado sonando dentro de las radios locales. Eso era bueno, muy bueno.

Por tu lado todo iba bien, habían pasado casi 3 meses desde que se habían casado y todo entre ustedes mejoraba día a día. Además, sólo faltaban dos semanas para que el bebé naciera. Más bien, que la bebé naciera. Era niña.

Takao puso el grito en el cielo cuando se enteró que tendrían una niña. Lo publicó en todas partes, ya todos sabían que sería una niña.

El otro que se llevó la sorpresa fue Midorima, pues ambos le comunicaron que él sería el padrino de la niña. Takao conocía bien al chico de cabello verde, sabía que estaba emocionado, lo podía ver en sus ojos.

-Shin-chan no te pongas a llorar- dijo el de ojos azul plata, pasando su brazo por los hombros del más alto- no queremos que el padrino de mi niña sea un llorón.

-No estoy llorando- dijo el de cabello verde acomodándose los lentes- aún así, gracias por querer que yo sea el padrino de su hija.

- No hay de que- dijiste mirando al par de amigos- nos has apoyado durante todos estos años, y pensamos que sería lindo que nuestra niña tuviera a un padrino tan bueno como tú.

La cara de Shintaro se volvió completamente roja, sin embargo hizo lo de siempre, trato de ocultar su sonrojo mientras se acomodaba los lentes.

La semana que quedaba pasó rápido. Estabas muy nerviosa, la noche anterior a que te internaran pensaste un montón de cosas que podían salir mal. Takao trataba de calmarte de una u otra manera pero nada funcionaba. Ya estabas en la sala de parto, esperando a que te anestesiaran para poder prácticarte una cesárea. No habías querido tener un parto natural pues te aterraba incluso más que una cesárea. 

La anestesia no te hacía efecto, Takao entro para poder hablar contigo y que así te relajaras un poco. Pero en vez de hablar contigo, te empezó a cantar.

Poco a poco comenzaste a calmarte, y lentamente la anestesia te empezó a hacer efecto. Lo último que pudiste sentir fue como Takao te daba un suave beso en la frente. 

Cuando despertaste ya estabas en la sala de recuperación, al principio estabas algo desorientada, pero de golpe recordaste todo lo que había pasado, miraste a tu lado con la esperanza de encontrar la cuna donde yacería tu bebé, pero no había nada, tampoco al otro lado. Por tu mente pasaron un montón de escenarios nada favorables. Estabas a punto de echarte a llorar cuando alguien entró a la habitación.

- Al fin despiertas- quien había entrado era Kazunari. De inmediato se acercó a ti y de abrazó con delicadeza- lo hiciste bien, nuestra niña es hermosa.

-¿Dónde está ella?- dijiste emocionada hasta las lágrimas mientras lo abrazabas. Te dolía la parte baja, pero eso era normal después de una cesárea.

-Ella está bien, le están haciendo los exámenes de rutina, pronto la traerán para que la veas- juntó su frente con la tuya- es hermosa, es tan hermosa como tu.

A la media hora las enfermeras trajeron a la niña, dejaron la cuna al lado de tu cama. A penas la viste tomaste a la niña, a pesar de que Takao dijera que se parecía tú decías lo contrario, tenía el mismo cabello que él y rogabas porque tuviera el mismo color de ojos que su padre.

-¿Cómo quieres llamarla?- miraste a Kazunari mientras mecías a la niña,

-Sayumi, ella será mi pequeña princesa- se sentó a tu lado para así ver mejor a su niña.

- Creo que tú la mimaras mucho- empezaste a amamantar a la niña.

- La mimaré mucho, mucho- te dio un beso en la mejilla- y a ti también.

A los días después tanto a ti como a la niña las dejaron irse a casa. Aunque tendrías que pasar un mes entero encerrada en casa junto con la bebé, para que así las defensas de la niña se afirmaran y tu descasaras después de la cesárea.

A pesar de que Takao fue extremadamente cuidadoso con quien iba a la casa, al único que dejó tomar a la niña fue a Midorima. Según la lógica de Takao, si el de cabello verde era doctor no podía llevar gérmenes. 

-¿Cómo la llamaron?- Midorima tenía a su ahijada en brazos, ya estaba acostumbrado a tratar con niños debido a su trabajo.

-Kazunari la nombró Sayumi, dice que será su pequeña princesa- reíste un poco ante la vista. El serio Midorima con un bebé en brazos, no era algo que su círculo de amigos viera.

-Tiene los ojos de Takao- anunció el de ojos esmeralda. Esa era la primera vez que la niña abría los ojos.

De inmediato y con cierto dolor, te levantaste a ver los ojos de tu niña. Efectivamente tenía el mismo color de ojos de Takao, amabas con todo tu ser que los tuviera así.

-Mi niña tiene mis ojos- Kazunari comenzó a celebrar, como cada cosa que hacia su hija. De inmediato lo publicó en sus redes sociales, al grupo de fans que de a poco iban creciendo les encantó ver que la pequeña tenía los ojos de su padre. Definitivamente esa niña sería amada por todas las personas que la conocieran y era muy probable que cuando llegara a ser adolescente tuviera a mas de un chico detrás de ella.

Una vez que Midorima se fue, ustedes dos se acostaron en la cama con su hija en medio, disfrutando de aquellos momentos a solas, en los que no era necesario decir nada, bastaba con la presencia de las personas que más se amaba.

La niña se puso algo inquieta, así que Takao de inmediato comenzó a susurrar una canción de cuna. Te encantaba que él hiciera eso, no sólo calmaba a la niña, también lo hacia contigo. Todo el día estabas nerviosa al ser una madre primeriza, pero apenas llegaba todas tus penas se iban, sentías un alivio en el pecho al saber que tenías a alguien quien te iba a apoyar en cada paso que darías en la crianza de la niña.

-Las amo mucho- susurró Takao una vez la niña se durmió- ustedes son las personas mas importantes de mi vida.

-Nosotras también te amamos- dijiste mirándolo- te amamos mucho.

Takao se estiró y te dio un beso muy tierno, cuidando de no despertar a la niña.

................................................

hola, tiempo ha pasado mucho, pero hay razones, estaba en los últimos exámenes del semestre en la u, además por las fechas navideñas empecé a trabajar y durante la semana entre la navidad y año nuevo, merecía descansar.

espero que les guste lo que escribí, sobre la canción no encontré una con mejor calidad, pero de todos modos la canción pertenece a Oldcodex (ahí mismito canta el actor de voz de takao)




Kuroko no basuke x readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora