EL ÚLTIMO PRIMER BESO

Hola vida nueva

CAPÍTULO 7

- Señorita Tiana, despierte ya llegamos- Ella abrió sus ojos, estiró sus brazos, suspiró susurró -Nueva vida, aquí vamos- Bajaron del avión, el maletero tomó su equipaje y subieron a un lujoso auto negro. Ella dijo -¿Cómo trajeron el auto? ¿Volando?- -No, este es otro- dijo William riendo -Ah ¿Y estamos lejos de la casa de mis padres?- -No muy lejos, recuerda que a partir de hoy dejará de ser la casa de tus padres y se convertirá en tu casa- -Cierto, es que debo acostumbrarme-
un enorme portón se encontraba frente al auto y en cuestión de segundos comenzó a abrirse lentamente. El vehículo pasó entre las dos grandes puertas negras y ella al fin, pudo ver esa gran casa de dos plantas de la cuál William le había hablado durante el viaje. El auto se detuvo frente a la entrada. Luego William abrió su puerta y la ayudó a bajar del auto. Camino a la puerta blanca y los nervios inundaron su cuerpo cuando la puerta se abrió. Detrás de ella se encontraba una mujer vestida de blanco con un delantal de cocina ella -Bienvenida señorita, adelante la esperan en la sala- Dijo señalando hacia una dirección. En el camino iba admirando todo lo que se asomaba a su paso, cortinas finas, cuadros, floreros hasta que frente a ella encontró cerrada una puerta blanca de dos hojas con grandes vidrios, sus manos envueltas en nervios se posaron sobre el picaporte para abrir una de ellas. Una mujer se encontraba sentada en un sofá de espaldas a las puertas, al escuchar que estas se abrían y unos pasos lentos se acercaban decidió voltearse para ver quién se acercaba. Dirigió su mirada hacia la niña y al verla vestida de celeste supuso que era ella, la niña que tanto esperaba ver. -Tiana , no puedo creer que sea tú, estás preciosa, te ves tan grande- decía con los ojos llenos de lágrimas, mientras se acercaba a ella. Le dio un fuerte abrazo, pero este no fue correspondido ya que se encontraba atónita, quieta, de alguna manera asombrada ya que hacían más de 6 años que no veía a su madre, verla sonreír le recordó aquella foto que había perdido, y también volvieron a su mente momentos que había olvidado, donde su madre se encontraba cantando una canción de cuna y abrazándola. No sabía que debía hacer así que se dispuso a sonreír -Había olvidado que tan hermoso era verte sonreír , lamento todo lo que sucedió, ya no se si llamarte Tiani o de alguna otra forma, sinceramente lamento no haber estado contigo todo este tiempo pero te prometo que haré todo lo posible para recuperar tantos años perdidos- -No te preocupes, yo también te extrañé- Al fin ella dejó salir palabras de su boca. Anne se emocionó tanto que la abrazó nuevamente, pero esta vez Tia le devolvió el abrazo. -Tú padre no está en este momento, tuvo que salir, pero estoy segura que se pondrá tan feliz como lo estoy yo- Tiana aún estaba algo nerviosa y bastante tímida, Anne la llevó hasta su habitación. Al entrar ella quedó asombrada, era increíble, paredes rosadas, un balcón, una gran cama, escritorio, armario, y en el techo tenía pintadas nubes, se veía tan real, que cuando la vio sonrió y dijo - ¡El cielo!- Su madre le dijo -Tiana si no te sientes cómoda sólo dime, y haré lo que sea para ayudarte a sentir bien- luego de decir eso se dirigió hacia el armario y dijo -Aún hay más, por si no sabías yo diseño ropa, y escogí algunos diseños para ti, espero que te gusten, igual esta no será toda la ropa que tendrás, cuando quieras podemos ir de compras, desde ahora quiero decirte que me perdones si es que algún día no estoy para ayudarte, quizás por el trabajo o algo, pero haré lo posible para que la pases bien aquí. Sé que es difícil despegarse de la vida en Dream Town pero me gustaría que construyamos una vida juntas con tu padre y tu hermano aquí- -Está bien, lo entiendo- -Me pone tan feliz que estés aquí, sé que mamá hizo un buen trabajo contigo...- Al escuchar estas palabras Tia dejó escapar un sollozo y escalofríos recorrieron su cuerpo -Cariño, disculpa, iré a pedir que traigan tus maletas- -Está bien-. Desde su balcón podía ver que al lado había otro igual y sentía curiosidad por saber qué habitación conducía a ese balcón así que decidió salir de su habitación y explorar. Al cabo de unos minutos había recorrido toda la planta alta, sólo faltaba la puerta que se encontraba cerrada junto a su habitación, no había descubierto cómo llegar al balcón así que supuso que sería la puerta indicada y decidió entrar allí. Golpeó suavemente pero no obtuvo respuesta así que giró lentamente el picaporte, al abrirse la puerta descubrió paredes celestes, juguetes y una guitarra que le recordó a su mejor amigo -¿Quién eres tú?- al escuchar esa voz ella asustada volteó para encontrarse con quien le había hablado. Un niño estaba frente a ella mirándola fijamente - Eh... Soy Tiana- La observó con ojos llenos de sorpresa -¿Tú eres Tiana? Yo soy Harry- -Mi hermano mayor ¿cierto?- -Si... Lamento haberte asustado- -No hay problema- -Así que tú eres mi hermana y ¿qué haces en mi habitación?- -Quería saber cómo llegar al balcón que está junto al mío- -Ah... Por aquí- La llevó hasta el balcón y allí se quedaron hablando un rato -¿Dónde vivías?- -En Dream Town, una estancia de Tollymore, Newcastle- -Ah, claro la estancia de la abuela- -Mmm... ¿Cuántos años tienes?- -13 ¿tú?- -12- -Siempre quise tener un hermano o una hermana, ya comenzaba a aburrirme estando aquí sólo- -¿Por qué lo dices?- El se quedó en silencio un rato mirando hacia el suelo y luego dijo -No quiero que creas que soy malo, sólo seré sincero contigo. Ellos casi nunca están, están muy ocupados trabajando. Pero no te preocupes, contigo aquí todo será diferente, me ocuparé de eso-.